𝐂𝐇𝐑𝐎𝐌𝐀𝐓𝐈𝐂𝐀 (IN&OUT: 1)

O7.

WOOHOO
"

Solo quiero amarte"

-

- Jack, vamos, deberías dejar que Thomas se quede.- Replicó ya cansada desde la tarima.

- No puede ser, ¡Hasta nombre tiene ahora el mocoso!¡No puede ser más importante que yo! - Exclamó él payaso con un dejé de rencor.

La situación se había repetido durante una semana, la fémina llevaba días insistiendo por qué su amigo Thomas se quedara en la carpa con ella, pero él no razonaba.

Celos era la palabra que definía lo que sentía el ser monocromático.

Por ello el se negaba que él niño se quedara con la chica, porque para el era su chica, aunque claro, ella no lo supiera del todo, temía en aterrarle con la peor parte de si mismo, no quería que lo odiara.

- No he dicho que lo fuera, Jack, he dicho que no puede irse, además es mi único amigo aquí.- El solo rodó los ojos y me dio la espalda.

"¿Con qué con esa nos vamos, no?" Pensó Theodora con el ceño fruncido.

No quería quedarse de brazos cruzados ante esta situación, no estaba en sus planes.

- Entonces me iré, Jack, ¿eso quieres? Si quieres quitarme a mi único a amigo aquí, me iré y con Jason.- se dio la vuelta también, él mas alto con su temor no permitió ser solo el mismo, bajo de la nube de celos solo por ir por ella, aunque manteniendo su imagen. Tocó su hombro y ella respondió. - ¿Y ahora qué?

- ¿No te importo?¿Piensas que soy malo?- Preguntó con preocupación de lo que ella pensase.

Era muy importante ella para su pobre alma.

"Bingo".

- No es eso, simplemente digo, que sí estaré la mayor parte del día sola porque te vas a donde quien sabe quien... prefiero quedarme con Thomas.

- ¿Entonces no piensas que soy malo?- Preguntó acercandola a su cuerpo para posteriormente rodearla con sus largos y delgados brazos.- No quiero ser él malo pero tu tampoco me das muchas opciones, Pastelito de Vainilla.

- Si tienes, tienes dos Jack y créeme, si no decides, decidiré yo.- Se soltó de su agarre y caminó a la habitación donde pasaba la mayor parte del día por ordenes del nombrado.

Él problema mas grande para el gran Laughing Jack no era ceder, sino era decirle que el pequeño Thomas ya no estaba muy cerca que digamos, iba a ser su siguiente juguete pero por culpa de sus sentimientos iba a regalárselo.

Aunque claro, no gratis.

Él solo suspiró y optó por desaparecer de la carpa, necesitaba meditar sobre sus opciones y con ella tan cerca haciéndolo cambiar de opinión en un santiamén no era sensato. Además debía probar de que estaba capaz el niño, no quería que el fuera él infiltrado de una de las ratas que lo perseguian, seria una lastima que acompañara a Melody en el más allá.

.........................................................................

- ¡Jason The Toymaker!¡Mi juguetero favorito! - Exclamó él sujeto entrando con sus hilos dorados exóticos pero igual de peligrosos que él veneno.- Tengo lo que querías.