EL CHEQUE

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Pon el cheque a mi nombre Frank Nelson y pon la cantidad acordada, Le dijo el entonó como sí de verdad él quisiera su dinero pero la verdad era que el solo quería estar allí con ella. Volvió y reflexiono y sé dijo mentalmente que lo de ellos no existía que sólo había, sido un error de su parte por haberse dejado llevar por la ira y las ganas de vengarse sé sintió muy humillando cuando descubrió que ella le había dado un billete falso y eso para una persona de la calle como él, eso era una gran ofensa.
Kelly le entrego el cheque firmado con mucho más de dinero de lo acordado, ella no sabe porque lo hizo sin embargo se sintió satisfecha al hacerlo y le volvió a repetir que ella no llamaría a la policía por qué no quería, que nadie sé enterará de lo ocurrido por qué su reputación de abogada no podría verse mezclada en algo así mejor olvidaría el incidente y cada uno seguiría con su vida.

Ella se alegró de que su terrible experiencia casi ya ha terminado. “¡Ok, hablo Frank así se hace, me voy muy feliz, pero te voy a extrañar un montón, preciosa!”. De repente se siente caliente y le pone sus negras manos sobre sus pechos y luego le da un beso en el cuello y su boca.

“¡Pensé que habías dicho que te ibas réplica Kelly y además yo ya cumplí con lo que te prometí!” ella le reclamo con un tono un poco molesto  y sin mucha firmeza por qué ese hombre la confundia de una manera muy extraña.

“Yo sólo quería darte las gracias por el botín y por el gran placer que me has dado. Expresó él «¡Gracias nena!» la jalo y le busco la boca para besarla apasionadamente y largamente con lengua, ella le correspondió el beso y ahora sintió los besos de ese hombre muy agradables y dulces, ambos estaban abrazados sin ninguna prisa de terminar ese idilio que en pocas horas y en situación adversas había nacido en ellos un gran placer de estar el uno en brazos del otro y al mismo tiempo ambos sé repetían mentalmente que eso no podía ser que era una locura.

Una vez que se fue Frank, la chica empezó a llorar, no sabía si era por lo que la había violado violentamente un negro vagabundo y haberla humillando en todo momento o porque ya lo extrañaba y necesitaba de su pene negro, Hay no, aún estaba confundida pensó ella con mucha angustia.

Ella se quedó en su casa todo el resto del sábado llorando. Cuando por fin se durmió, tiene una pesadilla que Frank la estaba violando de nuevo. Cuando se despierta sola y cansada sintió algo extraño en su interior.
La noche que había dormido en brazos de Frank después de tener sexo desmesuradamente noto que durmió relajada y profundamente no necesito tomar pastillas para dormir, desde el trágico accidente donde fallecieron sus padres hace tres años ella nunca había podido volver a dormir bien. Las únicas noches que dormía era cuando tomaba sus pastillas de lo contrario pasaba la noche en vela pensando lo sola que estaba en el mundo su única distracción era su trabajo como abogada donde daba todo de si dado que su profesión era lo único verdadero que ella tenía.

El domingo en la mañana, decide quedarse también en casa, sé sentía sola y deprimida más que nunca. Más tarde ese día Kelly estaba viendo la televisión, tratando de olvidar su terrible calvario y gran placer sexual y trataba de olvidar todo lo sucedido. Después de varias horas consiguió calmarse un poco y poner sus pensamientos en orden. cuando de repente suena el teléfono.

Kelly: ¿Hola?

Frank: Hola Kelly, ¿cómo estás?

Kelly: Ella sé quedó de piedra cuando escucho la ronca, viril y profunda voz. Una voz que aún que la había escuchado poco sabía que jamás olvidaría era él.
Al sentir su voz en su oído recordó como aquella noche él le susurro tantas veces que ella le pertenecía y dónde también él con cada embestida le decía palabras lascivas que sólo la hacían calentar más. Ella como pudo logro calmarse y le contesto con una fingida voz molesta ¿Frank?, ¡¿Por qué me estás llamando?! Usted dijo que me dejaria en paz!
El sábado cuando Frank salió de casa de Kelly tomo el autobús y en el camino sólo pensó en ella en su piel tan suave como la seda, pensó en sus gemidos de placer y en la forma como sé retorcía cuando tenía un orgasmo, también pensó en su coño tan perfecto y apretado recordando así cuando ella le dijo que una sola vez había tenido sexo y él juro que esa única vez no le había dado satifación. Ella era casi vírgen la verdad la sintió sin experiencia cuando la obligó a chupar su pene.
Dios que había hecho recordó que en el orfanato una de las monjas siempre decía que no era bueno dejarse llevar por la ira y de verdad ahora lo comprendía estuvo mal haberla atacado como un animal y sin su voluntad y esa maña que vio sus mejillas golpeadas por causa de él sé sintió una basura un hombre sin valores y la verdad él no era así la calle lo había endurecido sí, pero él nunca fue un hombre violento y nunca había tomado una mujer a la fuerza.
Pero es que ella desataba en él todo lo volvía loco y a la vez lo volvía apasionado sentía ganas de protegerla y a su vez de castigarla por ser una mujer arrogante.
Dios que lío sé desvía una y otra vez como hago para sacarla de mi mente.
Y de repente en la primera parada se bajó del autobús y como un zombie camino directo al teléfono público y de repente escucho esa voz tierna de ella y lo que pasó a continuación él lo dijo por qué quería volver a escuchar sus gemidos al tener un orgasmos él quería escuchar eso una última vez para tener otra vez control sobre sí mismo.
Ella le respondí de mala gana y él no sé dió quería escuchar sus gemidos por última vez y lo lograría fuera como fuera.
 
