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Pov Lisa

Era un día normal. Estaba en la pequeña empresa con Jisoo, ya que ambas tomamos clases juntas de canto, baile, y otras actividades. Las dos estamos practicando para que algún día grandes empresas nos contraten para colaborar con nosotras, pero por ahora estamos conformes creciendo paso a paso. Aunque Jisoo ya es algo conocida, ya que modela para Dior y actúa en k-dramas, estoy muy orgullosa de ella y de cómo, poco a poco, empieza a hacerse más famosa.

En fin, estábamos en nuestro descanso cuando me comentó que había visto un comentario que le pareció muy gracioso: "Jisoo parece una motomami jajaja".

—Jajaja, nada que ver, yo no parezco una motomami —dijo Jisoo riendo—, pero lo que sí sé es que quiero una motomami.

—¿Qué es una motomami? —pregunté, mirándola extrañada—. ¿Es como la canción?

—Una motomami es alguien fuerte, independiente, audaz y segura de sí misma, pero que también acepta su vulnerabilidad, delicadeza y sensualidad —me explicó, riendo—. Una motomami no tiene miedo de ser multifacética: puede ser agresiva, poderosa y rebelde, pero también sensible, femenina y emocional. Y sí, tiene que ver con la canción de Rosalía.

Ambas nos echamos a reír.

—¿Y quién sería una "motomami"? —le pregunté con curiosidad.

—Claramente mi novia, que no sabe que es mi novia: Jennie Kim —dijo riéndose.

—Sigo sin entender del todo. Sabes que no soy tan fan de Jennie como tú.

—Mmm… —dijo pensativa—. ¡Ya sé! ¡Rosanne Park! Es totalmente tu tipo.

—Creo que me suena —respondí—. Déjame buscarla.

Agarré mi celular, abrí Instagram y busqué su user. Al momento de ver sus fotos, sentí que el aire se me detenía. Rosanne era sencillamente deslumbrante. Su cabello rubio caía como una cascada dorada, enmarcando su rostro angelical, con una piel suave y luminosa que parecía brillar bajo cualquier luz. Sus labios, delicadamente curvados en una sonrisa, transmitían una mezcla irresistible de dulzura y misterio. Pero fue su cuerpo lo que me dejó sin aliento. Sus caderas perfectamente definidas, sus piernas largas y su porte elegante irradiaban sensualidad con cada foto, pero no de una manera agresiva, sino con una feminidad sutil y encantadora.

Había algo en su mirada, una chispa juguetona y a la vez profunda, que me hacía sentir como si pudiera desarmarte con solo una sonrisa. Cada una de sus poses combinaba fuerza y suavidad, como si supiera que era capaz de dominar el mundo, pero lo hacía sin perder su calidez ni su dulzura. Era imposible no notar lo perfecta que parecía en cada detalle, desde la forma en que inclinaba la cabeza hasta cómo su ropa acentuaba sus curvas sin esfuerzo.

Me quedé mirándola, con las mejillas encendidas y el corazón acelerado. Ahora lo entendía completamente. Eso era una motomami: alguien que podía ser sensual, fuerte, y segura de sí misma, pero que también irradiaba una vulnerabilidad tierna y accesible. Rosanne Park era, sin lugar a dudas, la definición viva de todo lo que esa palabra significaba.

Me quedé pensando un rato. Había algo en Rosanne que me resultaba familiar, pero no podía precisar de dónde. Entonces, de repente, me di cuenta: ¡Claro! Es embajadora de varias marcas, como Yves Saint Laurent. Seguramente la había visto en alguna publicidad sin haberle prestado demasiada atención en ese momento. Me quedé inmersa en mis pensamientos, recordando las imágenes de esas campañas, cuando de repente la voz de Jisoo me sacó de mi trance.

—¡Lisaaa, responde! —me gritó al ver que no le prestaba atención.

—Ah… ¿sí? —contesté, todavía un poco distraída.

Quiero una motomami | chaelisa-jensoo[AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora