THE PIT

CAP5

Rápidamente se hizo evidente para él.

“ ¡Mmf! Mm mmmm-“

Kirishima era adictivo. Tal vez fue la emoción.

Los ojos rojos revolotean hasta los suyos y vuelve a quedarse en silencio. La cinta que le cubre la boca le impide hablar pero no le impide intentarlo.

Pero después de la última vez, Katsuki no puede esperar más de 5 días antes de pedir más.

Lleva esposas de verdad esta vez. Son de metal y se clavan en su piel si tira demasiado fuerte. Están a sus espaldas, y duele si Katsuki no mantiene la espalda arqueada.

"Lo siento, ¿estabas tratando de decir algo?"

Kirishima se parece a Satanás real . Con su pelo rojo, de punta. Sus brillantes, brillantes ojos rojos. Su sonrisa malvada y torcida. La forma en que simplemente se cierne sobre la polla de Katsuki, manteniendo sus muslos bien separados.

Exactamente donde ha estado durante lo que parecen horas.

Katsuki frunce el ceño y trata de mirarlo. Su corazón está acelerado, su pene está pidiendo atención, está jadeando tan fuerte por la nariz que es difícil respirar. Y jodidamente le encanta .

Kirishima no lo ha tocado en absoluto.

Ha sido besado por todas partes. Se pasa las manos por todo el cuerpo, pasó una eternidad chupando y mordiendo sus pezones, se rascó y estuvo dolorosamente cerca de tocar, pero aún no lo ha hecho. Y la polla de Katsuki duele.

Y de nuevo se sumerge hacia abajo. Es peor cuando está cerca. Cuando besa y lame justo al lado de donde Katsuki lo necesita, justo contra la piel de su cadera o donde su pelvis se hunde. Cuando mantiene la mirada de Katsuki.

Kirishima también lo muerde de nuevo, justo en la piel de su muslo sensible y Katsuki gime, débil y roto ahora, y sus ojos parpadean. Su cabeza cae hacia atrás contra la almohada en señal de derrota.

" MMMF".

No está seguro de lo que significa el ruido amortiguado. Por favor, o para, o Eijirou, o qué. Pero le gusta cómo suena. Mejor que la mordaza de bola. Suena como un niño patético y atrapado.

“Vamos bonita”, arrulla Kirishima, aliento cálido y tentador contra su piel. "Usa tus palabras y te daré lo que quieres".

Y es una tortura. Ni siquiera puede separar sus labios para intentar formar palabras. Se retuerce, mueve sus caderas hacia arriba pero las empuja hacia abajo como siempre.

“Mm!! M-mmmf-"

Kirishima chasquea la lengua y pellizca ligeramente su costado, algo que comenzó a hacer para que Katsuki volviera a mirarlo.

"No escucho señor, ahí dentro Katsuki".

Está empezando a parecer enojado de nuevo. Katsuki levanta las cejas.

"Mmph", jadea con firmeza. Intenta decir señor tanto como puede sin palabras.

“Mejor,” murmura Kirishima.

Un dedo serpentea hacia adentro y los ojos de Katsuki se agrandan cuando hace contacto y arrastra suavemente la longitud de su polla.

Honestamente, el gemido que hace es obsceno.

"Mira este. tan rojo Pobre cosa. Y todo lo que he hecho es besarte,” suspira Kirishima, como si estuviera decepcionado. Lástima. Lo mira con anhelo y Katsuki vendería su alma si eso significara que Kirishima se lo metería en la boca...