Capítulo 2

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La propuesta del parque de diversiones fue aceptada por sus amigos, la idea no le gustada mucho a Yugi, todo por el hecho que Tea propuesto ir en pareja, por lo tanto, lo más seguro era que la oji-azul iba a pediré a Yami que fuera con ella, debía de adelantarse a la Gardner, ¿pero cómo se lo iba a pedir?, ni siquiera puede decir un: "me gustas", ¿cómo demonios iba a decir: "¿quieres ser mi pareja?"?. Pero tenía que pedírselo, ya estaba agotado de que Anzu se metiera en su relación con el faraón, estaba a solo pocos segundos de gritaré.

Sus manos jugaban entre si mientras intentada agarrar el valor suficiente para pedírselo, pero no podía, los nervios no dejaban que se moviera, tenía frente a él a el egipcio que anotada algunas cosas para un futuro trabajo, ¡y las palabras no salían de su boca!, ciertamente era un momento tan incómodo -al menos para Yugi-.

-Yami...-el oji-rubís despegó su vista de la hoja, mirando a el oji-amatista, indicando que hablará-Sobre lo del parque... pues...-

-¿No vas a ir? -

-¡No! -negó, el faraón encajó una ceja-Dijo, si voy a ir, solo que...-

Era el momento perfecto, tenía la completa atención de Atem, no había más nadie en el salón, solo ellos dos, ¡era ahora o nunca!.

-Quería pedirte que fueras conmigo...-

La pregunta sorprendió a Yami, una sonrisa apareció en sus labios mientras un pequeño color carmesí aparecía en sus mejillas, Yugi se confundió a ver esa reacción, se sonrojo un poco cuando el oji-rubís se acercó a su rostro, sin deja ese pequeño sonrojo y esa sonrisa.

-Esperada con ansias que me lo pidieras-

-¿De... de verdad? -

-Por supuesto Yugi, me gustas y mucho-

-Yami...-

-Yugi... Yugi... Yugi... ¡¡YUGI!! -

-¿Ah?, ¿qué? -

Yugi regresó a la realidad, Yami estaba frente a él mirándolo confundido, después de todo, el oji-amatista se quedó callado sonrojado mirando a la nada de forma algo tonta.

-¿Te sientes bien?, te quedaste callado-

-Yo...-se sintió un completo idiota, ¿cómo se le ocurría imaginar tales cosas con el egipcio? -Estoy bien, tranquilo-

-De acuerdo...-no le creyó mucho, el Muto solo le sonrió un poco-Y claro, me gustaría ir contigo-

-¡¿De verdad?! -

-Por supuesto, después de todo, es una salida-

Las ilusiones de Yugi se fueron a escuchar la palabra "salida", sonrió de forma amable para no preocupar a el faraón, aunque debía admitir que eso le dolió un poco.

-Sí... una salida de... am-...ami-...-no podía decir algo más aparte de "am" y "ami", estaba atorado en esas dos frases, el oji-rubís encajó una ceja mirándolo algo confundido, últimamente Yugi actuada de forma rara-Am-... Ami...-

-Amigos-terminó la palabra, el oji-amatista asistió de forma lenta-Andas raro, ¿te sientes bien Yugi?, porque si no es así, creo que debemos cancelar lo del parqu-...-

-¡NO! -se tapó la boca por aquel grito que dio, Yami parpadeó algunas veces por aquel repentino grito-Voy a ir, solo estoy algo nervioso-

-¿Por qué?, no es nada fuera de este mundo-

»Es mi momento« pensó el Muto, dejó escapar un pequeño suspiro para calmarse, agarró las manos del egipcio, Atem lo miró algo confundido, se encontró con una sonrisa algo divertida, provocando un sonrojo en sus mejillas.

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