Rain

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Era un día lluvioso, estaba nublado y no paraba de llover en Hawkings.
Habías tenido una pelea bastante fuerte con tu mejor amiga, y habías llegado a casa llorando. Para el colmo, tu mamá también tenía un mal día y no paraba de repetirte que tus problemas son una tontería compararos con los de ella, sentías que estaba menospreciando y no valorando tus sentimientos, lo cual te hacía llorar más.
Os encontrabais discutiendo en tu cuarto, ella había entrado porque te había escuchado llorar.

- Estoy harta de que siempre llegues llorando, tus problemas son nada, NADA comparados con los míos.- dijo con una copa de vino en la mano.

Des de que papá falleció, hace un año, vuestra relación no había vuelto a ser como la de antes.

- Por favor para.- dije sería sentada en mi cama mientras me limpiaba las lágrimas.

- Tu llorando por tus tonterías y yo aquí enferma.- dijo dando otro sorbo de vino...

Se me había olvidado decirles que después de la muerte de mi papa mi mamá había sido diagnosticada con depresión.
Asistimos a terapia psicológica durante un tiempo, y funcionó, pero en cuanto dejamos de ir las cosas empeoraron, mi mamá se negaba a volver así que contrató alguien para que la cuidara y hiciera cosas de la casa, Maribel

- Mamá, por favor deja el vino, ve a acostarte, le diré a Maribel que te ayude.

Tu mamá continuó hablando cosas sin sentido, y cada vez tu paciencia era menos. Así que decidiste coger una mochila y meter las cosas indispensables, ropa interior piyama cosas de higiene etc.

- Eso es, huye de nuevo como siempre haces!- dijo tu mamá que aún estaba presente en tu cuarto.

Decidiste no responder mientras seguías guardando cosas en tu mochila. Era inútil hacerla razonar cuando bebía.

Me puse la mochila en la espalda, me abrí paso entre mi mamá para salir por la puerta de mi cuarto, baje las escaleras y busqué a Maribel para decirle que ayudara a mi mamá a prepararse para dormir y le avisé que no pasaría la noche aquí. Ella me obedeció y me abrazó.

- Todo estará bien, saluda a Eddie de mi parte.- me dijo sonriendo. A lo que yo me sonrojé. Maribel era la razón por la cual sentía que volver a casa merecía la pena.
Le sonreí

Fui al recibidor y me puse el chubasquero, cogí mi bici y me dirigí a la casa móvil de Eddie.

Al llegar dejé la bici a un lado y me acerqué a la puerta, toqué varias veces hasta que se abrió.

Me recibió un Eddie sin camiseta, con cara adormecida mientras se frotaba los ojos. Ya que era de noche.

-_____?

No pude evitar que las lágrimas cayeran por mis cachetes, a parte de eso estaba empapada.
Al darse cuenta Eddie me acercó a él, abrazándome y haciendo que entre a su casa para poder cerrar la puerta.

- Que pasó? Estás empapada

No tenía palabras, el mundo se me había venido encima.
El seguía abrazándome y acariciando mi espalda con una mano, notaba su respiración en mi cuello, debido a que el era más alto.

- Esta bien si no me lo cuentas ahora, todo a su tiempo, pero al menos déjame quitarte el chubasquero.- dijo separándose para después darme un beso en la frente.

Me ayudó a quitarme el chubasquero.

- Quieres té caliente? Tu favorito.- dijo sonriendo

Yo ya me había calmado un poco, y asentí.

Vi como lo preparaba en la cocina, se veía tan bien, con sus pantalones de pijama su pelo desordenado y su cara adormecida.

Seguidamente me tomé el té, no había nadie en su casa así que nos sentamos en el sofá.

- Y bien? - me dijo

- He tenido una pelea con Kate

- Kate no es una buena amiga amor, ya te lo dije varias veces, juega con tus sentimientos, se aprovecha de tu sensibilidad.

- Lo-lo sé, pero no quiero quedarme sola sabes?

- No estas sola, me tienes a mi, y al hellfire club, no debes invertir tu tiempo en personas como Kate.- dijo cogiendo mi mano.

- Lo sé, encima mi mamá tuvo otro de sus episodios dramáticos.

El solo me abrazó

- Todo va a estar bien.

Después de un rato fuimos a su cuarto y nos acurrucamos en su cama. Me dejó una de sus grandes camisetas para dormir más cómoda.
Me encontraba abrazada a él mientras me acariciaba el cabello, sentía su aroma, uno del que nunca me podría cansar.

Antes de dormirme besó mi frente

- Te amo _____

- Y yo a ti Eddie.

Y así fue como nos quedamos dormidos, con el sonido de la lluvia de fondo. Por alguna extraña razón el aroma de Eddie me tranquilizaba, igual que sus palabras y incluso su presencia.

Eddie Munson - One shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora