2 | EL CEREBRO DE DUSTIN

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C A P I T U L O   D O S
el cerebro de dustin

C A P I T U L O   D O Sel cerebro de dustin

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               GREG ENCONTRÓ A SU MADRE HABLANDO POR EL TELÉFONO

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               GREG ENCONTRÓ A SU MADRE HABLANDO POR EL TELÉFONO. La cocina estaba inundada con el olor inconfundible de tostadas y huevos, causando que el estómago le rugiera como si no hubiera comido durante mil años. Se dirigió a buscar unas bolsitas de té de la alacena, saludando a la mujer que le dio la vida con un beso en la mejilla. 

—No, Karen, me temo que no podré ir —decía Rebeca, con una mueca en su rostro—. ¿Por qué? Es que mi esposo llega hoy de su viaje. Ha pasado una temporada lejos así que quiero recibirlo con una rica cena.

El chico puso a calentar un poco de agua para su té y al mismo tiempo escuchaba atento la conversación. Karen era el nombre de la señora Wheeler, mamá de Mike, quien últimamente se llevaba a su madre a la piscina pública de Hawkins casi todos los días a tomar el sol y pasar el rato. Había notado a su mamá más sonriente que antes y lo asoció a que, como todos en la casa, era más feliz cuando su padre no estaba cerca. Una lástima que hoy se acabara la diversión para todos y diera comienzo al terrible juego de escondidas al que estaban acostumbrados.

—Sí, sé que estará ahí, ¡no lo digas en voz alta, por el amor a Dios! —Rebeca soltó una risita, mirando a su hijo de reojo, quien fingió ser sordo. Sabía de quién estaban hablando; Tabitah le contó que un día fue a la piscina pública con Eddie y ambos descubrieron a su madre y sus amigas mirándole el trasero a Billy, el hermanastro de Madmax—. Pero aún así no puedo ir, lo lamento. Será en otra ocasión, ¿vale? Lo prometo.

Colgó el teléfono un rato después, borrando la sonrisa que iluminaba esa bonita cara porque sabía que no cumpliría esa promesa. El chico la observó un momento, apreciando sus facciones. Para su desgracia, físicamente era idéntico a su padre. Todo el mundo se lo decía y  lo detestaba. El mismo rostro, el mismo cabello, los mismos gestos. Lo único diferente eran sus ojos, pues mientras su padre los tenía de un azul celeste que ninguno de ellos había heredado, los de Greg eran verdes como los de Rebeca. Desde mucho tiempo atrás deseaba haber sido idéntico a ella. La amaba, podía decir fácilmente que la amaba. Con su padre, bueno, era un caso distinto.

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⏰ Última actualización: Mar 11, 2023 ⏰

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