Salvada por el Alfa Maldito

Capítulo 47

Maison vio a lo lejos a Eros, quiere ir a hablar con él, pero, su mirada regreso rápido a Madison, quien es su prioridad

-creo que ya cumplí con lo que me pediste Madison, es hora de ir a casa- comento Maison y Madison lo miro fijamente, sin saber que decir

- ¿Mady, pequeña? - le hablo Jason a ella, al verla dudar y no contestar nada, sin embargo, ella siguió viendo a su padre sin saber que decir, abrió y cerro la boca dos veces, pensando en las palabras correctas a usar

-Madison tenemos un trato, respétalo- dijo Maison, algo molesto

-Madison, ¿Qué te pasa amor, porque tienes miedo? - dijo Jason al sentirla, esta asustada, ella bajo la cara apenada, ya que piensa que se ve ridícula, teniendo miedo, ya que es un ser sobrenatural y muy poderoso. Maison giro su rostro de Madison a Jaison al escucharlo, seguido de esto se acercó más a ella que ya estaba abrazada por Jason

- ¿Qué pasa Madison? - pregunto Maison

- es que, yo nunca he salido de la manada, es decir, todos mis recuerdos son de aquí, además, no creo que los vampiros me acepten, si quiero ver a mi madre, pero, no creo necesario ir

-porque los vampiros no aceptarían a otra vampira y además, tu eres la hija de su líder, su princesa, ellos deben arrodillarse ante ti- dijo Maison con presunción

-también soy una bruja- dijo ella sin saber como sentirse respecto a ser una hibrida

-Mady, tu eres perfecta, y cualquier ser vivo que te conozca lo notara- dijo Jason, tomando la cara de Madison entre sus manos, provocando que Maison voltee los ojos

-Madison, no es momento de poner pretextos, tu madre te esta esperando y yo no soy muy paciente-

- ¿me puede acompañar Jason, quiero decir, me garantizas que lo van a tratar como yo quiero, con respeto? – pregunto Madison. Maison sonrió de lado, pues le agrada que su hija es muy lista, no pidió, que no lo ataquen o que lo cuiden, pidió que lo traten como ella quiere, es decir de una manera privilegiada.

-si nos vamos ya, así será- afirmo Maison, a quien no le molesta tanto el mate de su hija, ya que supo pelear y principalmente, trata a su hija como el debió hacer desde un principio con Margaret

-¿me vas a acompañar, verdad?- pregunto Madison a Jaison, mientras lo abraza por la cintura y pega su cara al pecho de él, Jaison sonrió, pensando que es muy difícil negarse, si lo abraza y lo ve así, con una carita tierna, nada típica de ella, pero, que sin embargo, lo ha fascinado

-siempre- es lo único que pudo decir Jason, ya que siente un gran deseo por esos labios, el cual desvío a su frente, para no molestar a su suegro. Maison giro su rostro con incomodidad y Madison sonrió como nunca

-Jason, traes algo por encima de tu ojo, ciérralo para poder quitarlo- dijo Madison

Maison frunció más el ceño, pues no vio nada, Jason cerro los ojos, para permitirle ayudarle a quitarse eso que podría dañar su ojo, mas, se quedo de piedra al sentir como Madison lo besaba en la boca, Jaison de principio, trato de separarse, pero, Madison ya había rodeado sus hombros con sus brazos los cuales eran sorprendentemente fuertes y no le permitían soltarse sin lastimarla, el, no pudo más que rendirse ante ella e intensificar el beso, ella escucho un rugido y lo supo, el lobo de Jaison, estaba agradecido por la demostración de afecto, después de un tiempo ambos se separaron, Madison sonriendo como una adolescente y Jason con un brillo especial en sus ojos, los cuales cambiaban de color constantemente, hasta que Jaison se tranquilizó. Los dos apenados buscaron a Maison, quien para su suerte se había ido, por el momento

-te acompañare a hacer tu maleta, Madison- dijo Jason, provocando una sonrisa descarada en ella -no voy a entrar en la casa contigo, Madison- dijo Jason leyendo sus intenciones -me muero por hacerlo, pero, no es el momento- Madison hizo un mohín y se giro para ir a su casa, Jason la alcanza, la abraza y le besa su cabeza – no te enojes pequeña Mady, quiero que cuando estemos juntos todo sea perfecto- Ella le saco la lengua molesta, pero, después sonrió, a ella, no le gusta que el sea tan controlado, sin embargo, sabe que esa es una de sus cualidades también.