𝐑 𝐔 𝐌𝐈𝐍𝐄? - 𝐒𝐮𝐧𝐚 𝐑𝐢𝐧𝐭𝐚𝐫𝐨

05.

𝐑 𝐔 𝐌𝐈𝐍𝐄?
♡: ʸ ᵃ ᵗ ˢ ᵘ ᵐ ⁱ ʳ ᵒ _ ᶜ ʰ ᵃ ⁿ

ᴄᴏᴍᴇ ᴛᴏ ᴍʏ ꜱɪᴅᴇ

  ¿Eres feliz, Jiyu Furidamu?

  Me pregunté mentalmente, claramente no se lo preguntaría de forma directa. Aunque la duda me carcome, no sería capaz de preguntarle eso.
  Aún así, al ver sus ojos, estos encontraban en una tristeza profunda. No tenían brillo alguno, estaban en completa oscuridad.
  Quiero sacarla de allí, que sea feliz de una buena vez. Ella se merece el cielo y más. Me frustraba que la trate de esa manera, sabiendo que es una chica muy buena.

  Borré todos mis pensamientos al sentir que llegaba un mensaje a mi móvil. Lo tomé, estaba en la mesa ratona en frente del sillón. Al leer el mensaje, el cual provenía de el mayor de los gemelos, vi que me había invitado a tomar algo por allí. Atsumu si que le gustaba ir a tomar algo por allí. Rápidamente le respondí un "sí", no tenía nada para hacer.
  Me levante de aquel cómodo sofá gris y fui a darme una ducha rápida. Salí Rápidamente, ne cambié, tomé algunas cosas y me dirigí en moto hacia el bar que había indicado el rubio.
  Al llegar, ingrese al bar, tenía un ambiente tranquilo y se escuchaba de fondo jazz suave. Las personas hablaban tranquilamente y bebían, obviamente. Busqué con la miranda a mis amigos, pero no los encontré. Supuse que llegarían más tarde.

— ¿Suna? —escuche una voz conocida, que provenía de la barra—

  Dirigí mi mirada hacia allí, encontrándome con la morena y el castaño de la banda. Sonreí y me dirigí hacia ellos, habíamos hablado un rato antes que se fueran y en ese momento logramos conocer nuestros nombres. Kazumi se llamaba la chica y Miyabi su acompañante.

— buenas noches, chicos ¿como están? —pregunté acercándome a ellos—

— bien ¿y tú? —preguntó energética la Kazumi, parecía nunca cansarse—

— bien, estoy por juntarme con unos amigos, aquí, pero aún no han venido —les expliqué, no quería sonar tan cortante—

— genial, si quieren puedes sentarte con nosotros, mientras los esperas —sugirió Miyabi tranquilo, mientras señalaba el asiento de al lado—

  Me causaba mucha gracia el contraste de los dos. Kazumi era una chica muy inquieta y energética, no paraba de hablar y halagar a todos los que conoce, es una chica bromista y muy extrovertida. Mientras que Miyabi era muy paciente y tranquilo, se dedicaba a escuchar a su compañera y le prestaba gran atención, al hablar dice buenos comentarios y es más reservado que la chica. Sin duda se complementaban y hacían buena pareja.

— ¡Suna! —unos brazos me rodearon por la espalda—

Mire sobre mí hombro y sonreí, era mi pelinegra favorita. Se separó de mi y me dedico una sonrisa ladina.

— ¿qué haces aquí? pensé que eras un chico que trabajaba, no que anda de perezoso como estos de aquí —

  Me reí ante su comentario, sin duda su personalidad cambiaba cuando no estaba con aquel estúpido.

— ¡oye! no somos unos perezosos ¡la qué duerme hasta las tres de la tarde eres tú! —se quejó la contraria—

  Jiyu, aún con su sonrisa ladina abrazo por los hombros a su amiga, haciendo que ella se agache, ya que estaba sentada en una banqueta alta.

— vamos, si tu eres más hippie que Miyabi, no haces nada de nada —

— ¡Jiyu, sueltame que me caigo! — se quejaba Kazumi, acto seguido mordió el brazo de la pelinegra, haciendo que la contraria la soltará rápidamente—

  La de ojos azules, luego de insultar a su amiga, se dirigió a la banqueta vacía que se encontraba a mi lado. Pidió una cerveza, yo imite su acción.

— Suna, quiero conocerte más, háblame sobre ti —dijo directa la femenina, mientras apoyaba su cabeza sobre su mano y me miraba atenta—

— oh, no hay nada interesante. Estudio cinematografía y trabajo en un bar los fines de semana para poder darme mis gustos. Me gusta mucho usar mi móvil y grabar muchas cosas , tengo muchos recuerdos en este aparato —apunte mi móvil mientras terminaba de hablar—

— eso suena genial, si necesitas a una linda actriz, aquí me tienes —bromeo guiñandome el ojo—

—solté una corta risa— seguro serías la más hermosa  de todo el cast de actores —

  Sus mejillas se sonrojaron, pero aún me seguía mirando.

— si me lo dices tu, te creo —

  Seguimos hablando por un rato más, mis amigos llegaron, Ume también estaba con ellos la cual al mirarme con la pelinegra subía y bajaba sus cejas, mirándome de manera picara. Lo peor de todo era que Atsumu también imitaba su acción. Eran muy molestos.
  Decidimos ir todos juntos a una de las mesas largar y altas del bar, así estaríamos más cómodos. Para mi mala suerte, la rubia se sento en frente de Furidamu.

— y dime, chica ¿tu eres eres la que trae loco a mi querido amigo? —preguntó mi "mejor amiga" curiosidad—

  Le dirigió una mirada cómplice a Atsumu, que por desgracia se sentaban el lado. No puedo tener tanta mala suerte en un día.

— Suna no para de nombrarte, realmente lo tienes loquito al pobre —acotó el rubio, ganándose una mala mirada por parte de mí—

— ¿es en serio lo que dicen, Suna? —preguntó Jiyu divertida, mirando a mis ojos—

  Solo me encogí de hombros, tomando un trago de cerveza. Lo que decían era verdad, pero no le iba a decir que era cierto.

— pues que pena, tengo novio, Suna —una pizca de miedo se notaba en su voz, seguro la obligaba a estar con él—

  La verdad es que no encontraba otra razón por la que estuviera con esa horrenda persona.

— pero puedes irte de su lado y venir al mío —murmuré, para que solo ella lo escuchara—