🩸𝒮𝒶𝓃ℊ𝓇ℯ 𝒫𝓊𝓇𝒶🩸

🩸04🩸

PILAR  DE LAS FLORES

TIEMPO PASADO....

– ¡sigue así! ¡Solo un poco más!

Un entrenamiento a pleno invierno. Nos encontramos en las montañas de norte. Dónde el clima era muy frío. Y entre más alto más frío ¿No?.

Saori se encontraba corriendo la montaña esquivando varias de las trampas que su maestra le había tendido.
Mientras que con una espada de madera cortaba todos los hilos rojos que colgaban por varias partes.

– las trampas que te pondré simbolizan los ataques de un demonio. - la menor solo escuchaba y observaba a su maestra - mientras los hilos rojos que están escondidos entre la montaña simbolizan el cuello de los Demonios. Tendrás que salir de aquí en menos de 3 horas. Son 100 hilos en total. Las trampas son infinitas.

– si.

Llevaba casi 40 hilos apenas estaba por la mitad de la montaña, lograba pasar las trampas, claro no sin un pequeño razón o herida, pero solo pequeñas.
Llevaba alrededor de una hora y media. Tenía que darse prisa.

¡Hilos!

El campo de árboles se entraba lleno de ellos.
A simple vista un humano cualquiera no podría verlos con facilidad, pues el hilo era muy delgado y la oscuridad entre los árboles no ayudaban.

Pero hablamos de Saori, al recibir un gran entrenamiento de su maestro, logro concentrar sus ojos en un solo objetivo más con la visión d en vampiro, a tal punto de percibir hasta el más minimo detalle.

Habían pasado 4 años desde que comenzó su entrenamiento.

— cuatro, siete, once.... - contaba los hilos que cortaba - veintisiete.

Veintisiete, más cuarenta que había cortado anterior mente suman....  Sesenta y siete. Solo le faltaban treinta y tres hilos por cortar y habría pasado su entrenamiento.

Sus manos se empezaban a entumede ser su Respiración la sentía cada vez más densa. Pero debía seguir, si quería proteger a los humanos, a todos, debía seguir, no importaba cuánto costará ella seguirá, por qué eso hace un cazador.

– valla lo hace increíble.

– ¡Ah! Me asustas te, creí por un momento que eras un demonio.

– Ara~ ara~. - con una sonrisa - que graciosa eres mica chan.

– se que soy graciosa - alardea - pero no es para que siempre me asustes así.

– jaja, perdón, pero veo que entrenas muy bien a... ¿Cómo dijiste que se llamaba?

– Saori. Kimura Saori. Me alegra saber que al menos no te asustasté al decirte que era una vampira.

– al principio lo tome de sorpresa, pero veo que no mentías. Lo que si me sorprendió fue la noticia de que te habías retirado.

– lo sé, pero debía darme un descanso. Pronto está niña logrará salvar cientos de vidas, estoy muy segura de ello.

– se ve que confías mucho en ella.

– si...

Ambas observaron como la menor bajo rápidamente la montaña para dar un pequeño salto y quedar frente a su maestra en una reverencia.

— logré completar mi entrenamiento maestra.

– una hora y 40 minutos, nada mal. Por cierto, Quiero presentarte a alguien.

La pequeña vampiro solo vio a la persona que estaba a lado de su maestra, era una mujer muy hermosa, llevaba un Haori con dibujos que lo hacian ver cómo una mariposa, junto a un broche de mariposa que le quedaban a la perfección.