No soy un niño 🔞 KOOKTAE

Revelación

Taehyung corrió a la puerta, el ladrido del pequeño perro haciéndole desear con más fuerzas que fuera Jungkook quien tocara la puerta para felicitarle. No pudo evitar la decepción al ver a su mejor amigo con un pastel de chocolate.

-¿Esperabas a alguien más?- preguntó Jimin, sabía la respuesta pero deseaba que fuera él mismo quién se diera cuenta de lo que ocurría.

-No, para nada- mintió y el sabor amargo de la mentira solo empeoró su estado anímico.

-Tae, ni siquiera la hija de Yoonie me vio con tanta decepción cuando llegue a su casa. Y esa niña me odia- el menor sonrió ante lo dicho. Había tenido la oportunidad de ver la relación de ambos de su amigo y su hijastra y aunque la niña era una dulzura la relación amor odio que tenía con Jimin era algo que le provocaba gracia. - ¿Quieres hablar de eso? - preguntó Jimin llevando el pastel con el que había llegado, hacia la cocina.

-Pensé que iba a venir- murmuró Taehyung, mirando sus manos que acariciaban al cachorrito.

-¿Hoseok?- preguntó el rubio viendo la mueca de desagrado ante el nombre de su ex esposo.

-Jungkook- Jimin boqueó incrédulo -Me regaló un cachorro, pero simplemente... no sé, pensé que estaría aquí- el mayor se acercó a Taehyung y lo abrazó ocultando su sonrisa.

-Kim Taehyung, Jungkook está en Los Ángeles y no solo se acordó de tu cumpleaños, te regaló algo que él sabía que necesitabas- Jimin hablaba con un tono de voz dulce y comprensivo.

-Una mascota no es un algo- dijo Taehyung haciendo pucheros.

-Te regaló un motivo. Para llegar a casa, para levantarte en las mañanas, para salir a caminar, para no dejarte caer en la depresión del divorcio. ¿En serio no lo ves o no lo quieres ver? - Preguntó el mayor mientras partía el pastel y lo servía en dos platos.

-Tengo miedo de empezar algo- se sinceró el moreno.

-Decías lo mismo de Hoseok y durante las dos semanas que pasaste con Jungkook te veías radiante, feliz. Taetae, te veías en paz- Jimin se estaba desesperando de la negativa de su enamorado amigo

-Él llega a una parte de mí que solo tú has visto, una parte que odio por lo vulnerable que me hace sentir, y la arropa con tanto cuidado y amor, que si esto no funciona me destruirá como no pudo hacerlo Hobi- Taehyung picó con el tenedor el blando postre deshaciendo el bizcocho.

- ¿Y aún así lo dejaste ir? - pregunto con indignación el chico rubio. -Te ha amado por tanto tiempo, viendo tanto las partes malas como las partes buenas- tomó su cabello enredándolo con frustración.

-¿Y si no quiere formar una familia? ¿Si no quiere hijos como Hoseok? ¿Si me enamoro y el pierde el interés? - Jimin podía escuchar el dolor en la voz de Tae y sintió tristeza por su amigo.

-Él no es Hoseok. Es lo más alejado a Hobi que podrías encontrar, lo sabrías si te dieras la oportunidad de conocerlo de esa manera. No te cierres a la posibilidad Taetae- Asintió dándole la razón, comieron el pastel y celebraron entre los dos. Los pensamientos seguían dando vueltas en su cabeza.

Entrada la noche, después de visitar a la señora Jeong, y embriagarse en la sala de su casa con una botella de vino y un pequeño cachorro durmiendo a su lado, tomó su teléfono y mandó un mensaje sencillo.

Hola Kookie, me siento muy torpe de escribir esto, pero el miedo de no recibir respuesta se ha ocultado debajo de las cuatro copas de vino. Gracias por Tannie, Yeontan es como lo nombre. Gracias por estos años de maravillosa amistad y de el maravilloso sexo de esas dos semanas. Lamento ser tan idiota. Perdón por herirte una y otra vez. Sabes que te amo ¿no?