"El general Pei lo sabe", anunció Xie Lian con fingida espontaneidad mientras se disponía a moler más tinta para una de las espantosas composiciones de Hua Cheng. Los dos estaban en el Templo Qiandeng; los sonidos apagados de los bulliciosos habitantes de Ciudad Fantasma apenas se podían escuchar dentro de las paredes sagradas. Cualquier cacofonía suave que logró abrirse camino fue cubierta por el silbido silencioso del muy abusado pincel de caligrafía de Hua Cheng y el suave tarareo entrecortado que hizo para ayudar a su cerebro a concentrarse en medio de la monotonía.
"¿Mnh?" Hua Cheng inclinó la cabeza hacia atrás para encontrarse con los ojos de Xie Lian. ¿Qué sabe él?
"Que estamos casados".
"¿Gege le dijo?"
"No, dijo que podía sentirlo", respondió Xie Lian con una sonrisa, dejando la piedra de tinta a un lado antes de arrodillarse junto a Hua Cheng. Alcanzó la mano de Hua Cheng y se encontró con unos dedos fríos que se entrelazaron ansiosamente al contacto. "Y pensar... pensé que habíamos sido tan sutiles..."
"¿Esto arruina tu plan?" Hua Cheng dejó el cepillo que había sostenido con la otra mano. La tinta oscura salpicó el papel blanco y crujiente, agregando manchas y guiones errantes a sus caracteres desastrosamente garabateados. Era ridículo lo poco que a Hua Cheng le importaba el trabajo en el que supuestamente había trabajado toda la tarde.
Xie Lian suspiró. No era que su plan se arruinara necesariamente, pero ciertamente se había topado con un obstáculo.
La causa de su aflicción fue esta: Hua Cheng y Xie Lian se habían casado recientemente. O semi-recientemente, el tiempo era relativo a los que vivieron tanto como ellos. Los dos se habían fugado, sin tener testigos físicos de sus reverencias además de ellos mismos. Fue un evento glorioso, espontáneo, privado , del que nadie en los cielos había sido informado.
Y de hecho... todavía no lo había sido.
No era que sus nupcias se mantuvieran en secreto por vergüenza o algo tan dramático, se habían estado llamando públicamente 'esposo' durante mucho tiempo antes de hacerlo oficial, sino simplemente porque la ceremonia no era asunto de nadie más que de ellos. Xie Lian había pasado gran parte de su vida a la vista del público, bajo el escrutinio de cada pequeña cosa. Así que fue bueno simplemente... tener esto para él solo.
Dicho esto, Xie Lian había tenido la intención de decirles a sus amigos, Feng Xin y Mu Qing en particular, que simplemente no había tenido tiempo de hacerlo.
Que fue donde las cosas se complicaron.
No habían faltado oportunidades desde su boda para que Xie Lian informara a sus amigos sobre el agradable hecho de que él estaba completamente fuera del mercado de una vez por todas, pero siempre había alguna excusa de por qué no era el momento adecuado para hacerlo. En consecuencia, se había acostumbrado a saludar esas oportunidades perfectas mientras pasaban volando... y luego se iba a casa para ser mancillado (y mancillar a veces) por el marido que aún tenía que confesar que tenía. La cantidad de casos en que Xie Lian se había ido temprano de una reunión porque Hua Cheng le había enviado un mensaje lascivo en su conjunto privado habría conmocionado a sus compañeros dioses. Gracias a Dios, no todo el mundo era tan irritantemente perceptivo como Pei Ming.
"Esperaba un poco más de tiempo, todavía no he perfeccionado un nuevo plato para alimentarlos, pero", Xie Lian suspiró una vez más, "no se puede evitar". Invitaré a Feng Xin y Mu Qing mañana y les daré la noticia suavemente antes de que puedan escucharla de alguien más. Recuerdas cómo reaccionaron cuando apenas nos besamos frente a ellos".
"Oh sí." Hua Cheng era engreído. "Hice que una mariposa fantasma lo grabara".
"Y lo de la estatua de la montaña falsa–"
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Cuando Era Mayor (When i Was Older) TGCF [COMPLETO]
Fiksi PenggemarCuando el Xie Lian del libro 4 y su yo poscanónico intercambian cuerpos misteriosamente, los dos deben encontrar una manera de volver a cambiar mientras lidian con el impacto de su repentino desplazamiento. Con la ayuda de sus respectivos Hua Cheng...