CAPITULO 3

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"Un rostro bello pero inexpresivo, una voz suave pero glacial, cabello oscuro con brillos azabaches como el mismo manto estelar, piel pálida como la nieve y labios tan rojos como la sangre, definitivamente la encarnación de la belleza de la muerte "

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Enigmática joven

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Narra Cinco

Esa enigmática joven parecía casi controlar a papá, sabía cómo persuadirlo, como hablar en su idioma y lograr que cumpla sus deseos, lo cuál era aterrador, nuestro padre nunca se preocupo en escuchar nuestras quejas o sugerencias fuera de las que no estaban en contra de su voluntad, pero ella lo convencía de que cumplir su voluntad era incluso más beneficioso.

Lo más escalofriante era que escucharla a hablar a ella era como oír a papá, puedo jurar que si papá hubiera tenido una hija biológica, sería igual a ella.

Sus vestimentas a diferencias de las nuestras que era un uniforme que todos odiabamos, ella podía vestir como quisiera, usaba ropa que podría jurar era del estiló de papá, ella era como una muñeca de porcelana, por fuera su belleza era cautivante y a la vez horrorosa, parecía estar tan vacía como esas muñecas en el desván, su mirada se veía opaca, a vida, ni siquiera brillo, su rostro nunca mostraba emociones, su voz era suave pero nunca había nada en ella fuera de una vacuidad que calaba hasta los huesos, era como papá.

El sólo hecho de pensar que en algún momento tendría que casarme con ella, me hacía querer salir corriendo, ella era tan inhumana que en lugar de casarme con una mujer, empecé a creer que papá quería casarme con un cadáver, una muñeca hecha solo con el motivo de verse hermosa y perfecta ante todos y saber cómo manejar las cosas como el quería.

A pesar de eso la soportabamos, le agradecemos que al menos logró convencer a papá de dejar ir a Klaus con un psicólogo que tratará su trauma, aunque solo haya sido por qué consideraba que un miembro del equipo que no come y no se mantiene fuerte no tiene utilidad ni como carne de cañón, igual se lo agradecimos, claro, de forma silenciosa.

Durante los entrenamientos ella solo se mantiene al margen junto a papá ayudando a medir tiempo, hacer anotaciones y incluso ser jueza en los enfrentamientos.

Incluso nos deja sin habla el hecho de que él le permite usar su reloj de bolsillo, escribir en su Amada libreta y pide su segunda opinión en asuntos como nuestra nutrición, educación, vestimenta, castigos o salud, cosa que ni siquiera Pogo tiene el derecho a decir pio, era como ver a su versión joven y femenina.

Que maldito terror pensar que será mi esposa, que alguien se apiade de mi alma por qué ese ser sin alma me va a terminar tratando como papá lo hace, estoy seguro.

-Joven Cinco, Sir Reginald lo llama -hablando del demonio, me giró y la veo parada en el umbral de la puerta, como diario, viste con uno de sus atuendos egocéntricos, si tuviera un poco más de expresividad me permitiría al menos pensar en ella con motivos sexuales, pero por más hermosa y seductora que fuera, su cara de muerta le quita el encanto y yo no padezco necrofilia, me reí ante mi último comentario.

-bajo en un momento, de casualidad sabes por qué me solicita? -ella no dice nada y entra en mi habitación, lo inspecciona con la mirada y termina negando- Veo que no sabes -ella dirige su mirada a mi y juro que con ella me dejó helado.

-Le recomiendo ir presentable, su padre tiene visitas- ella me habla de usted aunque para mí tutearla me sale natural, yo solo asiento, ella abre mi armario y saca un Smoking corte italiano y lo deja sobre mi cama -lo necesitará, nos vemos luego joven Cinco -ella sale de mi habitación a paso elegante no sin antes detenerse en la puerta y sacar un reloj de bolsillo y revisarlo - lo esperan en 5 minutos -entonces ahora si se fue y yo solo fui abajo, seguro papá tiene alguna junta con un empresario y como siempre, decidió presumirnos con orgullo, a pesar de que nos llame incompetentes a puerta cerrada, no dejamos de ser el equipo de superhéroes más aclamados en el mundo.

Tiempo Después

Desperté por un fuerte dolor en mi pierna, malditos sean los calambres nocturnos, después de unos segundos que me parecieron minutos, desapareció, suspiré sintiendo el sudor en mi rostro, me levanté y vi en la oscuridad de mi habitación el reloj el cuál decía que eran las 2 a.m., trate de conciliar el sueño pero me dio sed, me levanté y decidí ir por un vaso de agua, camine por los pasillos tratando de no hacer ruido, entonces pase por el gimnasio donde el sonido del agua me llamó la atención, quién demonios entrenó a estas horas y se está duchando en las regaderas que están ahí para después del entrenamiento? Me asome pensando que tal vez el idiota de Diego volvió a escaparse para fornicar con Lila y para que nadie lo notará se ducho ahí, pero casi me ahogo con mi saliva al ver a T/N desnuda suspirando bajo el agua, aparté la mirada y mi conciencia me dijo que lo mejor sería que me fuera de ahí y fingiera que nada paso, pero yo decidí volver a verla, tal vez era morbo lo que me orilló a querer verla, siempre era fría y impenetrable, pero ahora, ahí desnuda lavando su cuerpo, completamente vulnerable y frágil causaba que mis hormonas hicieran una fiesta, me le quedé viendo más tiempo del que creí por qué de pronto su voz me hizo darme cuenta de la pendejada que estaba haciendo y lo idiota que seguro me veía.

-¿Sabe que es de mala educación espiar a una dama mientras se ducha, Joven Cinco? -Cualquier pensamiento pervertido que se viera generado en mi cabeza desapareció al escuchar su voz tan fría, de nuevo no podía percibir emociones, ni siquiera enojo, finalmente decidí irme de allí lo más rápido posible pero cuando me gire para irme una mano me detuvo al tomarme del hombro, me volteé lentamente para encararla, a fin de cuentas el maleducado fui yo al espiarla, sin importar lo mucho que me recordará a un cadáver seguía siendo una dama a la que le falte el respeto al irrumpir su privacidad, pensaba disculparme pero las palabras murieron en mi garganta al ver qué ni siquiera tuvo la decencia de ponerse una toalla, estaba desnuda frente a mi sin una pizca de vergüenza, y lo peor es que mi mirada se permitió escanearla con lujo de detalle y incluso concentrarme en los pezones rosados y erectos debido al fresco del ambiente.

-ya acabo de analizarme, Joven Cinco? -la mire con una sonrisa cínica.

-lo dice la que ni siquiera tuvo la prudencia de cubrirse con una mísera toalla, casi es como si te me ofrecieras -no se de dónde salió eso, pero me hizo sentir satisfecho decirlo.

-Vayase a dormir, Joven Cinco -ella se fue fríamente, volviendo sus pasos, solo para girar un poco el rostro, lo suficiente para verme por encima del hombro y sucedió aquello que no pude creer...me sonríe cínicamente y sus ojos brillan con burla solo para decirme con el mismo tono cínico que use con ella -y asegúrese de decirle a su miembro que es de mala educación erguirse ante una señorita - soltó una ligera risilla para irse a los vestidores a cambiar, entonces al mirar abajo vi como estaba ligeramente duro, maldita sea mi suerte.

Tuve una maldita erección frente a T/N, que podría ser peor?

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Continuará...

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LA PAREJA PERFECTA PARA UN HARGREEVES  [Cinco Hargreeves]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora