CAPÍTULO 2

340 13 0
                                    

Desperté con el sonido de la alarma de mi celular, el sol todavía no habia salido. Eran las 5:00 AM, tenía que levantarme para ir a trabajar, a veces era tan tedioso seguir la misma rutina pero la rutina es buena, significa que tengo algo por hacer. No me gustaba esa sensación de que no estoy haciendo nada productivo o de que no estoy haciendo algo para ganar dinero. 

Dinero, dinero, dinero.

En eso consistía mis días, ganar dinero. Excepto una vez al mes donde me daba el lujo de relajarme y hacer algo para distraerme. Para luego seguir con la rutina, suelo ir a un bar llamado "EXODUS" , es un lugar accesible, por lo cual siempre está algo concurrido, era muy famoso también por contar con habitaciones en la planta de arriba. Voy a beberme mis penas en alcohol o a tener sexo. Realmente disfrutaba beber, fue un gusto adquirido no hace mucho, antes no podía probar la cerveza porque me daba nauseas. En ese lugar también me di cuenta que tenía ciertas preferias o más bien un fetiche, no lo se muy bien aún.  Todavía lo recuerdo muy bien pues fue algo que marcó una línea en mi persona.

Era la primera vez que asistía a ese lugar, mis compañeras de trabajo en el bar me habían convencido de acompañarlas pero a lo largo de la noche perdí el contacto con ellas, pues se habían ido  con sus respectivas parejas a las habitaciones que había en el establecimiento, estába sentada en la mesa que habían reservado, esta se encontraba en un rincón del bar. Era de los asientos que son correrizos. Paso un tiempo y miré a una pareja algo exótica, el chico era de estatura promedio, tenía cabello azul marino tirandole a negro, su ropa era algo colorida, pero lo que más llama la atención era su lindo rostro, tenía algo que le hacía ver tan adorable y tranquilo. Mientras que la chica que lo acompañaba también tenía una estatura normal pero por sus altos tacones hace que se viera más alta que el chico, su mirada era intimidante, su caminar era con confianza, como si el mundo estuviera a sus pies, yo quería ser como ella, pensé. 

Ambos caminaron hacia mi, la chica tenía agarrado al chico por la cintura como un gesto de protección o al menos así lo intérprete yo. Se pararon frente a mi y duraron unos segundos sin decir nada, solo los miré con una expresión neutra pues no sabía que intenciones tenían.

-Me llamo Avril y el es Tong.- explamo primero la rubia sonriendo de lado, señalandose a si misma y luego al chico peli-azul. Este solo asintió tímidamente mientras que también sonreida, era lindo, tenía sonrisa de encías. Siendo sincera, ambos eran muy bellos.

-Soy Nin, ¿Necesitan algo?.- pregunté con amabilidad, pues no había razón de ser arisca, todavía.

-ahora que lo mencionas, si- dice Avril mientras que con su mano libre se apoya en la mesa, inclinándose un poco mientras seguía sonriendo de lado.  Me cruce de brazos, y me recargue en el asiento, le di una mirada dándole a entender que prosiguiera con lo que tenía que decir. Le tomo otro par de segundos continuar.

-Quería preguntarte que si podemos unirnos a ti esta noche, ya sabes, para divertirnos.- exclamó Avril mientras que le daba una mirada penetrante y una sonrisa coqueta, ya cambiando su aparentemente habitual sonrisa de lado. Que algo sorprendida, pues ninguna pareja antes me había hecho tal propuesta. Terminé aceptando no sin antes preguntarle al chico si estaba de acuerdo, Ambos se sentaron, quedando tong en medio, avril a su derecha y yo a su izquierda.  Conversamos un poco y eran personas realmente geniales, tong al principio fue tímido pero conforme agarro confianza empezó a conversar mucho más, en cambio Avril siempre fue más dominante y no se cohibia fácilmente. Después de unas copas avril y tong empezaron a besarse con tantas ansias, tong puso su mano en mi pierna dejando suaves caricias, tratando de incluirme,  descubrí que realmente estaba disfrutando verlos besarse, como me lo esperaba avril, era quien dominaba.  Después fue mi turno de besar a tong, con una mano sostenía su rostro mientras que la otra la puse recostada en la parte de arriba del mueble llegando donde estaba avril, acerce mi mano a su cara queriendo acariciarla pero ella tomó más iniciativa, empezó a besar mi mano, luego metido dos de mis dedos a las boca para empezar a chuparlos y succionarlos, mientras los movía de adentro hacia fuera. Sorprendida solté un pequeño gemido, me gustaba las sensaciones que estaba sintiendo mi cuerpo al besar a tong y ver lo que hacía avril. Al final de la noche tuvimos Sexo en una de las habitaciones del lugar. Fue el mejor sexo que había tenido hasta ahora, compartimos nuestros números de celular, pensé que no los volvería a ver pero me equivoque.

NIN || VegasPete||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora