Miraba hacía otro lado con molestia mientras Kunikida me daba un sermón por faltar al trabajo,cómo siempre.
No me molestaban sus quejas,ya estaba acostumbrado.
Lo que me molesta es que cuando fui a la casa de Atsushi,nadie me atendió,estuve parado horas afuera esperando a que me abriera como un perro faldero el cuál su dueño olvidó dejarlo entrar.
Y yo siendo tan inteligente,me puse a gritar su nombre tanto que los vecinos salieron a reclamarme por gritar.
A mí me valió verga y seguí gritando,hasta que recordé que estaba sordo.— ¿¡Entendiste!? —grito el rubio sacándome de mis pensamientos, yo lo miré y asentí.
— Sí,Kunikida-Kun,no volverá a pasar.
No tengo ni puta idea de lo que me dijo pero esa es la única respuesta lógica que le podía dar sin que se de cuenta que no le preste atención en lo más mínimo.
El rubio respiro hondo y frunció el ceño con cierta pena,Se acomodó los lentes y coloco sus manos en mis hombros,mirándome fijamente con demasiada lastima de la que podría soportar.
— Mira Dazai,se que no te encuentras bien desde que...
— ¡NO! ¡Yo estoy perfectamente bien y no quiero volverte a oír hablar sobre eso! — alejé bruscamente las manos de Kunikida y me fui azotando la puerta Con lágrimas amenazando con salir de mis ojos.
La noche era magnífica,la luna brillaba junto a las estrellas como nunca antes lo había hecho. La mesa con comida y velas generaban un ambiente romántico,Era la cita ideal.
Normalmente pasaría la noche totalmente ebrio y llorando en mi cama,pero está noche mi tiempo estaría dedicado a alguien.
Me acerque a él viendo una de sus hermosas sonrisas,una que tanto amaba.— Fuiste bastante malo al no atenderme,gatito —el me miro confundido al no entender mis palabras,soy un idiota,lo olvidé.
Escribí lo antes dicho en una hoja para que pudiera leerlo,el tomó el papel y escribió una respuesta.
— Lo lamento Dazai-san.
— No,soy yo quien lo siente... por todo.
Extrañaba su voz,¿pero que más se puede hacer?
Mire ese hermoso rostro,que miraba la luna con una sonrisa angelical.
Es tan bello.Con atrevimiento levanté mi mano para acariciar su mejilla pero el ojibicolor se dió cuenta de mis intenciones y se puso de pie.
Para mirarme con una sonrisa algo burlona.— Se mira pero no se toca Dazai-san.
Ya es demasiado tarde,tengo que irme, Adiós.Se despidió y se fue tan rápido que pareció desvanecerse en el aire,ni siquiera toco su chazuke,que lastima.
Pero no hay nada más que hacer,al menos pude verlo unos minutos antes de que desapareciera.
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𝘋𝘦𝘴𝘱𝘶é𝘴 𝘥𝘦 𝘦𝘴𝘢 𝘮𝘪𝘴𝘪ó𝘯
FanfictionDesgarraré mi garganta en llanto y sangre para que puedas oír los ecos desbaratados de mi amor donde quiera que estés, lloraré con tanta pasión para que el mundo me vea aunque tú no puedas consolarme. ᯓ★ Los personajes no son míos,le pertenecen a Ka...