Sexomnia • Meanie

04

Espera... ¿Sexo dormido? ¿Con quién sea? Se cuestiona el castaño aun incrédulo debido a lo dicho por el pelinegro anteriormente. ¿Se supone que ya puede reírse? Para WonWoo sólo era una buena broma de las habituales que MinGyu siempre estaba acostumbrado a jugarle.

—¿Eh? — dijo WonWoo con voz más aguda de lo que pretendía y se maldijo por ello. MinGyu sonrió y negó con la cabeza.

—Olvídalo— murmuró sin mucha importancia.

—Espera, fue una jodida broma ¿Cierto? — dijo WonWoo con una sonrisa esperando a que el pelinegro dijera que sí para comenzar a reír. MinGyu se encogió de hombros.

—Tómalo como quieras— fue lo único que dijo el pelinegro. No pareciera que quisiera reír. A decir verdad, su expresión era más seria de lo que el castaño esperaba que fuera.

"Sí, obvio fue una broma. ¿Qué sigue? ¿Entrará a mi cuarto en la noche y me violará? Ajá." pensó el castaño con burla.

—Es... ¿De verdad? ¿Eso existe? — cuestionó. La seriedad nada habitual del más alto comenzaba a importarle más de lo que debía.

El pelinegro no quiso explicarle más. Simplemente comenzó a guardar los materiales y el trabajo en un sitio seguro, para después limpiar el desorden hecho por ambos.

A WonWoo no le quedó muy claro lo de su enfermedad, o bueno, su trastorno de sueño. (Aún cree que es broma). Pero tal vez no sea tan grave. Aunque suene un poco... Extraño. Quizá él decida contarle más con el paso del tiempo, pues si no se lo había contado antes, fue porque sus razones tendrá. (Aún WonWoo sigue creyendo en la broma).

Pensó en buscar en Google. Pero MinGyu había desconectado el internet.

"Maldito bastardo."

De todas maneras, algún día él lo sabrá. Es decir, no puede ocultárselo durante toda la vida. En algún momento tendrá que hablar y decir que sólo le quería ver la cara de estúpido. Aunque, como dijo WonWoo, suena un poco extraño. Y peligroso. Le parece poco creíble eso del sexo inconscientemente. Debe ser una de sus bromas, pensó (pésimas bromas).

"¡Y aún creo que es broma, Ja! idiota, no caeré otra vez"

WonWoo se instaló en el cuarto que está desocupado. Sólo hay dos cuartos, uno es el de MinGyu y el otro lo usa para guardar cosas viejas o que no utiliza. Aunque por suerte, tiene una cama, estable. Lo suficiente para el castaño.

—MinGyu...— le habló desde el sofá de la sala de estar. El pelinegro estaba haciendo quién sabe qué cosas en la cocina y el otro solamente se esmeró en picarle al botón del control remoto, sin encontrar algo bueno.

—Eh...— contestó alargando su voz.

—Conecta el Internet, bastardo— rogó WonWoo.

—Ya vete a dormir— dijo. El castaño rodó los ojos y suspiró.

—No tengo sueño— protestó WonWoo.

—Yo sí— salió de la cocina—. Ya terminé de limpiar. Y es hora de dormir, Wonu— dijo.

—El punto de quedarte en la casa de un amigo a dormir es desvelarte con tu amigo ¿Sabes? No pospuse mis horas de sueño por esta mierda— respondió con falsa irritación el castaño. MinGyu sonrió.

—No para mí— susurró.

—¿Y cuál es tu punto entonces, Eh? — WonWoo preguntó. MinGyu se acercó al contrario y le quitó el control remoto de la televisión para apagarla.

—Dormir— dijo. Para WonWoo, MinGyu estaba actuando de una manera demasiado extraña.

—MinGyu...— se quejó.