Capítulo 20 - El joven gruñon

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"Escuché que hay un restaurante muy bueno cerca. Se puede cenar en el balcón al aire libre. El bosque de arces se vuelve hermoso en otoño".

"Pero ahora es invierno, y la esencia de la cena debería ser la comida misma, Anna"

"¿Que importa? Me gusta comer bajo hermosos paisajes". Anna dijo con una sonrisa, sosteniendo el brazo de Karenin.

"Bien." Karenin asintió levemente y estuvo de acuerdo con el aumento repentino de la propuesta.

Anna miró el perfil lateral de Karenin, sus prominentes rasgos ostentaban un atractivo aristocrático que es una de las razones por las que las mujeres lo adoran. Su rostro parecía casi aterrador cuando actuaba indiferente y sin sonreír.

Antes de casarse, su cuñada le había revelado débilmente que las personas como Karenin eran demasiado serias y estrictas, y llevarse bien con él haría temblar a la gente. Las personas que lo rodean se sienten como si estuvieran caminando sobre cáscaras de huevo, con miedo de cometer un error accidentalmente al momento siguiente.

Y Anna ahora puede defender suavemente a su esposo.

"Aunque no es lo suficientemente divertido y es un poco demasiado sensato, tiene las emociones más delicadas y gentiles en el fondo. Podía entender los pensamientos de los demás fácilmente. Antes de convertirse en burócrata, este rasgo estaba profundamente oculto en su corazón".

No se debe culpar a un hombre que trabaja duro por Rusia y por todos en ella. Como su esposa, debería mostrarle más de sus fortalezas, en lugar de juzgarlo con la perspectiva y los estándares de los demás, y unirme fríamente a la cruzada contra sus defectos".

Miró a su esposo con ojos dulces, y después de que este notó su mirada, él la regañó suavemente: "Anna, no me mires con una mirada como la de un niño, no olvides que yo soy el mayor de los dos."

Anna se rió entre dientes y se acercó a Karenin con sus manos sosteniendo firmemente las de él. Mientras se abrazaban estrechamente, Anna le dijo lo que guardaba en su corazón desde hace algún tiempo: "Alex, todos aman tu inteligencia e ingenio, pero solo yo amo tu torpeza y tus celos".

*

Quince días después del baile, llegó el momento de regresar a Petersburgo. Anna pensó que viajarían directamente allí, pero se sorprendió cuando Karenin le informó que visitarían a su hermana antes de ir a Petersburgo.

"Quiero llevarte a conocer a mi hermana antes de ir a Petersburgo".

Las manos de Anna se detuvieron en el aire, sosteniendo la ropa que estaba empacando. Miró a Karenin, que estaba de pie al otro lado de la habitación con unos papeles en la mano. Él no pareció notar su reacción mientras continuaba hablando casualmente.

"Louis y Maria viven en Costa de Plata. Me han escrito innumerables veces desde nuestra boda queriendo que los visitemos".

No sabía dónde estaba eso, pero no importaba. Ella no creía que eso fuera importante en este momento de todos modos. Guardó su ropa junto al baúl y se sentó en la cama, pues se le había caído el estómago a los pies. Estaba inusualmente nerviosa por conocer a su familia. Un letrero de neón que dice "¿Qué pasa si no les gusto?" brilló repetidamente en su mente. Había trabajado muy duro para hacerse un lugar en el corazón de Karenin, un lugar del que ni siquiera estaba segura ahora. ¿Qué pasaría si volviera a cerrarse con ella después de ver la reacción de su familia hacia ella?

Sabía que Karenin tenía un hermano y una hermana mayores, y otro hermano mayor que había muerto muy pronto. Ella había oído que Karenin estaba cerca de su familia y tenía una buena relación con sus hermanos.

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