Era realmente doloroso, sentir ese dolor agudo en su cuerpo, especialmente en su pecho.
Pero extrañamente no podía moverse. Algo se lo impedía. Miró hacia arriba, viendo a su padre. Él estaba sonriendo, no era una sonrisa bonita que digamos, pero había algo extraño...faltaban dos personas. El fascista y la republicana habían desaparecido, no estaban allí. Entonces se dió cuenta de algo terrible, ellos habían salido.
Veía a aquel hombre con odio, pero sobretodo con miedo. Bajó su mirada, no merecía ver a aquel hombre que se hacía llamar su padre.
--Españita-- Dijo el hombre al fin, soltando una risa.-- Entonces, ¿cómo se siente el ser abandonado por tus niños?¿Cómo se siente ser disparado por tu hijo?¿Cómo se siente estar encerrado, mientras que ellos destruyen uno a uno a tus seres queridos?-- Esa sonrisa, la odiaba. Su padre intentaba destruirlo, lo sabía, y lo lograba. Cada palabra se clavaba en su ahora frágil corazón, haciendo que su mente se enredara más, sin saber qué hacer, siendo manipulado por ellos. Intentaba aguantar sus lágrimas, negándose a dejarlo ver en ese estado. Rezaba para que sus hijos estuvieran bien, que se supieran proteger entre ellos.
El hombre que tenía delante, Imperio Español, le agarró la barbilla, alzando su vista hacia él, mientras que Imperio Español disfrutaba de esa vista, viendo cómo el español intentaba, inútilmente, zafarse de aquel agarre. No tenía fuerzas. Y el brillo de sus ojos era más débil.
Realmente quería despertar de aquella pesadilla, levantarse y ayudar a sus hijos de aquel peligro.
Realmente quería que nada hubiera pasado, que ahora mismo estuviera en el sofá del salón de la casa, tocando su guitarra, cantando una canción en castellano antiguo, viendo a los pequeños reírse y cantar, a los mayores pelearse por un helado. Pero no, no podía. Estaba cada vez más débil, desapareciendo poco a poco, sus hijos alejándose de él, independizándose, mientras que ellos no sabían por qué su padre estaba así, y tampoco sabían del peligro que les acechaba.
Quería despertar, ver a Reino Unido sonreírle, a Murcia correr hacia él pidiendo un abrazo, a Madrid jugando con el móvil, a Castilla La Mancha y a Castilla y León charlando alegremente, contando pequeñas historias a los más pequeños, a Cataluña...a ella buscando pelea con sus hermanos, mientras que él intentaba detenerlos.
Pero no, era demasiado tarde.
Ellos ya habían abandonado su casa, lo habían abandonado a él, Franquista y República estaban afuera, buscando a sus hijos, planeando la muerte de sus seres queridos.
Realmente quería creer que todo lo que estaba pasando ahora era una maldita pesadilla, que cuando despertara todo iba a estar bien.
Pero el hecho de que sintiera ese terrible dolor demostraba lo contrario.
Imperio Español vio a España hundirse en sus ideas y sonrió, complaciente, sabiendo que lo estaba destruyendo poco a poco.
No era fácil deshacerse de un demonio interior sin ayuda.
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•Cataluña no paraba de andar de un lado a otro en el pasillo del edificio, preocupado por su padre.
Había muchas ideas en su mente que la atormentaban. Hacía días que no había dormido, preguntándose cuál era la razón por la que su padre estaba así, por la que él había vuelto después de tantos años.
Hacía cuatro días que su padre estaba postrado en aquella cama, sin poder levantarse. Era prácticamente como un muerto.
Tenía miedo, temía que él lastimara a sus hermanos...
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No Te Vayas, Por Favor. || Segunda parte [CH España]
FanfictionTras haber perdido a sus hijos, sus comunidades autónomas, España se divide en dos, que son también el pasado que quería olvidar, mientras que él va desapareciendo poco a poco, consumido por su padre. ¿Podrán sus hijos salvarlo de su destrucción? ¿P...