Nos encontrábamos en mi cuarto, no había nadie en casa, así que decidí invitar a Eddie para ver algunas películas en mi cuarto, una cosa llevó a la otra, y bueno, ya saben cómo acaba todo en estas situaciones.
- Espera
Me encontraba debajo de Eddie, al principio sólo nos estábamos besando, el manteniendo el equilibrio con sus brazos y yo acariciando su espalda. Pero poco a poco los besos pasaron a mi cuello, a mi abdomen, y llegó a la bragueta de mi pantalón, al sentir su mano encima entré en pánico.
- Que pasó? Todo bien? - Dijo Eddie con la respiración agitada.
- S-si, es solo que...por favor no te enojes
- No hay nada que puedas hacer que me haga enojar
- No estoy lista
Eddie se alejó de mi, mis nervios aumentaron, se había enojado?
- Esta bien, lo entiendo, todo a su tiempo
- Es que nunca he estado con alguien, ya está ya lo dije.- dije pasándome una mano por la frente
- Lo has dicho como si te avergonzaras...Eso te avergüenza?
- Es que nunca lo he hecho, y no quería decírtelo porque tenía miedo a decepcionarte o a que pierdas el interés en mi.
- _____, quizás todos los chicos con los que has estado te menospreciasen por eso, y hicieron que te avergonzaras. Pero yo no, a mi me gustas por cómo eres, no debes avergonzarte, a parte, no es mi decisión yo no puedo obligarte a hacer cosas que no quieras, y lo respetaré, es tu cuerpo, tu decides.
Me levanté de mi cama y lo abracé
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
(La foto es Joseph con pelo corto en otra película, pero no he podido encontrar algo más parecido con el personaje de Eddie. Solo imaginen que tiene el pelo largo :) )
El tenía razón, los chicos con los que había estado no supieron valorarme y no eran relaciones sanas, pero con el, des del día que lo conocí, sabía que sería diferente.
- Es tan dulce saber que me amas.- dije sonriendo
Acto seguido me dio un beso en la frente sonriendo
- Bueno, entonces quieres seguir viendo la peli?- dijo acomodándose en mi cama y dando dos palmaditas al colchón indicando que me sentara a su lado.
Asentí y me acomodé a su lado, reposando mi cabeza en su pecho, mientras sentía su respiración.
- Tienes unas manos hermosas- dijo sosteniendo mi mano y fijándose en mis dedos.
- Gracias supongo.- dije riendo y girándome para mirarle a los ojos.
La película acabó pronto
- Bueno debería irme antes de que llegue tu madre
Yo estaba media dormida
- Que hora es?
- Las diez de la noche
- Quédate a dormir
- Estás segura? Tu mamá no va a sospechar?
- Para nada, seguramente llegará y se tirará a su cama a dormir, ni te preocupes por eso. Quédate.
El asintió y se acomodó junto a mi entre mis sábanas mientras los créditos de la película seguían sondando.