Frank: Lo haré, pero primero quiero que hagas algo por mí.

Kelly: ¡¿Qué?!

Frank: «¡Un poco de sexo por teléfono!»

Kelly: ¡Usted es un hombre pervertido! Y dime ¿Cómo diablos sabes mi número?

Frank: Te dije que yo sé todo sobre ti, Kelly. Ahora haz esto como una última cosa para mí y te prometo que te voy a dejar sola para siempre.

Kelly: ¿Me lo prometes?

Frank: ¡Sí, sólo has esto o voy a ir a tú casa otra vez!

Kelly: ¡No!, si lo haré!

Frank: ¡Buena chica! ¡Ahora imagínate que estoy en tú oficina. Te agarro por las caderas; te pongo sobre el escritorio y levanto tú falda corta y me muestras la tanga rosa que te compré y luego te la quitas y me dejas masturbar tu húmedo y sabroso coño! ¡Dime que ya estas caliente! Pregunto Frank con demasiada prisa y ansiedad.

Kelly no quería responder nada, pero siente que su vagina ya se ésta humedeciendo muy rápidamente. Al escuchar su voz tan caliente esa voz que le trae muchos recuerdos.

Frank: ¡Cuéntame o iré otra vez a tú amorosa casa! La amenazó la verdad él estaba dispuesto a todo esa mujer le quitaba la razón.

Kelly: ¡Sí, sí que me enciendo y estoy excitada! Responde ella de inmediato.

Frank: ¡Bueno! Ahora una última cosa! Quiero que te quites la ropa y empieza a masturbarte!.

Kelly: «¡¿Qué ?!»

Frank: ¡Haz lo que te ordeno, o voy a ir!

Kelly: ¡Ok, lo haré!.

Frank: ¡Pon el teléfono en altavoz para que pueda oírte gemir!

Kelly se quita la ropa y empieza a apretar y acariciar sus tetas y luego empieza a tocar su vagina. Ella trata de reprimir sus sentimientos de estas emociones sexuales autocomplacientes, pero es en vano. Su coño comienza a ponerse húmedo y más húmedo. Ella comienza a gemir y gemir, tiene un tremendo orgasmo. “¡¡OHHHHHH… AAAHHHH!!”
Al escuchar esto el pene de Frank sé pudo como un rejo y no sé masturbo él también por qué estaba en plena calle. Pero él sabía que sus gemidos eran de verdad no había nada fingido en ella y eso a él le gustó, le gustó saber que así fuera poco el tenía aún control sobre la sexualidad de ella.

Frank: Le responde emocionado «¡Buen trabajo princesa, la verdad Kelly, no iba a creer lo que sentiste sin estar contigo, pero veo que aún tienes latentes mis calientes recuerdos y eso me satisface, no me equivoque!» ¡Gracias! Y como respetó tú desicion voy a dejarte sola para siempre, te amo cariño. «Adiós Hermosa.» Se despidió y colgó el teléfono él no podía dar crédito a sus propios palabras le había contestado así sin más que la amaba uffff estoy loco, como voy a amar a una mujer que apenas conozco y a demás viole y ultraje pensó amargamente Frank mientras seguís su camino.

Kelly al escuchar sus palabras y sentir que el cortaba la llamada empieza a llorar. No podía creer que Frank todavía tenía control sobre ella y tampoco podía creer que un hombre como el tan rudo y cruel hubiera confesado así, sin más que la amaba. "Dios mío esto no puede ser real no, no lo es él no puede amarme no, nos conocemos y su forma de haber abusado de mi fue violenta y despiadada lloro tanto ese día que sé quedó dormida.  Ella esperaba que le pasara el estrés sexual traumático. Mientras que está durmiendo, tiene otra pesadilla que Frank la viola con más dureza. Se despierta con un susto y se da cuenta de que ésta húmeda y con ganas de follar.
Maldito hombre murmuró enojada por qué tuviste que llegar a mi vida y cambiarlo todo por qué te odio Frank Nelson te odio y también te extraño aquí en esta cama.
Otra vez pensó en la confesión de el al decirle "Te amo cariño" exactamente eso fue lo que él le dijo y sintió una llama arder en su interior era la primera vez que alguien le decía que la amaba. Sus parejas anteriores nunca sé lo dijeron o demostraron sólo eran tipos superficiales que la tenían a ella como un trofeo que mostrar y alardear que estaban con una mujer bonita.
Tampoco era que ella mostraba mucho interés con ellos de los tres novios que tuvo sólo con Samuel tuvo sexo cuando cumplió sus 18 años y sólo fue por presión de sus amigas las cuales se burlaban de ella por ser virgen y ese día de sexo con Samuel en casa de él no le pareció a ella excitante sintió un leve dolor mientras el rompía su himen del resto nada la hizo sentir apasionada.
Sus amigas le habían dicho que tener sexo era como tocar el cielo con las manos pero ese día con Samuel no tocó nada, emcabio con Frank tocó el cielo y el infierno al mismo tiempo al tener por vez primera un verdadero orgasmo a pesar de su violencia a pesar que ella no quería al principio después todo había cambiado y ahora estaba sola en casa llorando por su confusión no podía creer que una mujer como ella albergará esos pensamientos lujuriosos por un negro vagabundo.

La Mujer Blanca Del Vagabundo Negro  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora