Solo un Humano Ordinario en Dragon Ball

Capítulo 1: Determinación

 En algún lugar del universo, un jovencito llamado Goku se cruzó con una señorita llamada Bulma. Y mientras ese encuentro del destino sucede, en otra parte del mundo, a un hombre sin nombre también le llegó su destino...

"AAAAGGH !!Mi... Cabeza... Duele muchísimo...¿Q-Qué está sucediendo?"

 Este chico se encontraba en un callejón, revolcándose por el suelo de dolor, pero a pesar de que sus gritos fueron oídos por muchas personas, nadie se acercó a ayudar.

 Él no tenía a nadie y ya estaba acostumbrado a arreglárselas por él mismo desde muy joven. Desde que tiene memoria estuvo solo en este mundo, buscándose la vida de la forma que pudiera.

 Su sufrimiento duró durante varios minutos, aunque para el pobre muchacho, cada minuto de agonía parecieron horas.

"Ahh... ahh" Jadeo pesadamente "Es-Esto es... increíble, nunca pensé que nada de esto fuera posible. Esferas mágicas capaces de conceder cualquier deseo. Seres tan increíbles y poderosos como para destruir planetas. Incluso existen dioses y múltiples universos. Pero... estos recuerdos no son míos, ¿qué me está pasando?"

 Este joven de solo unos 16 años, que hasta el día de hoy vivía de rebuscar en la basura y de robar en ocasiones. Por capricho del destino, dentro de él aparecieron todos los recuerdos de una persona diferente. Y no solo una persona cualquiera, aunque aún confuso, él pudo descubrir que estos recuerdos no eran solo de este mundo, era algo diferente.

 Lamentablemente el gran sufrimiento que había sufrido hace unos momentos lo dejó completamente agotado por lo que cayó dormido en ese mismo lugar.

 En sus sueños apareció otra persona, un hombre, nada fuera de lo normal, él lo vio ir a estudiar, ir a citas, celebrar cumpleaños con su familia o incluso ver una particular serie animada. Él pudo comprender casi todo lo que vio en su sueño, pero al hacerlo, comenzó a ponerse más y más triste y decaído.

 De repente, un baldazo de agua helada lo despertó . Cuando abrió los ojos desesperadamente, pudo ver a tres sujetos parados frente a él. "Por fin te agarramos, maldita rata escurridiza. Ahora te cobraremos cada centavo que nos debas."

 El que hablo era un hombre calvo de no menos de 30 años, y el muchacho, ahora con las manos y piernas atadas, lo conoce muy bien. Él le había pedido un préstamo, usó la plata e incluso ganó algo para él mismo, pero cuando fue a devolver lo que pidió, se dio cuenta que era solamente una estafa. Incluso si sumara lo que se había guardado para él, aun no le alcanzaría para cubrir una quinta parte de lo que le debía.

 Por ello, había estado escondiéndose desde hacía ya varios meses, pero con su reciente desmayo fue atrapado.

"Da igual, pueden hacer lo que quieran, no tengo dinero, incluso si quisieran matarme da absolutamente igual." Respondió el joven totalmente desganado.

"¿Y ahora qué le sucede, no debería estar esforzándose para escapar como siempre?" Conversaron los hombres entre ellos.

"No lo entienden, nada de esto tiene sentido, somos solamente una ficción, que sentido tiene tratar de esforzarse, todo ya está escrito. Los que tienen que brillar ya fueron elegidos, nosotros solo estamos aquí para morir eventualmente."

 Los tres estafadores no entendían de qué hablaba así que simplemente lo ignoraron. En cambio, el muchacho estaba cada vez más deprimido. Y es que en su sueño vio cómo todo su mundo era una simple serie, una historia creada por algún sujeto. Antes él siempre se esforzó por mejorar su vida, incluso aunque era un simple paria de la sociedad, nunca se detuvo.

 Pero ahora, todo pareció derrumbarse, nunca iba a poder cambiar el destino que fue escrito por el creador de esta historia.

"Bueno, aunque parezca que quieres morir, no te mataremos, eso no nos daría el dinero que nos debes. Por suerte, para nosotros, unos sujetos andan comprando personas para quien sabe que. Lo que importa es que nos van a dar mucho dinero." Dijo el pelado.