Eddie Munson - One shots

Dudas 1

Eddie se encontraba tocando la guitarra, era una vista muy agradable.

- Algún dia me enseñarás?- dije mirándolo

Me miró durante segundos, como si estuviese debatiendo algo con el mismo. Su mirada fija en la mía causo mariposas en mi estomago.

- Ven aquí- dijo haciéndome una seña.- siéntate- dijo dando palmaditas en su regazo.
Obedecí.

Después cogió la guitarra y la colocó encima mío, de manera que el podía controlar mis brazos situados en las cuerdas de la guitarra.

- Este es do.- dijo poniendo su mano encima de la mía para dirigirla a una cuerda y colocar bien mis dedos.
Sentía su respiración en mi cuello.

- Este re.- continuó

Asentí y continuó enseñándome las notas, si soy sincera, estaba más pendiente de él que de la maldita guitarra, de hecho, llegó un punto en el que ya hasta me molestaba la presencia de la guitarra, en el que solo quería girarme y besarlo.

- Y cuando me enseñarás una canción?- pregunté

- Cuando te sepas las notas y los acordes principales.- dijo sonriendo.

Bufé.

- Lo mío son años de práctica

- Y tu me darás clases? Particulares?- pregunté girando levemente la cabeza.

Después el cogió la guitarra con una mano y la puso a un lado, de manera que pude girarme con ambas de mis piernas a cada lado de su cintura.
Comencé a besarlo poniendo mis manos en su nuca y acercándolo más. El de mientras me sostenía con sus manos en mi espalda baja.
Le quité la camiseta rápidamente, y comencé a pasar mis manos por todo su torso. Y el colocó sus manos acariciando mi espalda por debajo de mi camiseta, teniendo contacto directo con mi piel.

De repente la puerta sonó, alguien estaba golpeándola.

- Hola!- golpeaba la puerta- Eddie?! Abre!

Reconocí esa voz.

- Dustin.- dijimos al unísono.

- Porque SIEMPRE es tan oportuno.- maldecí quitándome de encima de Eddie y poniendo bien mi camiseta.

Eddie hizo lo mismo con su camisa.

- Lo sé, pero entiéndelo, es un niño, más tarde continuaremos esto.- dijo y besó mis labios.

Eddie caminó hacia la puerta

- Ya voy!- gritó

Al abrirla Dustin entró como una bala.

- Eddie!- dijo alegremente abrazándolo, para después mirarme.

- Henderson.- dije en modo de salutacion.

-Oh...hola ______.

De repente vi como sus ojos se centraban en mi cabello, y después en mis labios rojos por lo que había pasado anteriormente. Al volver su mirada se fijó en los labios de Eddie, también rojos por la misma razón.

- Oh no, he interrumpido cierto?- dijo dando un paso hacia atrás.

-Si- dije

- No- dijo Eddie- No pasa nada pasa.

Maldecí a Eddie en mi cabeza, tan difícil era decir que no a Dustin?

Después de eso entró, y se pasaron todo de lo que quedaba de tarde hablando de D&D.

Intenté prestar atención, sentaba en el sofá con ellos, pero después de un buen rato se comenzó a hacer tarde y me comenzó a dar sueño, juro que intenté quedarme despierta, quería acabar lo que había empezado con Eddie. Pero no pude, fui a su habitación, me acosté, y mis ojos de fueron cerrando lentamente.
Siempre nos pasaba algo así, era casi como si Eddie no quisiera nada más que besos y caricias conmigo. Algo no andaba bien.