En el nombre del Padre. (Taiju shiba x t/n) 🔞

Capitulo 7: Complicidad.

Estabas arreglando tus cosas para irte, Angelo ya había llegado y ya había pasado la semana, cuando llegó Angelo no pudiste visitar a Taiju ya que este estaba enseñándole a cantar a los niños que estaban aquí. Ya que tenían una presentación en dos meses más para un evento que se hará para conmemorar la inauguración de este sitio. Mientras tu lo único que hacía era leer y leer. Depues de eso Taiju y tu solo se dedicaban miradas discretas pero nada más. Ahora te habías vestido para salir de este lugar, pero no podías salir con ropa normal y sinceramente odiabas eso.

Al salir del lugar sentiste varias risas alegres afuera, caminaste por el pasillo llevando una pequeña maleta cuando viste a un montón de padres abrazando a las chicas que tenían una familia, tú corazón se oprimió ya que tú nunca tuviste una situación donde tus padres fueran afectuosos contigo, al único que le dedicabas todo tu cariño era a Lion quien ahora ya no estaba. Tus ojos se humedecieron al acordarte d e tu hermano, tragaste grueso y miraste al cielo parpadeando un par de veces para que las lagrimas no salieran.

Detrás de ti sentiste una mano que se posó en tu hombro, miraste hacia atrás encontrándote con el rostro del padre angelo, lo miraste con una falsa sonrisa y miraste hacia al frente.

—a de ser difícil para ti todo esto querida —comentó el padre provocando que la ira te dominara internamente.

Difícil a sido para ti contenerte con el padre Angelo, después de toda la mierda que le hizo a tu hermano, Justo en ese momento llegó Taiju por detrás de angelo, notaste una ira intimidante antes de que se acercara por completo al padre Angelo.

—Padre yo llevaré a t/n a su casa —dijo esté posando la mano en el hombre del sacerdote Angelo quien sonrió asintiendo.

—tú conocías mejor que a nadie a Lion hijo, espero puedan a llegar hacer buenos hermanos chicos —comentó el padre Angelo sonriéndole a ambos, Taiju asintió y tomó tu maleta drenó arándotela de la mano.

—Vamos hermana t/n...

—si...

Fuiste detrás de Taiju mientras el padre Angelo les miraba irse con una sonrisa, este sonrió para sus adentros y se cruzó de brazos mientras que por detrás se acercaba la hermana Erika a mirar la expresión del padre Angelo.

—Ellos son lo que necesito para lo que planeo —comentó ángel con una sonrisa, Erika le sonrió —Sus almas son increíblemente fuertes.

—de seguro resultará mi Exelencia...

Llegaste al lado de Taiju quien tenía un lujoso auto, te habías sorprendido, miraste el asiento del copiloto notando que una pequeña pecera estaba en el asiento de al frente. Taiju guardó tu maleta en el maletero y este sonrió al ver que estabas mirando atentamente la ventana del copiloto.

—Llevarás a pequeñín entre tus piernas —te hablo Taiju con una sonrisa en los labios. Sonreíste y abriste la puerta tomaste a pequeñín con cuidado entre tus brazos para que no salpicara el agua, era un pequeño acuario redondo. Ahora entendías porque el nombre "de pequeñín" era un pez dorado bastante chiquito, era prácticamente la mitad de tu dedo índice.

Taiju se subió al auto y lo encendió rápidamente, sonreiste levantando el pequeño acuario en donde pequeñín se acercó a mirarte con curiosidad.

—No es tímido... —comentó Taiju posando su brazo detrás de tu asiento mientras miraba hacia atrás retrocediendo el auto. Te giraste a mirarlo para ver el perfil de su mandíbula, sin duda era extremadamente guapo, sus labios rojos eran muy tentadores, de un momento a otro te acordaste de lo sucedió a hace unos días atrás en el confesatorio y te sonrojaste levemente, miraste hacia adelante y notaste que ya estaban saliendo de este espantoso lugar para ti, Taiju llevo su mano ahora a el reproductor de música dejando una canción bastante peculiar, extranjera... le miraste al escuchar como el vocalista comenzaba a cantar.