▍꒰🥀꒱ 𝐅𝐀𝐕𝐎𝐑𝐈𝐓𝐄 𝐂𝐑𝐈𝐌𝐄 . . ✩
── ❝ [ eramos más que esto, pero parece
que tenemos propocitos aun más
grandes que nosotros mismos ] ❞
· · ✩|| star wars story.
· · ✩|| no copias/traducciones.
· · ✩|| 26/9/22...
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CHAPTER NONE
❛ 𝖿𝖾𝖺𝗋 ❜
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Nymeria miraba sin expresión alguna como el cuerpo de uno de sus más queridos maestros era consumido por las llamas del fuego que se encargaba de desaser el cuerpo.
No sentía nada, solo la impotencia de no haber podido ayudar a su maestro...
Agacho la cabeza para que así ninguno de los presentes pudiera ver como esas rebeldes lágrimas se escapaban de sus ojos, con la vista nublado y un gran nudo en la garganta, recordó el último momento que paso con su sabio maestro y el gran consejo que este le dio durante uno de esos momentos donde sentía que la luz se alejaba de ella.
"Sin oscuridad no hay luz y sin luz, no hay oscuridad"
La joven castaña podía sentir los ojos de su maestra sobre ella, analizándola y a la espera de un comportamiento digno de su entrenamiento, ella no había pasado todos esos años enseñándole lo que sabía hasta ese momento como para que ella mostrara un solo rastro de debilidad.
Una vez calmada, la padawan de túnicas café oscuro alzó la mirada, todavía con la cabeza gacha, se encontró con el nuevo aprendiz de Obi-Wan. Examinó al chico de una manera poco amistosa, sus ropas parecían trapos y estaban completamente sucias, observó cómo el maestro del niño se volteaba a mirarlo, entablando una muy corta conversación.
—No cabe duda, el guerrero misterioso era un Sith... –Escucho al maestro Windu decir.
Consternada, ladeo un poco su cabeza para mirar por el rabillo de su ojo derecho a los dos maestros más importantes del consejo Jedi sintiendo como si su corazón estuviera siendo aplastado por algo que le era imposible de ver. —Siempre dos ha de haber. Ni más, ni menos. Un maestro... y un aprendiz.
Pronunció el maestro yoda. La padawan colocó una mano donde se encontraba su corazón, apretó la tela que la cubría con fuerza logrando así rasgarla levemente. —¿Pero quién fue destruido, el maestro o el aprendiz?
Cuando la castaña alzó la cabeza, su mirada se topó con el nuevo canciller supremo sintiendo algo que hacía años no había sentido...
Miedo.
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