CAPITULO 5

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"Sonríe, sonríe por qué es más fácil que decir lo que te está matando por dentro"

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No es humana

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Narra Cinco

Estaba desayunando yo solo, mis hermanos están castigados, ¿Cómo fue que pasó? Es simple, la noche anterior se escaparon de la casa para ir a un concierto de una banda llamada NoName, yo no fui porque quería seguir leyendo Heist, pero se supone que en esa clase de escapadas, yo era quién media el tiempo y les avisaba cuando debíamos regresar antes de que papá nos atrapará, como era de esperar, se les pasó el tiempo y pues ahora papá no los dejará desayunar hasta que terminen de limpiar el sótano, que dios se apiade de sus almas y sus estómagos.

Escucho unos característicos tacones y la veo, como todos los días está vestida de forma rara y su cabello está perfectamente recogido, pasa a mi lado y se lleva mi taza de café.

—Hey! Ese café es mío, devuélveme esa taza o te enfrentarás a las consecuencias —ella sonríe de nuevo, sigo preguntándome por qué carajos finge no tener sentimientos?

—O si no que? —le da un trago a mi café solo para hacer una mueca, se lleva el café y veo la mayor atrocidad cometida por el hombre: le puso leche al café.

—Como te atreves!? Sabes lo que acabas de hacer!? Es una blasfemia ponerle leche al café negro —ella solo lo bebe frente a mi cara.

—En mi opinión sabe mejor con leche —se va de la cocina y yo decido servirme otro café, escucho sus pisadas volviendo y decido mejor no soltar mi café, no quiero que lo arruine, me volteó y la veo colocar una caja rosa grande sobre la mesa —Traigo una ofrenda de paz —me acercó y leo lo que dice con letras negras en cursiva : Griddy Donuts.

Donas? —y está como sabe que nos gustan las donas?

—Donas hechas especialmente para ustedes, son 24 donas, 3 para cada uno hechas con el sabor favorito de cada uno y rellenas del mismo, con decoración del color favorito de cada uno —y eso por que?

—por que tomarte tantas molestias?

—Feliz cumpleaños, Joven Cinco —miro el calendario y efectivamente es 01 de octubre, que rápido paso el tiempo.

—3 donas son tuyas, no?

—si.

—te cambio una de las mías por una tuya.

—para que?

—tengo curiosidad.

—tu curiosidad te meterá en problemas un día de estos, pero está bien, no tengo problema.

Me acercó y abro la caja, tal como dijo ahí estaban las donas de cada uno, tomé las 3 que son mías y ella tomó las suyas, las mías tenían glaseado de cereza arriba, seguramente estaban rellenas de grosella, le di una y ella me dio una suya, las suyas tenían una cubierta de glaseado blanco, la miré y ella solo bebía su café tranquilamente aunque notaba un brillo de... desilusión.

—Feliz cumpleaños, T/N —le dediqué una pequeña sonrisa, a fin de cuentas no soy idiota, ella se tomó la molestía de darnos esto como un regalo de cumpleaños, papá ni de broma lo haría, ella solo asintió y sonrió ligeramente.

Mordí la dona de glaseado blanco y me percaté que el relleno era como limón, y el glaseado sabía dulce, lo que daba la sensación de comer pay de limón, estaba más deliciosa de lo que creí, ella se empezó a reír a carcajadas muy quedas, yo le miré confundido hasta que mamá empezó a limpiar mi cara, seguramente me veía como un crío ensuciando mi rostro al comer.

—Hey no es gracioso, además...ésto sabe a pay de limón, como tú sabor favorito es un postre, es raro —ella solo siguió riendo hasta que mordió la dona roja y se quedó callada degustando, a diferencia de mi, cuido no ensuciarse.

— pensé que sabría asquerosamente empalagosa, pero el sabor de la cereza no es artificial, por lo que su acidez se queda ahí junto con la dulzura de la grosella, hace un buen balance de sabores, lo reconozco, sabe deliciosa — siguió comiendo.

Y por ese momento, me pareció linda.

Tiempo Después

Estábamos mis hermanos y yo en la habitación de Allison, era una pijamada que hacíamos cada año para festejar nuestro cumpleaños, papá al menos se hacía de la vista gorda por hoy, estábamos hablando y comiendo como ya era costumbre.

—Debo decir que me sorprendió el gesto de las donas — mencionó Ben haciendo que volviera a recordar ese desayuno, el solo recordar su risa causo que se me subieran los colores, que estupidez, en qué estoy pensando?! —Tal vez ella no sea tan mala, solo es un poco fría.

—ya estás sonando como Aiden, Ben, esa chica es más fría que el congelador, o que? dirás qué en realidad solo finge? No me hagas reír — Diego comió más papas fritas, rápidamente desvío mi mirada de la ventana y lo veo.

—No son cosas mías, no miento, ella de verdad no es tan fría, al menos no del modo en que creímos, me atrevo a decir que tiene una personalidad sarcástica y muy atrevida en algunas ocasiones.

—Lo perdimos —dijo Allison dramáticamente— será que la razón por la que Aiden es arromantico es por qué en realidad le atraen los Icebergs? Por qué podría jurar que suena como un enamorado.

—opino lo mismo, que está pasando Aiden? Cuéntanos —ahora Luther también?

—No está pasando nada, solo finalmente estoy viéndola como lo que es, un ser humano.

— Hermano enserio, ella se porta como muchas cosas pero hay que admitir que como humana no, es más sencillo sacarle conversación a una piedra que a ella —Viktor acabar de decir eso y bebe de su gaseosa.

—bueno, ya cambiando el tema, que me van a dar de regalo esté año, queridos hermanos? —pregunta Klaus quién ya está casi completamente recuperado por su trastorno.

—pues tú me tocaste a mi en el intercambio, ten ábrelo —dijo Diego dándole una caja forrada de color naranja, Klaus la abre para sacar una botella rellena de sus dulces favoritos  y una tarjeta  —feliz cumpleaños —Klaus abraza a Diego con mucha fuerza y luego se gira a verme.

—Querido Aiden, tú me tocaste a mi —saca una bolsa de color azul marino y la deja sobre mi regazo—abrelo, corre— yo empiezo a revisar y saco el papel picado que evita que vea dentro, entonces saco una camisa negra con un short, supongo que es una pijama, pues regalar ropa es inútil si no podremos usarla igual —lee lo que dice —entonces veo que dice: I am the daddy here y entonces me río al acordarme de cuando jugábamos a la casita y yo decía eso siempre —aun hay más, revisa —meto mi mano y saco un juego de pulseras, una es azul y la otra es plateada, también tiene dulces y una carta que dice: Feliz cumpleaños idiota —Feliz cumpleaños idiota!.

—Klaus! —dice Allison.

—que? No dije nada malo —Son estos momentos cuando me doy cuenta que sin ellos definitivamente me volvería loco, no sabría que hacer.

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Continuará...

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LA PAREJA PERFECTA PARA UN HARGREEVES  [Cinco Hargreeves]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora