Kim Doyoung es el chico más inteligente del salón, el más dedicado a sus estudios. Sus calificaciones siempre son perfectas.
¿Que pasará si lo juntan con el chico coqueto y popular para hacer un trabajo?, Puede que el pasado este a su favor, o tal v...
—¡Son unos tontos! — gritó el pelirosa mientras pasaba una de sus manos por sus ojos retirando el agua que había sido salpicada.
—Que aburrido, Jungwoo — le contestó el de cabello naranja mientras reía.
—Solo fue un poco de agua — habló el rubio riendo.
—Los voy a matar — les gritó el pelirosa saliendo del agua.
—¡Lucas hyung!, ayúdanos, tu novio quiere lastimarnos — le dijo el de cabello naranja al chico mientras corría hacia el.
—Donghyuck, mi novio es un amor — contestó el chico riendo.
—¡Es un horror!, ¡Ayúdanos! — le dijo Mark mientras secaba su cabello rubio con la toalla.
—Mejor vengan ustedes a ayudar — dijo el japonés que estaba asando algo de carne.
—¡Yuta, tengo hambre ya! — le gritó Mark.
—Mark, deja de quejarte — le dijo Kun con una sonrisa.
—Dios, siéntense un momento, hacen que me duela la cabeza — dijo Doyoung mientras sonreía.
—Jaehyun, dile a Jungwoo que se calme, está tirando agua a mi precioso cabello — le gritó el pelirrojo a su novio, el cual rio mientras colocaba unas salchichas en la parrilla.
—Ihhh, parece que está vez tu novio no te salvará — le dijo el chico de cabello largo.
—Hendery, tu ayúdame — le dijo Taeyong mientras huía de Jungwoo.
El chico pelinegro reía mientras veía a sus amigos, desvió su mirada a su novio el cual se encamino hacia el.
—¿Qué estábamos pensando al traerlos? — pregunto Johnny con diversión mientras le extendía un vaso de Coca-Cola a su novio.
—No lo sé — contestó el menor riendo recibiendo el vaso mientras veía como el castaño se sentaba a su lado.
—Pero es lindo haber venido — le dijo John mientras dejaba un pequeño beso en la mejilla del pelinegro, el cual sonrió asintiendo.
Doyoung sonrió, habían pasado unos meses y ahora todos se llevaban completamente bien, eso era una ventaja, pues podían hacer este tipo de salidas para distraerse.
—Me agrada estar rodeado de las personas que quiero, es lindo — habló Doyoung mientras miraba el cielo.
—También me agrada — contestó el castaño mirándolo, su novio regreso a mirarlo para después juntar sus labios en un corto beso.
—¡Hey, ustedes!, ya vengan a comer — les gritó Yuta.
—Si, si, ¡Ya vamos! — dijo Doyoung mientras reía.
—Si, ya vengan. Después se comen la boca — les gritó Hendery mientras reía.
—Los odio - dijo Johnny mientras se levantaba con su novio para después reír. Ambos se encaminaron hacia sus amigos, pero el pelinegro se detuvo cuando recibió una llamada.
—Doie, ¿Vienes? — dijo Johnny con una pequeña sonrisa.
—Ire en un momento — le respondió el pelinegro para después recibir un asentimiento del chico contrario.
—¿Hola? — respondió Doyoung la llamada del número desconocido.
—Doyoungnie — contestó una animada voz, el pelinegro sonrió al reconocer a su amigo.
—Ten, ¿Qué tal todo?
—Todo va genial, cambie de teléfono por cierto, espero que igual tu estés bien. Solo llamaba para avisarte que hoy regresaré a Tailandia, después de la cita que tengo con la psicóloga — le contó Ten animado.
—Eso es genial Chitta, suerte en Tailandia y... — paro un momento para saber si estaba bien hacer un chiste. —Gracias por avisar esta vez — le dijo Doyoung con una sonrisa, enseguida escucho la risa de su amigo en la línea.
—Saluda a los chicos por mi, y dile a John que aún quiero la revancha en el juego Uno — dijo el tailandés, el pelinegro sonrió mientras recordaba la vez en la que todos se habían reunido junto con Ten después de la primera cita que tuvo con la psicóloga. Sonrió mientras miraba a lo lejos a su novio riendo con Mark.
—Si, si, vuelve pronto o Jungwoo irá a Tailandia por ti — le dijo Doyoung, Chittaphon rio.
—De acuerdo, voy a volver — le contesto. —Tengo que colgar, ya debo entrar al consultorio, así que, cuídate Doyoung — le dijo Ten, el pelinegro sonrió.
—También cuídate, Ten — le dijo Doyoung con una sonrisa para después colgar.
Desde hace unos cinco meses Ten había entrado a rehabilitación si así se podría decir, a los chicos les había costado mucho confiar en él de vuelta, al igual que Johnny. Y ni se diga de Doyoung, pero con el tiempo y al ver los cambios que presentaba Ten, lograron hacerlo.
***
Doyoung se encontraba de pie en los brazos de Johnny, el castaño lo abrazaba por atrás, colocando su mentón en su hombro mientras miraba el cielo repleto de estrellas.
—Se siente lindo estar así — comentó el pelinegro mientras recargaba su cabeza en el hombro de John y sentía como este acariciaba su cintura.
—Siempre es lindo estar contigo, Doie — susurró John en su oído con una pequeña sonrisa.
Doyoung se dió la vuelta para mirarlo, sonrió levemente mientras acomodaba los cabellos castaños de su novio.
—Te amo, Johnny — le dijo el menor con una pequeña sonrisa.
—Te amo más, Doie — contesto el castaño.
Y fue así como juntaron sus labios, en un beso que demostraba mucho amor. Ambos sonreían en el beso, de ahora en adelante seguirían estando felices, por qué son lo que siempre han buscado. Se aman y es lo único que les importa.
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¿Quién hubiera creído que el pelinegro terminaría enamorado del egocéntrico más lindo que era amigo de su ex crush?, Curioso, ¿No es así?
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