LA BROMA

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Cómo hace un hermoso día soleado, Kelly camina dos cuadras hacia el restaurant de siempre por qué solo queda a dos cuadras de su oficina.
En el transcurso ella ve a un hombre negro vagabundo pidiendo limosna a la gente. Pero las personas trataban de evitarlo. La chica decide jugar y hacerle una broma sucia al mendigo. A medida que se acerca al vagabundo, siente un olor fétido que la golpea. Este mal olor venía del hombre sin hogar.

"¡Uf! ¡Con razón la gente trata de evitarlo, tal vez yo no debería hacerlo!... ¡Nah, esto será divertido y le voy a dar una lección!", así pensó Kelly. Finalmente se acercó al pordiosero.

"Disculpe señora, ¿podría darme algo de dinero?" el mendigo le pregunto

"¡Sí!", y ella le dio un billete de $50. Dólares.

"¡Gracias!" El hombre sin hogar estaba feliz, hasta que se dio cuenta del billete de $50. Dólares era falso.

"¡Hey mujer! ¡Hey mujer! ¿Cuál es su gran idea de darme este billete falso de cincuenta?" Le pregunto él.

"¿No es obvio?... Le contesta la rubia y con tono pedante le dice ¡Consigue un trabajo de verdad, eres un holgazán!..." Le grito burlándose del negro, se alejó del vagabundo, riendo fuertemente y meneando su hermoso trasero.

"¡Hey mujer!" Vuelve y grita él hombre sin hogar la persigue y logra alcanzarla y le llega a tocar el brazo.

"¡Uf! ¡Aléjese de mí!" Dice la rubia arrugando la nariz e Inmediatamente empuja al pordiosero negro, haciéndolo caer hacia tras.

Él rápidamente sé levanta y le especta"¡Te traeré de vuelta para esto!... ¿Escúchame?... ¡Yo soy Frank me pondré en contacto contigo y me las pagaras por burlarte de mí!" El negro la amenazo.

"¡Ole!" Le responde Kelly enseñándole su dedo medio al vagabundo y retomo su camino.

«¡Oh-ho, ho, ho! ¡Eso es lo que ella quiere! Pensó de inmediato él vagabundo ¡Pues bien, te prometo que eso es lo que vas a conseguir!» Esa reacción de sacar el dedo medio era señal sexual y Frank como hombre de calle la conocía muy bien así que la siguió en secreto. Él la observa hasta que ella entra en la cafetería. Él vagabundo no va en la misma acera que ella camina él va por la acera del frente y luego se esconde en el recodo de la calle. Desde su escondite tiene una vista perfecta de la cafetería. Él tenía la intención de esperarla hasta que vuelva a salir del restaurant. Podía esperar para siempre, si lo que más le sobraba a él era el tiempo.

Después de que paso media hora aproximadamente, Kelly salió de la cafetería y se dirige de nuevo hacia su oficina por el mismo camino por donde vino. Frank corre rápidamente a través de la calle de enfrente y reanuda su persecución. Tuvo cuidado de no seguirla demasiado cerca. Él la sigue hasta cuando entra en la firma de abogados.

"Esto debe ser el sitio donde trabaja está perra blanca. Lo dijo en un pensamiento y agrego para si mismo. Voy a esperarla hasta que salga". Así pensó Frank estando en la puerta del la firma de abogados, luego se fue a la esquina de la calle para esconderse y esperarla pacientemente hasta que salga de su trabajo.

Llegó la noche y al fin Kelly sale de su trabajo. Al verla salir, el negro corre a través de la calle y la sigue prudentemente. Él la sigue hasta la entrada del parque al parecer ese es su parqueadero habitual. Ya la tenía al alcance de sus manos pero sabía que no podía llevársela ahora, aún la tarde estaba clara. Él rápidamente sé esconde en unos arbustos del parqueo y fija su atención en el coche rojo de la chica. Él tiene una visión completa de la matrícula del carro. Saca un lapicero y un papel y escribe los números de la placa.

"¡Ahora si tendré el gusto de conocerte, de conocerte mejor pequeña!" él lo dijo en voz alta, después de que ella se fuera manejando su coche, el hombre sin hogar se dirigió a la parada de autobús. Frank tenía algo de dinero que le dieron algunas buenas personas.
Precisamente ese día había salido Frank a pedir limosna por qué el último trabajo que había tenido ya había acabado y como vivía allí mismo donde trabajaba le tocó que abandonar el lugar después de cinco jodidos días buscando nuevo empleo aún no conseguía nada y los albergues para vagabundos estaban colapsados. La idea de pedir limosna le parecía avergonzante. Luego pensó que más avergonzante es estar sucio y sin comer por eso ese día decidió tirar su orgullo a la mierda y hacer algo para poder sobrevivir miestras conseguía un trabajo decente así fuera repartiendo volantes o en alguna construcción no le importaba él sé le media a todo menos a matar o a traficar con drogas eso, sí no lo hacia él sabía que muchos otros desdichados conseguían esa clase de trabajos que resultaban más fácil de conseguir. Pero él siempre había Sido un negro pobre pero honrado.
Momentos después cuando dejó de autoanalizarse dijo un poco más entusiasmado.

"Es hora de un viaje a la biblioteca." El autobús llega al paradero y caminando se dirige a la biblioteca. En la biblioteca busca un poco de información con la referencia de la matrícula del carro...

En la pantalla del computador figura que su nombre es Kelly Montoya, 24 años de edad abogada y vive sola, no hay referencia de familiares al parecer dice en el reporte que ambos padres hace algunos años fallecieron en un acidente automovilístico, sigue leyendo y al parecer no tiene más familiares y es hija única.
"¡Perfecto dice Frank con una sonrisa de satifación que enseñaban su hermosa dentadura blanca bien alineada y nunca uso braket!" Volvió a replicar. "Ella no vive muy lejos de su trabajo y sólo tomaré otro autobús para llegar a su calle. Él pensaba feliz mientras caminaba que ¡La tecnología es tan grande que no le costó nada de esfuerzo saber casi todo de ella!... ¡Esto es demasiado bueno! Dijo y otra vez sonrió.

Después de que él consigue la información exacta de la chica rubia, se va muy cerca de allí a un puesto de hot dog a conseguir un bocado para comer y luego se dirigió a la parada del autobús. El vehículo llego pronto y se pone a pensar en su plan. Estaba totalmente lleno de energía y su mente estaba llena de pensamientos perversos sobre Kelly.
Con una sonrisa de oreja a oreja camino despacio pero con pasos firmes hacia su objetivo.

La Mujer Blanca Del Vagabundo Negro  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora