Aprendiendo a vivir

Debes salvarla

Habia pasado poco más de un año desde el final de la guerra. Marley aun seguia en reconstrucción, las personas que sobrevivieron tanto  marleyanos como  eldianos  se han empeñado bastante en darle a la ciudad nuevos aires que hagan olvidar un poco los horrores vividos con anterioridad dentro de ella. En las mañanas se podia ver a los hombres dirigirse a sus labores y a la mujeres iniciando con las labores para recibirlos despues, la gente poco a poco se llenaba de esperanza pero sin olvidar a todos los que habian perdido, una esperanza de paz, de acuerdos  y de nuevos tiempos. 

Esta esperanza era exparcida por los embajadores de la paz, aquellos que una vez fueron titanes eldianos y marleyenses y que ahora  no querian que nadie viviera más los años infernales  que ellos pasaron desde que eran niños. Armin, Annie, Reiner, Pieck, Connie y  Jean viajaban a todo sitio al que podian para entregar el mensaje, con la esperanza de que nadie en el mundo empezara de nuevo algun tipo de guerra que acabara con lo que apenas todos construian. 

Levi despertaba en su cama, con un Sol radiante golpeando su rostro. La mania como soldado de despertar temprano no podia quitarsela. Escucho golpes en su puerta,  Gaby era más o igual de madrugadora que él y siempre se presentaba para llevarlo a desayunar. Levi teni ahora su hogar en Marley, no por desición al principio, paso casi dos meses internado en un hospital  en el cual Reiner y los demás se habian encargado que tuviera los mejores cuidados y no se habian separado de él por increible que pareciera hasta que se aseguraron de que estuviera bien.El idiota al que le habia atravesado el cuello con una cuchila siendo enemigos curiosamente habia sido quien vigilo que en el hospital  Levi siguiera vivo.  Aunque esos cuidados no habian sido del todo suficientes, penso tomando la silla al lado de la cama para subirse a ella y poder indicarle a Gaby que entrara para llevarlo a desayunar despues de lavarse la cara con agua que tenia en la mesa de noche a su lado. 

Al darle el visto buena esta entro a la habitación sonriendo y contandole como cada dia las nuevas noticias del dia. Levi vivia  en la casa de Reiner y su familia y permanecia ahi desde su salida en el hospital, por sus servicios Reiner recibio una casa más grande y ahora todos vivian junto al que alguna vez fue el capitan de Paradis. Todos los dias era la misma rutina para Levi:  desayunar, hablar con Gaby y su familia, ver a la gente pasar desde el corredor de la casa, almorzar, leer mientras tomaba el té y luego dormir. Nada quedaba de aquella vida ajetreada de soldado que alguna vez tuvo. 

Mientras llegaba a su lugar a la mesa Levi sintio los dolores matutinos habituales, sus piernas habian quedado más que lastimadas despues de la guerra. Poco quedaba de su cuerpo atletico, ahora se encontraba un poco más delgado y obviamente totalmente fuera de forma. Cuando se recupero no sabia realmente que hacer con su vida, nunca pensó siquiera que saldria vivo de esa guerra. Su promesa a Erwin la habia cumplido, habian detenido el retumbar y a Eren y no tuvo idea de que hacer hasta que Reiner, Gaby y Falco le pidieron que se quedara con ellos y por alguna extraña razon que ni él aun entendia asi lo hizo. 

Mientras desayunaba con el periodico en la mano y Gaby devoraba su comida como sino hubiera un mañana, Falco entro con su resplandeciente sonrisa. Gaby y Falco habian crecido en altura en el ultimo año. Y ambos podian vivir al fin vidas normales. Pero algo inusual sucedio ese soleado  día. Falco no venia solo. 

-Buenos días capitan, no sabe el gusto que me da verlo de nuevo- Levi levanto la mirada ante esa denominación, hacia demasiado  tiempo que alguien no lo llamaba  de esa forma y de inmediato se encontro   con los ojos celestes de Armin. 

Levi no lo admitiria en voz alta pero vaya que le gustaba volver a verlo. Se veia tranquilo, feliz, bien vestido y por fin, libre de aquellas cadenas que los ataba a la guerra  a todos. 

- ya no soy el capitan de nadie mocoso, es increible ver a uno de los hombres más ocupados del mundo aqui. Sientate desayuna con nosotros  mocoso debes tener hambre. - dijo Levi casi sonriendo. 

Armin se alegro demasiado de ver a Levi, por mucho pensaron que él no sobreviviria pero  el estar ahi bien cuidado por una familia le habia sentado bien. La señora Karina y Gaby le hicieron un lugar y le sirvieron comida. Todo transcurrio normalmente entre conversaciones de sus viajes y del trabajo que todos los demás tenian en el ultimo año hasta que Armin le pidio al capitan salir al patio para hablar a solas. 

Armin ayudo a empujar la silla de ruedas en un silencio sepulcral, ya decia Levi que su instinto no lo engañaba y el rubio no estaba solo de visita. 

-Ya escupelo mocoso ¿cual es la verdadera razón por la que estas aqui?No lo iba a decir frente a los demás pero eres como Hange no puedes discimular nada. - Armin solto la silla y se sento en una jardinaera frente a Levi. 

- Sé que no debo molestarlo, y sé que tal vez nisiquiera quiera escucharme pero necesito pedirle algo que es de suma importancia para mí porque estoy desesperado- Armin suspiro tomando valor antes de continuar- se trata de Mikasa, necesito que me acompañe a Paradis y  la salve capitan Levi.