III

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Pero yo sabía que me había amado como a nadie lo había hecho, se había entregado a mi de una forma única, fué mio y sería mio por el resto de su vida aunque no lo quisiera,entonces me decidí a intentarlo. Me acerqué a él aquella tarde lluviosa en donde se encontraba solo en el rincón de la sala, sin decir nada y sin pensarlo, solo le tomé entre mis brazos y lo besé, lo besé como si mi vida dependiera de ello y sabía que así era porque ÉL era mi razón de vivir.
-Pensé que nunca volvería a sentir tus labios- susurró con la voz entrecortada y los ojos cristalizados.
-No sabes cuanto lo lamento, me he equivocado y te he lastimado tanto-me dolía verlo así, más si era por mí
-Lo que importa es que has vuelto a mí, por favor no me hagas más daño, ya no quiero llorar más, te lo pido; solo quedate conmigo- sonrió y me devolvió la vida,¿comó podía sonreír a pesar de todo el daño que le había hecho?.
-Lo prometo- dije y lo besé suavemente,fue entonces que al intentar separarme ,solo me atrajo de nuevo a sus brazos y me besó. Me besó con necesidad, con pasión y ternura; enseguida sus lágrimas resbalaron por sus mejillas dándole un sabor algo salado y amargo al beso, dolia pero aún así fué perfecto.

Fué perfecto porque a pesar de todo el dolor y todas las heridas que nos habíamos hecho; aquí estábamos otra vez, porqué a pesar de todo yo le seguía amando y él me seguía amando, porqué a pesar de todo el daño que le había hecho me estaba perdonando todo ahora, a pesar de que hubiera besado otros labios y explorado otras bocas, seguía siendo mío, definitivamente era mío y lo sería hasta el final. Solo mío.

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Autora: Bueno es todo, espero que les haya gustado y nos vemos después:)

†Solo Mío†Donde viven las historias. Descúbrelo ahora