TONIGHT [Yeonjun x Soobin]

CAP 4: SHOCK 《SOOBIN》

Le di un último beso para luego irme corriendo.

No pensé en nada, no pensé en nadie, solo me fui, y ni siquiera fue por qué no quisiera. Tenía miedo de que si me quedaba ya no podría irme.

¿Qué me pasa? Nunca había hecho esto antes.

Entré apresurado a la sala de espera, con mi pecho subiendo y bajando rápidamente por correr apresurado, para mi mala suerte Jungwoo también estaba ahí, vi su gran sonrisa desaparecer cuando me vio, sabía que me veía alterado.

Y eso lo altero a él.

– Soobin – dijo fuerte y claro – ¿Qué paso? ¿Estas bien? ¿Recuerdas el nombre? ¿Te hizo algo? – sus preguntas fueron rápidas y no tuve tiempo de procesarlas porque recién estaba procesando que me acababa de ¡besar con un cliente!

– Woo, esto bien, solo que ... – deje la frase al aire para dar un pequeño grito de desesperación.

– No me tranquilizas – me dijo, para ir luego por un vaso de agua.

– Es que recién lo estoy procesando – le dije, acomodándome el cabello – dame unos segundos.

Me tendió un vaso con agua, se sintió tan bien, no solo el agua que bebía sino también recordar los labios que bese, es que siquiera esto es ¿real? No tenemos prohibido no besarnos con los clientes, es solo si nosotros queremos, pero yo nunca, en todos estos años, he querido algo con tantas ganas.

– ¿Ahora sí? – me pregunto Jungwoo, algo preocupado, y lo entendía, por mi reaccionar cualquiera pensaría que me hicieron algo, como lo que casi le pasa a él fuera del club.

– Creo que si – suspiré.

– Ahora si cuéntame – quiso saber mi compañero y amigo.

– Me acabo de besar con un cliente – dije, pero sus expresiones no fueron de sorpresa, solo de duda.

– ¿Y eso es malo por...? – dejo la pregunta a la mitad para que terminara la frase por él.

– Nunca lo he hecho.

– Ah, entiendo – comprendió Jungwoo – ¿Estuvo tan mal para ser tu primera ves?

– No, nada que ver, es que – quise explicarme, pero como lo hago sin que suene tan mal – cuando comencé esto, me prometí que lo único que haría aquí es bailar, no besos, no toque, no nada – suspire por segunda vez - no quiero que me traten...

– Traten como un prostituto – finalizó por mi – entiendo lo que sientes Bin, yo también pensé lo mismo los primeros años, pero algo que entendí de esto es que ellos no tienen opción, digo, saben que están vendiendo sus cuerpos de una manera sexual, saben a lo que van, nosotros no vendemos nuestros cuerpos, vendemos lo que expresan.

– ¿Cuántas veces no bailaste una canción por qué realmente lo sentías? Sentías la música- prosiguió – claro que hacemos movimientos sugerentes, pero no es con ese fin, nosotros podemos elegir, ellos lamentablemente no.

– Esto, aunque tengo unos años, es difícil – susurre.

– Y lo entiendo, corazón, pero debes entender que no estas vendiendo tu cuerpo precisamente.

– Entiendo, gracias – le dije con una pequeña sonrisa, me abrazo enseguida.

– Te pidió permiso ¿verdad?

– Lo hizo – conteste, recordando como lo besaba, como él me besaba, fue un momento glorioso que quisiera repetir.

– Pero...

– Es que – grite un poquito – yo no suelo ser así, como te explique al principio, pero con él, fue diferente, bueno... yo lo sentí diferente, me hubiera congelado simplemente al entrar si no fuera por hecho de que me sé mis líneas de memoria, al momento de terminar de bailar, me fui acercando a él, me senté en su regazo y lo bese, pero no fue cualquier beso... fue uno apasionante, dios... es que hasta ahora lo recuerdo.