3.-Romance anónimo. por Thinkus Londlord

5 1 0
                                    


Tanto estuve esperando por este momento;

que, te propongo guardemos juntos el silencio

como si fuese este nuestro más íntimo secreto;

lento, pon tu mano sobre mi pecho, y siente:


Es el compás que marca un corazón sincero...


Yo: soy la sombra de la luna llena en el cielo,

y tu: eres del sol, y solamente tu sonrisa basta

para enamorarse del atardecer en tu mirada;

tus ojos brillan como espejos de obsidiana:


Pero, ningún hombre puede vencer la oscuridad

que hay en su alma, el poeta es parte de la noche,

y la noche pertenece al pecado y sus tentaciones:


Es, lujuria la furia de mi lengua, por querer beber

el agua sexual que hay entre tus piernas; sí, quiero

embriagarme de ti hasta que amanezca, y después;

caer doblegado ante tus pies, cual noble bestia:


Bajo el sello del trébol negro, tu eres mi única presa.


Mala suerte princesa; de, sativa piel morena;

quizás, pueda tu boca de coral sobornarme

con un beso, esos que guardan el sabor del mar;

en los mismos labios que sostienen tus ¨te quiero¨:


Y no, no pretendo ser tu dueño; pero, por ti soy capaz

de romper mis alas y dejar de ser un cazador de sueños.


Yo, el que tantas veces ha cambiado de rumbo

por caprichos helénicos, y sin salir del sendero:

creo, que no tiene sentido seguir en el camino,

si tú eres la única por quien me he detenido.


Y además, me la he pasado todo este tiempo

intentando ser uno más de tus tontos amigos;

que, a golpes me he ganado el permiso del sol

y de tu boca; loca, para intentar algo contigo.


Sé, que para ti yo sigo siendo el mismo narcisista,

que se enamora primera vista de la tristeza ajena;

el que anda siempre solo, vaga durante las noches

y mientras fuma esmeralda habla con las estrellas:


Tras, una mística nube de plata, él se desvanece;

no lo parece, pero a la luz del día yo debo portar

la corona de nardos y jazmines, que se escarnecen

celosamente de la noble índole de mi espíritu libre.


Mas... yo predico con mi vida la verdad que me define; nena,

por ello debes mantener mi locura siempre firme, me conoces

y sabes que merezco todo lo que tengo; así de simple, porque,

soy de los pocos que emplean sabiamente el arte más sublime:


Al, rendirle culto a la semilla de las flores que germinan,

por lágrimas de una pena; que han caído sobre la tierra...


Veras, de esa misma manera, tu amor sin barreras;

a tal grado, puede ser considerado alta traición; por,

los que confunden un gesto tan noble de la creación,

con un acto de guerra, y solamente por manifestarse

dentro de la naturaleza bélica de su propio corazón.


Pero... nosotros somos los celadores del sentimiento pagano,

y para todos aquellos que nos han señalado, yo desato el infierno;

no, no saben... que en las sombras astrales mis quimeras mentales

se mantienen siempre a la espera, si tú así lo quieres, y si tu así me lo ordenas:


Son capaces de hacer cualquier cosa que tú quieras...

RapoesíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora