El arte de amar a la vida o de odiarla

Juls!

Juls, mama y papa cruzaron la acera y yo como siempre me quede atrás, mi hermana corría a la tienda mientras mi madre le gritaba:

-Juls el regalo no es para ti, es para tu hermana

El sábado pasado había cumplido 8 años y mis padres habían decidido traernos hoy al centro comercial a comprar mi regalo de cumple.

-Donde quieres entrar princesa?-dijo mi padre pasándome su brazo por mi hombro

Yo recorrí el centro comercial con la mirada y visualice una tienda de juguetes que segundos después señale

-Ahí

-Está bien, ves yendo tú, yo iré a buscar a tu madre y a Juls, seguro que tu hermana ya se abra metido en algún agujero donde tu madre no pueda sacarla

Se despidió con un beso en la frente y se fue. Yo, en cambio, me dirigí a la tienda.

Cuando pase la puerta me acordé que el cumpleaños de Juls estaba cerca y decidí mirar un pequeño juguete que pudiera regalarle a una niña de 4 años con tan solo 4 euros que era lo que actualmente llevaba encima. Me encaminé a su sección y cogí un pequeño peluche de unicornio, lo pague y lo guarde en mi mochila antes de volver a entrar a la tienda y dirigirme a mi sección.

Habían pasado minutos enteros cuando sentí que algo iba mal mi padre hacía 15 minutos que no aparecía y eso no era lo normal en él, así que me encamine a la caja con los juguetes que había elegido para mí entre mis brazos, un osito de peluche de un tamaño considerable y la caja de uno de esos puzzles 3D.

Cuando llegue al mostrador la mujer no estaba aunque tampoco tardo en aparecer, la mujer parecía histérica, entro corriendo hacia el mostrador buscando algo y cuando me di cuenta de que iba a hacer me asuste e intente salir corriendo ,pero, la asistenta no me lo permitió,me cogió con un brazo y cerro las puertas de la tienda.

-Escóndete detrás del mostrador-me dijo mientras me soltaba

-Que-pregunte asustada

Ella cogió mi mano temblorosa y me dirigió donde me había señalado momento atrás, se sentó en el suelo y me hizo repetir su acción

-Que ha pasado?- pregunte llorando

-Un hombre malo ha entrado al cc por eso ahora nos tenemos que quedar aquí calladas, vale?, así no nos pasara nada

-Y mama y papa que pasara con ellos? Y Juls tengo que encontrarlos- hice el amago de levantarme pero ella me lo impidió

-Como te llamas?-pregunto la señora

-Leah, soy Leah

-Qué nombre tan bonito- intento calmarme cuando empezamos a oír disparos

-Si, mi madre lo eligió, le encantaba leer de pequeña

-Oh eso es maravilloso-se le notaba nerviosa-yo soy Bea-su voz temblaba y yo lloraba

-Haber cuéntame algo pequeña Leah-me acaricio el pelo

-No sé que decirte

¿-Como se llama tu mamá?

-Bryce-cerré los ojos intentando calmarme

¿-Y tu papá?

-Jack

-También son nombres muy bonitos, cuantos años tienes?

-8, los cumplí la semana pasada, mi hermanita tiene 4, pero dentro de unas semanas cumplirá 5

-Juls es muy pequeña aun-reflexionó en alto

-Si-le conteste

-No te preocupes seguro que todos están bien-me abrazo contra su pecho intentando hacer desaparecer el sonido de los disparos y de la gente mientras lloraba y gritaba.

Una hora.

Una hora fue el tiempo que estuvo allí abrazada junto a aquella joven mujer morena de ojos caramelo.
Una hora hasta que se oyó llegar a la policía.

Una hora hasta que pudo salir de aquel escondite y se dio cuenta que sus padres y su hermana habían muerto

-Juls! Juls!-me levanté llorando otra vez-mama?-pregunte a la nada sabiendo que nadie respondería

Nadie respondería porque todos habían muerto aquel día y yo me había quedado sola ante la vida.

Una horrible vida que me había undido a tal nivel... la princesa de la oscuridad me llamaban.

Tras el incidente me había ido a vivir con la señorita Bea hasta que cumplí los diez años y la tienda cerro dejándola a ella sin trabajo y sin el dinero suficiente para mantenernos a las dos, así que ella me aseguro que estaría mejor en una casa de acogida junto a otros niños como yo.

Acepte, pero falle, nunca había estado tan mal, fueron mis peores dos años de vida, allí tenía dos hermanos uno tenía trece años cunado llegue y se creía el rey del mundo, por otro lado, su hermano Grom tenía 6 años y se dedicaba a joderme como su padre un pedófilo que intento violarme durante los dos años que estuve allí, no lo consiguió, pero casi.

Tras denunciarlo, la policía lo arresto y a mí me traspasaron a otra casa, una donde yo era hija única y era como su criada, allí estuve viviendo hasta hace unos días cuando cumplí los dieciséis y me emancipe.

Ahora mismo, me encuentro en un avión viajando a Whirniz un pueblucho situado al norte de Canadá donde encontre un piso cerca del instituto al que iré por tan solo 100 euros al mes. También cabe decir que tendré que moverme en bicicleta para poder llegar a mi trabajo como camarera y bailarina.

Estudie en el conservatorio desde que tenía 4 años hasta el año pasado cuando acabe la carrera en ella porque me habían adelantado algunos cursos.
La hora de llegada para mi avión era a las 19 h, pero por lo visto se ha atrasado, y ahora voy a tener que aguantar la mirada de toda esta gente que me ha oído gritar el nombre de mi hermana.

¿Da igual, tampoco es la primera vez que me miran raro, se les pasara, no?

Eso espero porque de lo contrario serán unas horas muy incómodas para mí, aunque para ser sincera llevo con esa sensación desde que tenía 8 años y ya he llegado a acostumbrarme