Summary: Adrien es un ladrón de arte que piensa que su última tarea será el atraco de su vida.
Sin embargo, en lugar de una pintura, de alguna manera se encontró en posesión de una pintora llamada Marinette Dupain-Cheng.
Portada hecha por: @KatuSeg...
Disclaimer: No son míos, si lo fueran seria esclavitud y está mal... o bueno, no podría decirlo en voz alta :v
Music:
Los comentarios, estrellitas, y las galletitas, me hacen feliz.
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—Tengo hambre—, se quejó Marinette.
Adrien siguió caminando enérgicamente, agarrando con fuerza la muñeca de Marinette.
—Dije que tengo hambre, ¿no me escuchaste?
Adrien se detiene abruptamente y Marinette se topa con él.
—No te detengas así, por favor.
—¡Quemaste mi apartamento, Marinette!
Afortunadamente, el fuego estaba contenido en el apartamento de Adrien y nadie resultó herido. Cuando la policía comenzó a preguntar por el dueño del apartamento destrozado, Adrien decidió que era hora de que él y Marinette se fueran.
Durante dos horas, Adrien había estado arrastrando a Marinette por las calles mientras trataba de calmarse. A excepción de sus pertenencias personales y varias identificaciones falsas, no perdió nada de valor.
Aun así, se quedó sin hogar porque Marinette, al despertar, cocinó fideos. Luego escuchó a un gatito maullar y fue a buscarlo, olvidando totalmente que estaba cocinando.
Para cuando Marinette encontró al gatito, un espeso humo pesado ya salía de la puerta cerrada. Adrien solo estaba agradecido de que Marinette tuviera suficiente sentido para activar la alarma de incendio.
Sin embargo, lo que más molesta a Adrien es que no puede enojarse con Marinette. Por el contrario, se culpa a sí mismo. No debería haber dejado a la pintora sola en su apartamento.
Marinette no debería haber estado en su apartamento en primer lugar. No sabe qué lo poseyó para llevarse a la pintora a casa.
—Dije que lo siento—, dijo Marinette, pero no suena ni un poco arrepentida. —Y de todos modos, me robaste.
Una vez más, la pintora logra asombrar al ladrón.
—¿Qué quieres decir con que te robé?— Adrien pregunta.
—Anoche irrumpiste en mi casa y dijiste que ibas a robar algo. Entonces me llevaste contigo. Entonces, me robaste, eres un poco cortito de mente, ¿no?—, dijo Marinette sonriéndole. —Está bien, puedo explicarte las cosas las veces que sea necesario, la gente no tiene paciencia conmigo, pero yo si tengo.
Adrien respira muy, muy profundo y se siente especialmente tonto porque lo que dice Marinette tiene todo el sentido del mundo, aun así, se niega a aceptarlo.
—Te rescaté, es muy diferente a robarte —, dijo Adrien. —Esos ladrones que vinieron después bien podrían haberte hecho pedazos para obtener lo que quieren.
Marinette solo mira hacia atrás, con la cara en blanco.
—Dije, que tengo hambre—, dijo como si no le dijeran que su vida estaba en peligro.
—¡Por los clavos de cristo, si eres rara!— Adrien exclamó a nada de ahorcarla.
—No soy rara, soy autista, creí que lo habíamos dejado claro.— Dice y Adrien gime dándose por vencido caminando frente a ella con la cabeza gacha, mientras Marinette lo toma del final de la camisa para caminar con él sonriendo un poquito...
Continuará...
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Ya vineee~ adoro a mi bebé azul 🔵 es tan relajada :v
