¿De verdad podría estar con un hombre como V? Una duda que tenía en la cabeza y que no saldría de ahí hasta que ella misma pudiera resolverla. Pero ya tenía la respuesta. V le encantaba. Tanto... muchísimo, que había dejado todos los problemas y defectos a un lado para fijarse en lo que sentía por él. Eso era más fuerte, juraba. ¿Pero y si en algún momento se arrepentía de estar con él? ¿Eso podría pasar? ¿Qué haría? ¿Podría alejarse de él como pensaba? ¿Y si después de saber su secreto... lo que tenían dejaba de funcionar? ¿Y si él se alejaba de ella? ¿Y si mentía de nuevo? ¿Y si volvía a desconfiar de él? ¿Cómo estaría segura de cada cosa que V le dijera?
- ¿Terminaste? — una voz al frente de ella la hizo volver a tocar tierra. _______________ se sobresaltó y abrió un poco más los ojos.
- Sí, sí... en un momento termino. — le dijo a Hyorin, la secretaria de su nuevo jefe.
- Me llevas los papeles a la oficina ¿vale?
- Vale. — respondió __________________.Hyorin salió de su pequeña oficina y tiró la puerta al salir. Todavía no lograba llevarse bien con ________________. Cuando esta miró el monitor, notó que ni siquiera había avanzado la mitad de lo que le habían ordenado aquella tarde. Jo.der. Se estiró sobre la silla giratoria y dejó salir aire. Al subir la mirada, se encontró con los pequeños ojos de Jimin, que había abierto de la puerta silenciosamente. — Ho...hola... - dijo ella con dificultad y ligeramente sorprendida.
- Hola bonita.
Aquella frase hizo que la piel de _______________ erizara.
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- Tentation no va a ser lo mismo sin ti. — dijo Jungkook. Se sirvió un poco más de cerveza y se tomó todo al primer sorbo.
V sonrió y bajó la vista, de la misma manera, sirvió un poco de cerveza a su vaso y tomó de ella.
- Se va y sin decirle nada a nadie... - susurró Suga, que fumaba desde el otro extremo de la mesa.
- Y nadie tiene porque saberlo, ni siquiera notarán mi ausencia.
- No sabes lo que dices. — intervino Jin.
- Oh... ¿te entristece que V se vaya? — Jungkook le apretó una mejilla,Jin terminó por golpearle el brazo. Suga rio y soltó humo de su garganta hacia el techo.
- Me entristece que la cajera se vaya a quedar con él sin siquiera habernos conocido.
V frunció el ceño.
- ¿Crees que si te hubiera conocido te habría elegido a ti?
- Tal vez. — los cuatros rieron. Pequeñas risas que quedarían grabadas en la memoria de V después de aquel día.
- ¿Le vas a pedir que se vaya contigo? — preguntó Suga.
- Es lo que quiero. — le respondió V. Sus palabras eran ciertas. Lo que más quería en ese momento era escuchar un "sí" de los pequeños labios de _______________. Un "sí" que haría que se la llevara lejos. Solos. Los dos. Sin importar el mundo.
