Kai 🔆 Gaara

0 🔆 Lo que más odio

Gaara

Demostrar sentimientos siempre fue difícil para mí. Desde que era pequeño el único sentimiento que se sentía correcto era la ira y el odio, hasta que conocí a uno de mis pocos amigos. Ser amable se volvió fácil pero demostrar sentimiento alguno era aún un problema. 

Fue entonces cuando conocí a Sophora Saki, unos meses después de aceptar el puesto de Kazekage. 

Enamorarme de Soph fue un proceso lento pero inevitable. Nunca imaginé tener sentimientos de esta magnitud por alguien que no fuera de mi familia, pero Soph se ganó el derecho poco a poco. 

No me di cuenta cuando sucedió, un día sólo me encontré sonriendo ante la idea de verla y entonces lo supe. Supe que me había enamorado de una mujer con un dojutsu peculiar y una actitud despreocupada. 

Tomé un trago a mi sake esperando que borrara los recuerdos del día de hoy. Naruto, el primer amigo de verdad que tuve en toda mi vida se encontraba frente a mí tomando sake con moderación, pero intentando hacerme compañía. 

—Estoy seguro que existe una buena razón, Gaara. —habló bajo Naruto. 

—¿Importa realmente? Ella ya se ha ido. 

Sentía un dolor terrible en el pecho. 

—Conocí a Soph por un tiempo menor que tú, pero no parecía del tipo de persona que deje algo inconcluso. —me encogí de hombros. 

—Ya no estoy tan seguro sobre lo que conozco de ella. 

Tomé de nuevo la carta que había pedido Soph a una completa desconocida para que me la entregara. 

"... sé que tal vez en este momento me odies, pero eso no importa porque si me quedara a tu lado, me odiarías aún más. Probablemente lo primero que hagas sea buscarme por cielo, mar y tierra, así que te pido por favor que no hagas las cosas más difíciles, porque no cambiaré de opinión. 

Un día me dijiste que si alguno de los dos no sentía lo mismo teníamos que ser honestos y aceptar la decisión. Gaara, yo ya no te amo. No ocurrió de la noche a la mañana, eso te lo aseguro. Simplemente esta mañana que desperté me di cuenta que no quería seguir haciendo esto, y que no te amaba lo suficiente para despertar junto a ti el resto de mi vida.

Mi hermana Ai tomará la misión de rango S a la que se supone debería de ir y en cambio, yo tomaré su misión en la aldea de Konoha. Esto es un hasta pronto, a pesar de todo siempre serás un buen amigo. Si algún día dejas de odiarme, siempre tendrás una amiga que te espera en Konoha...

Sophora Saki"

Arrugué el papel entre mis manos mientras solté una carcajada. 

—¿Qué es gracioso? —preguntó Naruto confundido. 

—Es gracioso que me hayan dejado plantado el día de mi boda con una carta.  

—Amigo, tienes casi 5 años saliendo con Soph. Tiene que haber una razón coherente para haberlo hecho. —negué con la cabeza. 

Le pasé la carta y esperé a que terminara de leerla. Era una carta corta, había resumido 5 años de relación en seis párrafos tan cortos e impersonales que por un momento creí que un completo extraño los había redactado.  

—Vaya. Si su padre y hermana no nos lo hubiera confirmado esta tarde, creería que alguien más escribió esto y secuestraron a Soph. 

Traté de sonreír por lo estúpida que era la idea de Naruto. Soph era una Jonin de alto rango que sería casi imposible de atrapar y si lo hiciesen, ella jamás dejaría que fuese algo discreto y silencioso. 

—¿Sabes? Yo lo creí desde el instante en que lo leí en la carta. Lo sabía desde esta mañana pero traté de convencerme a mí mismo de que solo eran nervios por la boda. —tomé otro trago a la botella de sake. 

—¿A qué refieres? —dijo Naruto con curiosidad. 

—Por la mañana fuimos juntos a recoger los trajes que llevaríamos en la boda hoy. Ella estaba distante y sonreía nerviosa. Soph nunca ha sido muy expresiva y la mayoría de las veces es seria y parece que nada en esta vida le importa pero en ese momento parecía que algo le importaba lo suficiente para tenerla inquieta. Muy en el fondo lo supe cuando me miró a los ojos para despedirnos. Se supone que nos veríamos en unas horas en la ceremonia de la boda, pero yo sentí que se estaba despidiendo. Me convencí de que solo estaba nervioso, pero tal parece que no era así. Cerca de mediodía me pidió ir a buscar a la tienda de trajes algo que había olvidado. La recepcionista me entregó esta carta. Ni siquiera fue capaz de dármela ella misma. 

—¿Cómo podrías saber eso con solo verla? —preguntó Naruto. Yo reí. 

¿Cómo podría no saberlo? Soph había sido mi mejor amiga los últimos años y no había nadie a quien yo conociera mejor excepto por mis hermanos. 

—Cuando conoces a alguien tan bien como Soph y yo lo hacíamos, esas cosas resultan bastante obvias. Sabía cuando estaba feliz, triste, molesta, pensativa, lo nerviosa que se ponía cuando la mirabas fijamente, lo irritada que estaba cada que despertaba después de tener esa odiosa pesadilla repetitiva que no la dejaba tranquila, la forma en la que arrugaba su nariz cuando algo la disgustaba; y por supuesto que sabía esa mirada triste que tenía cuando se despedía de alguien que no vería en mucho tiempo.

Naruto asintió en comprensión. Supongo que conocía de la misma forma a Hinata a estas alturas. Aunque comprendía que la forma de amar de las personas era siempre distinta. 

—¿Irás a buscarla? —preguntó mi amigo. 

Negué con la cabeza. 

—Hace mucho tiempo nos habíamos prometido que esto se acabaría cuando uno de los dos dejara de amar al otro. No pensé que eso ocurriría en un futuro tan inmediato pero yo cumplo mis promesas; además, no puedo obligarla a amarme. 

—No podría imaginar el dolor que sientes, Gaara. ¿Ahora la odias, cierto? 

—Hay muchas cosas que odio de Soph. Odio su humor, odio la forma en la que nada en este mundo parecía asombrarle, odio extrañar su dulce voz, odio el olor a ella en las almohadas de nuestra cama, odio lo mucho que pelea porque siempre quiere tener la razón, odio que no me dijera adiós, pero lo que más odio es que puedo odiarla y creo que jamás lo haré. 

Suspiré conteniendo las lágrimas. 

—¿Por qué no puedo odiarla, Naruto? Deseo hacerlo pero no puedo. Lo único que quiero en este momento es saber si se encuentra bien. 

—¿Sabes? Tal vez sea bueno que se lo digas. Si necesitas hacerlo, siempre puedes mandarle una nota que puedo darle cuando llegue a Konoha. 

Asentí mientras tomé un papel para escribir.

"Nunca imaginé este final para nosotros. Te amo aunque me hayas dicho adiós, no importa lo que hagas para mí no cambia nada. Gaara"

Volví a tomar otro trago de sake a la botella deseando que me ayudara a olvidar.

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Holiiii. Bienvenidos a la historia de Gaara. Espero en estas semanas terminar con Kumo y soph; para simultaneamente terminar Ai y Kai. 

¿Alguien viene de Kumo, Soph o Ai? Comenten aquí. 

Este capítulo nació porque escuchando odio que no odio de Lasso me di cuenta que si en el universo de nuestras protagonistas existiera esta música, definitivamente esta canción sería de Gaara para Soph, así que tuve la suficiente inspiración para escribir el capítulo 0. Al igual que Soph y Ai esta historia será narrada por ambos protagonistas.

Cuéntenme. ¿Quién creen o cómo creen que será nuestra protagonista?