Acero Podrido

Caos Desatado

El sonido de gritos de terror absoluto, puertas rotas, cristales cayéndose. Gente corriendo y empujandose unos a otros, algunos sacrificándose u otros sin poder actuar por el miedo terminando salvados o dejados a su suerte, es decir, lo que mayormente sucedía.

Entre todo ese ruido y caos había una especie rara, los "héroes" o mejor dicho, gente con poco amor propio y una insana obsesión para salvar a otros, estos dos será inhumanos arrazaban con los cadáveres asesinos utilizando espadas de madera y como es obvio, tratando de salvar la mayor cantidad de vidas posibles.

La estudiante de 3 er año Busujima Saeko y el Profesor de Inglés Emiya Shirou ararazaban con los muertos vivientes meintras corrían entre la multitud- ¡¡TODOS LOS QUE PUEDAN CORRER, INTENTEN ALEJARSE A ALGUN LUGAR DONDE ESTEN A SALVO, INTENTEN TAMBIEN SALVAR A OTROS!!- el pelirrojo gritaba sumamente desesperado.

El no comprendía el porque todo esto sucedía así, los gritos de dolor, miedo, irá, horror y demás sentimientos entremezclados le hacían recordar su vida pasada, junto a los recuerdos que el creía tener sellados de aquel arquero de rojo.

El estaba viendo el infierno otra vez un infierno sumamente horrible, cada que agitaba aquella arma contra esos no humanos el recordaba continuamente la guerra por el santo grial y empezaba a dudar sobre si lo que hacía era o no correcto.

Empezaba a dudar y tener ideas que el nunca tuvo en vida hasta conocer al Espíritu Heroico EMIYA. Al ver esos cadáveres recordó aquella brutal escena en la iglesia de su antigua ciudad Fuyuki.

Estos eran exactamente igual a esos, solamente que en este caso los muertos podían tomar venganza, el no sabía si estaba paranoico o su remordimiento era gigantesco, el había matado a mucha gente y dejo a mucha otra morir, fue aquí cuando el de cabellos rojizos y ojos de color ámbar dudo sobre toda su vida.

Sobre si en verdad logro cambiar logro cambiar, ser un héroe d ella justicia como siempre quiso sin cometer los errores de su otro yo, el dudo de si entre EMIYA y el Hai alguna diferencia, cerro sus ojos sintiendo grandes dolores de cabeza y antes de poder pensar algo más miro como.un no muerto se abalanzo sobre el, logro observar toda su vida pasar en ese instante.

-"En verdad tengo mala suerte eh, todo se repite"- no pensó eso por morir, sino que el ya sabía que pasaría, su estudiante regreso a la tumba al no muerto y miro al pelirrojo, en pudo comprenderla y tras cerrar unos segundos sus ojos asíntio corriendo de nuevo junto a ella.

Eso no importaba ahora, debían estar en movimiento constante, no había tiempo para hacer esas idioteces. Tras un tiempo corriendo lograron llegar a la sala de enfermería, al abrir la puerta observaron a la profesora con un alumno.

-¡Vengan rápido, los no muertos se acer-!- de entre las ventanas una oleada de cadáveres se acercaba, golpeando con fuerza y cantidad suficiente para destruir los vidrios, el estudiante al cual se le podían observar marcas de mordidas empujó a la profesora hacia el maestro y la Pelimorada, su mirada decía "Salvense por mi, vivan una larga vida".

Shirou quedó atónito, gritos de dolor que daba el joven al ser arrastrado y devorado por la multitud de no muertos, pero el joven regreso rápidamente al mirar a la profesora, apretó sus puños y la jalo de una mano llevándosela.

La estudiante comprendió de inmediato todo y simplemente se despidió del joven- Eres un Héroe chico- tras eso salieron corriendo.

Mientras tanto, aquel lugar era un desastre total, en el techo estaban 3 estudiantes acorralados, uno convirtiéndose en un no muerto, otros dos estaban huyendo a una sala con una máquina que cierto friki uso de arma. Otros estabam buscando la mejor forma de sobrevivir, entre estos .