- C h r i s s y.

14 2 0
                                    


Después de pasar mi tarde pasando canales sentada junto a mi dormida madre, recordé lo que me dijo Eddie y pensé un poco en si era buena idea o no el ir por Chrissy.

Sobrepensé las cosas y finalmente me decidí por ir.

Según lo que sabia, lo mas probable es que ella estuviera con Jason antes de irse con Eddie, así que fui con él -quien estaba con sus amigos- y al darme cuenta de que Chrissy no estaba ahí, me iba a ir.

‒ Marie, ¿Dónde esta Chrissy? -me miro con una cara algo preocupada, a lo que le respondí.

‒ ¿En serio quieres saber? -Sonreí y me fui, pensando en que seguramente había ido primero con Eddie.


Llegue al lugar en donde Eddie vivía, y pude notar como las luces se prendían y apagaban, un feo ambiente se sentía en este lugar, desde algunos metros.

¿Es una broma?, ¿Desde cuando su casa esta embrujada? Pensé para mi misma para luego caminar hasta la puerta, pensando en tocarla. Suspire y deje mi mano en el aire, viéndome sorprendida por lo que acababa de pasar.

En ese momento había escuchado la voz de Eddie quien se encontraba casi gritando, y lo único que pensé fue que algo le había pasado a Chrissy.

Me desespere y comencé a golpear la puerta demasiado duro, sin tener alguna respuesta del otro lado, mi impaciencia era enorme, tanta, que estuve a punto de romperme los nudillos. Eso hasta escuchar un fuerte grito -al parecer- de parte de Eddie.

Baje mi puño y tragué duro, pues ahora todo estaba en silencio.

‒ ¿Todo... termin- 

Fui interrumpida de lo que estaba diciendo por la puerta abriéndose fuertemente con un agitado hombre haciéndome caer. Una caída fuerte fue detenida por mis brazos que estaban ahora completamente raspados.

El anterior me miró y pude ver en la oscuridad, su pálido rosto con una expresión de haber visto lo peor.

Me paré lentamente y mire con curiosidad la puerta, donde vi el rubio pelo de mi amiga. Suspire y camine un poco dejando de lado a Eddie, y al acercarme, vi todos sus huesos rotos, dejándome inmóvil y con unas grandes nauseas.

Un escalofrió recorrió mi cuerpo y voltee lentamente a ver a Eddie, quien parecía estar a punto de llorar. Lo mire con asco, pensando que él era quien le había hecho eso a mi amiga, aunque era algo realmente incoherente, no habían rastros de sangre y las temblorosas manos del chico tampoco tenían algún rastro de esta, sin mencionar los gritos de parte del mismo.

‒ Yo no... Yo no lo hice, podre sonar loco pero -dijo mientras movía su cabeza muy fuertemente, se acerco a mi y yo me aleje como impulso, si él había hecho eso lo más probable es que lo hiciera de nuevo.

Seguía en shock por lo recién visto, y sin ningún aviso previo, el chico tomo mi brazo y me hizo correr junto a él.


‒ Nos metimos en un pequeño lugar que al parecer era de él, y nos sentamos en el suelo algo agitados después de haber corrido tanto. 

Comencé a llorar como nunca, tenia tanto revuelto que explote emocionalmente. No sabía que hacer, que pensar, que decir, era como si lo único que supiera hacer fuera llorar y llorar y llorar.

Eddie, algo perdido, dio pequeñas palmadas en mi espalda y recostó su cabeza en la pared.

‒ Oye, Marie. -hablo cuando ya me había calmado un poco- Te contaré lo que sucedió, pero me creerás loco, seguro que si, a puesto a que te iras con la policía y di-

‒ Cállate Munson -dije con la voz algo entrecortada- Solo dímelo, no hare nada, también me puedo ver involucrada.

Él anterior suspiro y me miro, decidido a contarme lo que había pasado.

--------------------------------------------------------------------------------------------

Bueno, hasta aquí el segundo capitulo, por favor dejen su voto para que yo pueda saber que les está gustando, y olvide decirlo, pero lo mas probable es que haya momentos Ooc (Fuera del personaje) por si en alguna escena no se como actuaria el personaje.  Dicho esto nos vemos el Lunes.

Eddie Munson ‒ Drugs.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora