- H e r.

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Mi día comenzó como cualquier otro, una casa totalmente desordenada en la que casi ni se sentía la presencia de las dos personas que se encontraban ahí (contándome a mi).

Mamá leía el periódico mientras saboreaba su caliente café. Serví el mío en una taza y traquee mi cuello, para luego mirar en silencio la concentrada cara de la anterior en el papel que tenía en manos, realmente parecía disfrutarlo. 

Coloqué la taza en la que había tomado mi café en el lavaplatos, caminé hacia la puerta y antes de salir, cogí mi mochila que se encontraba al lado de la puerta.


Llegué a la escuela y mi mirada se encontró con la de Chrissy, que parecía un poco perdida.

‒ ¿Chrissy? ¿Está todo bien? -Pronuncié mientras me acercaba a ella.

‒ ¡Oh! ¡Mar!, sí, sí, solo estaba pensando. -Me dedicó una sonrisa y entró al lugar donde debíamos tomar clases.

A medida que caminábamos, Chrissy saludaba a sus conocidos, realmente no entendía como podía ser tan amable con todos, pero si estaba segura de algo, era de que ella es una de las personas más increíbles que he conocido.

‒ Mar, ¿Cómo te fue anoche? -Preguntó algo curiosa.

‒ ¿Anoche? ¿Qué sucedió anoche, Chrissy? 

‒ Umh, ya sabes. Compraste marihuana. -Dijo lo más disimulado posible.

Reí un poco por lo que había dicho.

‒ Chrissy, sabes que lo hago muy a menudo. -Suspiré y la miré- Oh, no me digas que tú...

‒ Bueno, quiero intentar. -Me miró segura de lo que estaba diciendo, yo asentí lentamente y seguí caminando junto a ella, para luego encontrarnos con su novio.

Me crucé de brazos, sabía lo bueno que era Jason con Chrissy, ella siempre me contaba emocionada lo feliz que la hacía. Pero yo no podía evitar llevarme un poco mal con él, hacía mi esfuerzo para no ser egoísta con mi presunta única amiga, pero por más que lo intentara, Jason y yo nunca nos habíamos llevado bien.

A punto de irse, Jason me dio una mala mirada y como respuesta le mostré el dedo medio.

Chrissy solo rio y nos dirigimos a nuestras clases.




La hora del 'descanso' llegó y me senté al lado de Chrissy. La anterior (como casi siempre) no comió mucha comida, y luego la acompañe al baño esperándola afuera de este.

Tenía conocimiento sobre el trastorno de Chrissy, a pesar hable con ella varias veces, sabía que no podía hacer nada, y para no empeorar las cosas preferí no hablar más con ella sobre el tema y dejarlo ahí.

La vi salir temblorosa y sin saber que hacer, la rodee con mi brazo y comenzamos a caminar.



La jornada escolar terminó, y me dirigí al 'lugar' para comprar. Pero por sorpresa, me encontré con Eddie Munson vendiéndole a mi amiga. Me quede parada algo pensativa hasta que la chica se fue.

‒ Wow, Munson. -Dije recostada en un árbol, mirando de lejos al 'friki'

‒  Que sorpresa tenerte por aquí, Levan. Oh, espera, no es sorpresa. -Se sentó en la banca esperando a que dijera algo.

Suspiré y me acerque al anterior. Mirándolo con una sonrisa falsa. 

‒ No eres el mejor vendedor Munson, realmente no. -Sacudí mi cabello y lo mire.

‒ Bueno, peeero vendo mas barato que tú. -Me devolvió la mirada y yo negué con la cabeza.

‒ Las mías son mas baratas que las tuyas  -Sonreí y espere por su respuesta.

‒ Espera, ahora que lo recuerdo me debes algo de dinero, ¿No? -Dijo mirándome con una expresión algo sarcástica.

Rodé mis ojos y me senté.

‒ No tengo mucho, Eddie. -Saqué el dinero de mis bolsillo derecho teniendo al menos unos 40 dólares.

‒ Vamos, Marie, muéstrame tus demás bolsillos. -Me dedicó una pequeña sonrisa, y yo suspire.

Saque de mi bolsillo izquierdo 10 dólares, y de los dos de mi chaqueta saqué al menos 70 dólares.

‒ No más, eso es todo. -Hice una expresión algo rabiosa y Eddie se paró.

‒ No soy idiota, lo sabes. -Se acercó a mi y me miró desde su altura- se que guardas un poco aquí -hizo un circulo con sus manos en su pecho.

‒ Está bien, Munson. -Metí mi mano en mi camisa y saqué un billete de 20 dólares- Ahora sí no tengo nada más.

El chico tomó el dinero y lo contó, me dio una mirada y rio un poco.

‒ No seas así, Marie. Como soy buena persona te invitaré a un poco. -Sacó dos cigarrillos y me entregó uno, prendió el suyo y luego el mío- Por cierto, Chrissy quiere de la fuerte, entonces ten cuidado con ella, si es su primera vez puede ser, mmh, un poco mucho fuerte.

‒ Bien, entonces tendré que asegurarme de que no le pase nada malo. -Solté el humo y le di una mirada- Nos vemos Munson. -Dije para después irme y dejarlo solo.


Eddie Munson ‒ Drugs.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora