a mis diecisiete.

Chapter VIII

BeomGyu abrió los ojos, miró a un lado y vio ropa limpia al costado de una bocina. Una voz sonó a través del aparato, tocó su cabeza porque el sonido había sido un poco rudo.

─Idiota, te necesito en mi cuarto ahora.

¿Pero qué?

─¡Idiota, te estoy hablando!

Tomó el aparato y lo apagó, suspiró y comenzó a vestirse, se sentía sucio, pero en ese sitio no había baños así que se tenía que conformar.

La puerta se abrió y vio a los cuatro chicos, terminó de abrochar la camisa y caminó hacia la puerta.

─Escúchanos bien BeomGyu–...

─Sí es mismo discurso no me interesa, pueden matarme si quieren porque primero muerto que hacer lo que ella me pide.

Salió de ahí, caminó hacia la cocina y tomó una manzana y la masticó. EunBi no vendría por tres días así que ahora estaba solo.

Tomó el camino al patio y se sentó en el césped, el sol aún no salía pero se sentía cálido el clima. Un recuerdo llegó, pero lo alejó rápidamente, no quería recordar su vida de afuera porque sabía que no iba a volver a revivirlos.

A lo lejos vio a un guardia entrar con un cachorro en brazos, fue soltado y el can se acercó a él. Lo cargó y lo acarició, los mafiosos aparecieron.

─EunBi pidió un cachorro para ti, ahí lo tienes.

Los miró de reojo un poco incómodo.

─Gracias, lo cuidaré bien.

─Está bien, ahora que EunBi no vendrá por tres días vas a hacer la comida para todos. No desobedezcas, BeomGyu.

─Ya les dije que no haré nada para ella.

─Ella es tu jefa, tienes que obedecerla así como lo haces con nosotros.

BeomGyu suspiró resignado─: Está bien, pero ahora que ella está ¿Pueden dejarme libre?

─No.

─¿De qué les sirve que esté aquí? La tienen a ella, pueden tener sexo con ella.

─Fuiste vendido, ella será la que tendrá nuestros hijos, pero tú eres un empleado.

─Fui vendido injustamente.

─No es nuestra culpa.

─De qué sirve rogar ¿No es así? Para ustedes es fácil joderle la vida a alguien porque ustedes no sufren o es más, dudo que sientan.

Se alejó de ahí para caminar de nuevo a la cocina, dejó el perrito a un lado y se lavó las manos para comenzar a preparar su desayuno.

─Oye estúpido.

Se volteó, pero no esperó recibir una cachetada. Se tocó la mejilla y comenzó a jalarle el cabello.

─Conmigo no te metas estúpida, intenté hacerte el desayuno ahora te jodes.

─¡Mi cabello! ¡Ayuda!

Los cuatro chicos ingresaron, TaeHyun y YeonJun fue a detener a BeomGyu mientras que SooBin y HueningKai agarraban a HyeWon.

─¡¿Qué les pasa?! ¡Comportense! ─exclamó SooBin molesto por la actitud de ambos.

─Ese chiquillo me comenzó a jalar el cabello de la nada, solo le pedí el desayuno.

─Eres una mentirosa ¡Ella miente!

─A ver, se calman los dos ─habló YeonJun─. Realmente que pasó.

─Vino y me tiró una cachetada de la nada, no me iba a dejar golpear.

─Chicos, él me golpeó...

La chica fingió una voz, BeomGyu rodó los ojos.

─Deja de mentir, yo nunca te golpearía sin ninguna razón, no estoy loco como tú.

─¿Van a dejar que me hable así?

─¡Es que eres una mentirosa! Viniste y me golpeaste ¿Estás mal de la mente para golpear a las personas o–...

Su oración se quedó a la mitad al sentir el golpe de SooBin, BeomGyu cerró los ojos y suspiró negando.

─¡Están locos! ¿Acaso sabes la verdadera razón del porqué estás aquí? ¡Solo eres un vientre de alquiler, luego te matarán!

─BeomGyu.

─Ellos son así, no tienen sentimientos, solo te follan y luego de que tengan sus hijos te mueres.

─BeomGyu.

Choi se soltó y salió de ahí para irse al sótano y encerrarse, HyeWon se quedó abrazada a HueningKai mientras este acaricia su espalda.

─¡Choi BeomGyu, ven para acá!

SooBin lo siguió, YeonJun fue con él para evitar cualquier cosa. BeomGyu se encerró en el cuarto y se soltó a llorar, no de dolor sino de frustración.

La puerta se abrió con brutalidad, SooBin lo miró con enojo total.

─¿Qué? ¿Qué vas a hacerme? ¿Vas a violarme? ¿Vas a golpearme con tu látigo? Eso es lo único que sabes hacer, porque estás tan mal de la mente y que la palabra hablar no entra en ella y sin más vas a los golpes.

─Baja tu tono estúpido.

─¿Y si no quiero? ¿Vas a matarme? Hazlo, disparame, ya caí en que no voy a volver con mi familia nunca más.

SooBin no dijo nada, YeonJun llegó con ellos y lo sacó de ahí. BeomGyu se quedó encerrado porque era mejor allí que con aquellos chicos.

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BeomGyu abrió los ojos al sentir unas leves lamidas en su rostro, miró al cachorro y lo acarició.

─¿Debería matarme? No voy volver a ver a mi familia, ya no tengo razones para estar en el mundo...

Acarició su cabeza y el perrito soltó un leve llanto, BeomGyu suspiró y secó sus lágrimas.

─Pero que tonterías digo, ahora te tengo a ti y no te voy a dejar solo.

La puerta se abrió y por ella entró HueningKai con una bandeja en brazos. Choi no lo miró, ya no le interesaba saber porque estaban allí porque ya lo sabía y eso no iba a cambiar.

─Te traje un poco de comida, también al perrito.

─No tengo hambre.

─Tienes que comer, son las seis y no haz comido nada desde la mañana.

─Retírate, por favor, no quiero hablar con nadie.

─Sí así lo quieres está bien, pero te recomiendo que comas ya que no es bueno pasar hambre.

El hombre salió, BeomGyu se quedó en silencio y luego camina hacia la comida para llevarla hacia el colchón. Tomo asiento al lado del perrito y le extendió la comida.

─Vamos a comer juntos, tenemos que comer para que tú crezcas sano y fuerte.

El can soltó un ladrido haciéndole sonreír. Ambos comenzaron a comer jugando algunas veces hasta que terminaron.

─Vamos, es hora de volver a dormir.

Sonrió y dejó todo al lado de la puerta para luego acostarse en el colchón.

─Buenas noches.

Lo que BeomGyu no sabía es que algo ya estaba creciendo dentro de él.