Una Historia Dip

5

¡Hola! ¿Comó están? Yo, algo preocupada, pues no hace mucho realizé mi examen de admisión para la preparatoria y no estoy segura si me aceptarón. Tambien quiero pedir perdón por no haber actualizado cuando lo prometí, pues sí, estaba escribiendolo, pero no me convencia del todo la continuación que llevaba al momento. Esta no me convence pero es mejor que la que ya tenia hecha.
Bien, continuemos:

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-¡Mira! Se vé interesante-dijo Pip.
-Dice...."dance dance revolucion", ¿como funcionará?- pregunto.

-No lo sé, ¿qué tal si lo beriguamos?-pregunto Damien para luego pararse en uno de los espaceos.

-Bueno, jugemos-dijó Pip, luego colocó la ficha y empezó el juego.
-Veamos...ehhh, no sé como funcione-dijo algo confundido.

-Esta cosa hasta esta en japones-dijo Damien.
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Despues de un rato lograrón poner una canción y poder jugar. Aunque no eran nada buenos haciendolo:

*Inserte montaje de momentos jugando* (XD)

-¡Deja de equivocarte!-dijo Damien algo molesto.
-Me desconcentras-

-Aja, como si tú lo estubieras haciendo mejor que yo-contestó Pip con tono burlón.

Pero al poco rato se empezarón a divertir:

*Vuelva a insertar montaje*

-¡Izquierda! ¡Derecha!, ¡Adelante!, ¡Atras!- decian casi al mismo tiempo como si estubieran sincronizados( referencia a neo genesis evangelion, se ve muy cringe).

Estubierón así durante mucho tiempo, hasta que se cansarón y tambien ya no tenian fichas(XD).

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-¡Fue divertido!- dijó Pip.

-Sí...aunque a-algo cansado-dijó Damien algo agitado.

-Toma-dijó Pip, le ofrecia una botella de agua.
-Tal vez la necesites-

"¿Quíeres matarme o qué?" Pensaba Damien, "pero, no quiero sonar grosero"
" espera un momento, ¿por qué pienso eso?"

-No gracías-contestó.

-Ohh, ok- dijo Pip.

"¿Qué acabo de decir?"penso Damien.

-Sabes, fue una tarde agradable, gracías por haberme acompañado-dijo Pip en un tono alegre.
-Talvez...¿quísieras venir con migo aquí más seguido?-pregunto un poco apenado.

-Ehh...-Damien lo pensaba, y siguió así un rato.

-Descuida, sino quieres esta buen-dijo Pip para que ya no hubiera silencio.

-Sí, sí quiero-contesto.

-Bueno, mañana volvemos a venir-y así fue durante varios días, a medida que fue avanzando el tiempo, se fuerón conociendo mejor. Era una actividad que les gustaba haser (si se le puede llamar así).

Una tarde despues de salír de la arcade Pip decidió invitar a su casa a Damien, debido a que quiería mostrarle algo.

-Damien, ehh...¿quisieras acompañarme a mi casa? ya sabes, a comer-preguntó.

Damien solo asintió con la cabeza.

-¡Vamos!-dijo alegre, tomando la mano de Damien para luego decír:
-¡Ven, siguieme!-

Al lleguar a la casa de Pip, el le ofreció entrar;

-Pasa, ¡bienvenido!-dijo, tenia una mano en la espalda, y con la otra le ofrecia entrar.