○ capítulo único ○

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Bucky, sé que estás teniendo un mal día, pero no es necesario que me estés regañando...

Bueno, tal vez si me dejaras jodidamente solo no te estaría regañando, ¿verdad?.

Las palabras resonaron en la cabeza de Bucky mientras yacía en la cama, sin querer estar allí pero sin energía para levantarse. Se había despertado sintiéndose como una mierda y se dijo a sí mismo que se levantaría de la cama después de que Steve se fuera a correr, pero cuando su esposo regresó, él todavía estaba allí. Pasó la mañana entrando y saliendo del sueño, sin descansar nunca y sintiéndose cada vez más cansado a medida que pasaban las horas.

Había sido una noche calurosa, por lo que estaba sudoroso. Su piel estaba sucia, su cabello grasoso, y cada vez que se veía en el espejo del armario que estaba al lado de su cama, se sentía asqueroso. Se dijo a sí mismo que se levantaría y se ducharía, lavaría la suciedad, pero no lo hizo.

Durante toda la mañana, Steve siguió viniendo y preguntando si estaba bien. Él decía que sí y se iba, solo para volver media hora después. Cuando finalmente preguntó qué estaba mal, Bucky dijo: "¿No puedo quedarme en mi propia cama cuando quiero?. Estoy cansado, déjame en paz" porque estaba frustrado. No tenía idea de por qué se sentía así y no necesitaba que Steve lo juzgara.

Alrededor de la hora del almuerzo, su estómago comenzó a rugir, por lo que debería haberse levantado y comido, pero no lo hizo. Steve vino a preguntarle qué le apetecía comer y, aunque estaba increíblemente hambriento, ninguna opción de comida sonaba ni remotamente atractiva. Cuando Steve insistió en que necesitaba comer, le dijo que podía decidir por sí mismo lo que debía o no debía hacer, "gracias, mamá". Así que Steve volvió a salir de la habitación.

Eran alrededor de las 3:00 p. m. cuando una combinación de necesidad de usar el baño y su hambre, que se volvió físicamente dolorosa, finalmente lo sacaron de la cama. Observó los círculos oscuros debajo de sus ojos y la hinchazón de su rostro mientras estaba en el baño y sintió que su exterior se estaba transformando, para coincidir con cómo se sentía por dentro. Cuando llegó a la cocina, vio que Steve le había dejado un poco de pasta del almuerzo en una bandeja. Tomó un tenedor y comenzó a comer. Estaba frío, pero de todos modos no iba a disfrutarlo, solo quería volver a la cama.

Puedo calentarlo para ti si quieres.

Aún está lo suficientemente caliente.

¿Quieres sentarte?. Estás comiendo rápido, no quieres enfermarte.

No soy un niño, Steve.

Le dio la espalda a Steve y siguió comiendo. ¿Por qué no podía simplemente dejarlo en paz?, ¡Él no era un bebé!. Y fue entonces cuando Steve dijo las palabras que lo hicieron responder de una manera que no debería haber hecho. Se arrepintió tan pronto como vio el dolor en los ojos de Steve, pero en ese momento no pudo aceptarlo. Steve agarró sus llaves y salió de la casa, con los hombros encorvados y la cabeza baja mientras decía, "volveré más tarde. Te amo, Buck". Bucky no respondió, solo siguió comiendo.

Terminó toda la bandeja y se dirigió de nuevo a la cama. No pasó mucho tiempo hasta que su estómago comenzó a doler por una razón completamente nueva. No debió haber comido tanto, no debió haber comido tan rápido. No lo habría hecho si no hubiera tenido tanta hambre para empezar. No tendría tanta hambre si hubiera desayunado o almorzado a las horas adecuadas. Habría hecho eso si no hubiera pasado todo el día en la cama. Así que Steve había tenido razón todo el tiempo. Steve se había levantado temprano, había salido a correr, desayunado, se había duchado y probablemente había trabajado todo el tiempo mientras Bucky estaba en la cama. Junto a él, Bucky era una basura perezosa e inútil.

Lado Lunar - [stucky]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora