Amor duro... brutal como tú 2

Capitulo 45

"¿Tienes hambre?" Le pregunto a Day porqué Day no desayunó.

“Un poco, ¿y Khun Kamol?”, preguntó Day.

“En la habitación con Kim. Dijo que si te despertabas, te llevaré a comer", respondió Brick. Day se sentó y dejó a Salmón jugar con sus juguetes por un rato. Kamol salió con Kim.

“¿Despertaste, tigre? Vamos a almorzar”, dijo Kamol, antes de salir de la habitación. Kamol llevó a la familia de Day su propio auto, asi no tendrían que llevar muchos coches. Kamol hizo que un conductor los llevara a un famoso restaurante en Koh Chang. Estaban listos para recibierlos porque ya habían llamado para reservar una mesa, Kamol le pidió a Kom que viniera y se uniera a la mesa con ellos. Otros subordinados se sentaron en una mesa cercana. El dueño de la tienda se apresuró a darle la bienvenida en persona porque conocía bien a kamol.

“¿Por qué hay tanta gente siguiéndonos?”, le preguntó Salmón a Day.

“¿Cómo podrían cuidarnos desde lejos?”, respondió Day.

“¡Guau… tan bueno!”, exclamó Salmón emocionado al ver a tanta gente cuidándolo.

"No me tienes miedo, ¿verdad?", preguntó Day, fingiendo enfado.

"Ya no tengo miedo. Estar con el tío Day no me da miedo", dijo el niño, hablando de sus sentimientos. Hizo sonreír a toda la mesa. Kamol hizo que cada persona ordenará su propia comida. Pronto llegó la comida. Day se ocupo de Brick y de Salmon como de costumbre.

"¿Ocupaste el puesto de mayordomo permanente?", preguntó Kamol, mirando a Day.

“Algo así”, respondió Day con una risa leve.

"¿Cuándo volverás a Bangkok?", preguntó Kamol de nuevo.

“Probablemente mañana”, respondió Day. Salmón se volvió para mirar a Day inmediatamente.

"¿Volveremos mañana? Y luego... ¿Salmón puede nadar en el mar de nuevo hoy?", preguntó el niño, queriendo nadar en el mar.

"Todavía te duele la espalda, ¿no?", preguntó Day.

"Esta mañana, Kim y yo vimos que no tuviera nada", le dijo Brick apresuradamente en lugar de a su sobrino porque Salmón quiere nadar.

“Entonces ponte todo el traje de baño que compré. Solo te quítate la camisa por un día y ya te arde así. No te la quites de nuevo. Brick, tú no tienes que sentarte y sonreir si te quemas, no me hables si están en llamas", dijo Day, refunfuñando en una serie de murmullos.

“Sí, me estoy quejando.” Dijo Brick, porque sabía que Day no hablaba muy serio, continuó comiendo.

"Oh, Day, volveré hoy", dijo Kim.

"Aio, ¿no volverás con nosotros mañana, Kim?" preguntó Brick confundido. Kim miró a la persona a su lado. Hizo sonreír a Brick porque ya sabía la razón.

“Lo siento, lo hemos acordado”, respondió Kamol.