✕ ...𝐏𝐑𝐄𝐓𝐓𝐘 𝐕𝐎𝐈𝐂𝐄¡! 𝟎𝟏

824 65 15
                                    

La alarma de su celular sonó dando a entender el inicio de otro infierno

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La alarma de su celular sonó dando a entender el inicio de otro infierno. El sol ni si quiera había salido mas el restaurante era lejos de su departamento así que debía madrugar. Ya se había acostumbrado a esa rutina, luego de bañarse de un cajón saco la base para ponerse en la cara.

Luego de maquillarse un poco salió sin desayunar no sintió necesidad de hacerlo. El cielo estaba nublado. Iba a llover en la tarde, no tardó mucho en encontrarse a los entrevistadores.

«¿No tienen otras personas a las cuales molestar?»

Ahora eran insoportables no solo preguntaban por el incidente de Qin, eran temas personales como porqué rechazo la oferta de su padre o si era verdad que había asesinado a Perséfone, todo eso lo pudo soportar excepto esa pregunta de su hermano menor.

¿Que ocurrió con su hermano Poseidón?

—Nada de su incumbencia.

Habían límites. Ya habían sobrepasado el suyo, no sabía cómo consiguieron toda esa información en una noche pero no era de su agrado. Le hacían preguntas de las cuales algunas ni el sabía la respuesta. El ruido en su cabeza era cada vez más fuerte llegando al punto en el cual las voces de su alrededor eran inaudibles.

Por más rápido que caminara seguían detrás suyo. Fueron varias calles de estrés hasta llegar al restaurante donde los de seguridad no los dejaron pasar más allá de la puerta, al entrar no fue recibido de la mejor manera.

—Hiciste un alboroto.

Hades ignoro las miradas encima suyo y se dirigió a cambiarse incluso en su situación debía mantener la buena imagen del restaurante. No tardaron en abrir, su turno iba hasta la medianoche aún debía aguantar comentarios innecesarios.

—Bienvenidos a Olympus ¿Que sería de su agrado el día de hoy?

—¿Tu no eres el de la televisión?

—Me llaman cuando tenga su pedido —Se alejó de la pareja así evitando más preguntas.

La mañana se resumió a las personas preguntando una y otra vez las mismas cosas. Su descanso por fin había llegado estaba estresado, ya se hubiera ido de ahí pero no podía aún le faltaba la mitad del turno. Escucho como la puerta se abría, era Beelzebub.

—Tiempo sin vernos ¿Cómo ha ido tu vida? Según he visto mal —El de cabello azabache estaba de pie enfrente del albino.

—No tardaste ni un día en venir a preguntarme que paso —Cruzó las piernas mientras con una de sus manos se arreglaba el cabello—. ¿Tan rápido publicaron noticias?

—Hades. Si hubieras visto la cara de tu padre y la de Zeus cuando llegaron a hacerles una entrevista —Exclamó—. Para tu suerte no me encontraron de ser así estaría acá para otra cosa. Por cierto ¿Es enserio lo del maquillaje?

𝐌𝐘 𝐃𝐄𝐀𝐑 𝐄𝐌𝐏𝐄𝐑𝐎𝐑───haqinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora