18) Nuestras vidas

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1 AÑO DESPUÉS

Emma

Regulus la estaba llevando mientras la besaba a la encimera de la cocina para posarla ahí y pudieran besarse mejor.

— Qué puto asco — murmuró Leah haciendo el desayuno—. Sois de hacerlo por las mañanas, ¿QUIÉN LO HACE POR LAS MAÑANAS? ¡EN LAS MAÑANAS SE ESTIÑEN LOS HUESOS, DIOS!

Regulus y Emma no le hicieron caso y siguieron besándose como si no hubiera un mañana.

Pero, al final, le hicieron caso y se fueron a la habitación.

— Eres preciosa, Emma— dijo Regulus entre besos.

Regulus la tiró a la cama y mientras se quitó la camiseta. Pero Emma empezó a sentirse muy mal de la nada. Con ganas de vomitar.

Se fue al baño corriendo y empezó a vomitar.

Unas horas después de hablar con Leah y saber todo, fue a hablar con Regulus.

— Regulus, mi vida, prepárate para ser padre.

Regulus casi se desmayó.

1 AÑO Y MEDIO DESPUÉS

— Harry ya tiene a una amiga.— dijo Lily.

— Sí, se ve que se llevan bien— dijo Emma mientras miraba a su hija con el hijo de Lily y James — ¿Cuántos meses llevas con la pequeña Victoria ahí dentro?

— Llevo ya siete meses. Quiero que nazca ya.

— Seguro que será preciosa.

— Estoy segura.— aseguró Lily con una sonrisa.

— ¡Tenemos que ir a comprarle vestiditos verdes monísimos a la pequeña Vic!— dijo Emma de la nada. Se dio cuenta de que Leah se había escondido en la cocina. Emma miró con maldad a Lily y ella lo comprendió enseguida.

— ¡Leah, guapa!— gritó Lily —. Emmita y yo vamos a comprarle vestiditos a mi fetito, ¿te quedas con Verónica y Harry?

— ¿Y-yo? Yo...

— ¡Adiós! ¡Gracias!— dijo Emma y Lily y ella se fueron por la puerta riéndose.

Leah

Mierda. La habían dejado con dos niños que no pasaban de un año. ¿Qué coño iba a hacer?

— Me cago en todo lo que se menea. Qué apañaditas son las mamás luchonas. ¡VERÓNICA DEL MATRIMONIO CORDESAL DE MERLÍN, SUELTA ESO!— Verónica había cogido un vaso de cristal y lo estaba agitando peligrosamente. Harry no paraba de mirarla sonriendo. Harry cogió otro vaso de la mesa —. ¡MALDITOS CRÍOS DEL DIABLO! ¡MERLÍN, SÁLVAME! ¡HARRY JAMES POTTER Y VERÓNICA BELLA BLACK, DADME ESO YAAAA!

Leah corrió detrás de ellos. Los niños muy tontos habían aprendido a caminar con mitad de año. De algo tenían que servir.

Leah le quitó los vasos a ambos y los cogió de las piernas poniéndolos bocabajo llevándoselos a su habitación.

Los sentó en la cama y los miró con los brazos cruzados.

— Espero que Victoria no sea tan cabronaza como vosotros, par de mocosos.

— Cueto.— Verónica estaba señalando la estantería de su habitación. Habían un montón de libros. Oh, ¿quería que le leyera un libro?

— ¿Ko? ¿Dode ta Sio?— dijo Harry. Harry llamaba así a Cho, la hija de Leah. Tenía la misma edad que ellos dos.

— Se ha ido con su papá. Bueno, voy a leeros las cuatro varitas de Alice. Más os vale estar atentos o os coméis el libro.

James

Había ido con Regulus a comprarle un carrito decente a Victoria. Tenían que prepararle todo para cuando naciera y encontrar un carrito era muy difícil por donde vivían.

Leah

Ya era de noche. Estaban en la última página del libro y Verónica estaba abrazada a Leah y Harry en los hombros de Leah. Todos estaban adormilados.

— Alice ganó la batalla y se fue a celebrarlo con sus amigos que no veía hace un tiempo. Todos vivieron felices y comieron perdices.— cogió a Verónica con una sonrisa y la dejó en su propia cama al lado de Harry. Verónica se había dormido por completo. Harry estaba adormilado, pero miró a Verónica y la abrazó. Se quedaron ambos así durmiendo. Dejó el libro en su estantería y se acostó con los niños a dormir.

UNOS MESES DESPUÉS

— Bienvenida a casa, Victoria Lily Potter.— murmuró James mirándola con todo el cariño del mundo. Victoria tenía los ojos muy azules, pero también verdes. El poco pelo que tenía era pelirrojo.

— ¡Qué cosa más bonita, por Dios!— Emma se acercó a verla.

— ¡VITORIA!

— ¡MANITA!

— ¡VIVI!

Verónica, Harry y Cho se habían acercado corriendo a ver a Victoria.

Eran buenos amigos.

EN NAVIDAD

— Le he heso un rejalo a Vivi.— dijo Cho torpezándose con las palabras.

El regalo era un papel con un dibujo raro hecho con una pluma rosa.

James empezó a grabar todo y pilló a Vero y Harry dándose un piquito avergonzados.

Esa navidad fue la mejor de sus vidas.

Abril

— ¡Sé que quieres que vaya a por ti otra vez!

— Toma esto, Abril.— le dijo Ayani. Abril asintió. Volvió a conectarse con Voldemort otra vez. Mató a todas las serpientes que habían en su alrededor con chasquear los dedos. Paró la tormenta pero hizo caer un rayo detrás de ella.

— No me asustas. Vamos, pelea.

Empezaron a pelear. Abril esquivaba todo muy fácilmente. Ya se aburría.

Se metió en la mente de Voldemort y lo hizo sufrir un poco haciendo que casi retorciera su brazo y se riera de él. Ahora era ella quien hacía esa masa negra. Ahora era ella quién tenía el control.

Y lo seguiría teniendo.

FIN

1

9 de Abril - 7 de julio

Efímero(1) de trilogía generaciones.


Efímero #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora