TÚ Y YO, UNA VEZ MÁS

Capítulo 9; Afianzar

Los Lobos se giran hacia nosotros, sin dejar vernos aún quién está en el suelo.

—A la mierda.— dice Liam moviendo los brazos y llamando a los tres Lobos que enseguida van detrás de él. El corre.

Lo miro con los ojos abiertos perderse en el bosque y los Lobos detrás. Estoy en un sueño, ¿verdad?

Matteo va detrás para intentar alcanzarlo.

—¡Stella!— Marlene se agacha hacia su hija.

Se me llenan los ojos de lagrimas. Oh dios. Era Stella

Mi hermana le susurra cosas y la coge en sus brazos, a La Niña se le cae la cabeza, no responde.

Matteo llega enseguida, sudado. Se agacha también ahí. La examina por todos lados. Están frenéticos. Miro hacia atrás sin ver a Liam.

—Mi niña... Stella, mi vida...

—Dejadme verla.—me agacho decisiva.

—Matteo apartate, déjala ver.—dice Marlene arrastrando a Matteo quien tiene la cara contraída.

Voy a hacer una reanimación cuando noto su pequeño pecho moverse.

—Respira.—susurro poniéndole los dedos debajo de la nariz, también le tomo el pulso. —Es lento pero no débil. La han dormido.— les digo a mi hermana y mi cuñado.

Matteo la coge y la abraza, su cuerpo casi desapareciéndola, protegiéndola.

—Llévala con Harry.— dice Marlene dándole un beso a Stella. —Matteo...

—No voy a permitir que le pase nada. Vuelvo enseguida.— Matteo agarra con fuerza a su hija mientras mira a mi hermana.

—No. Yo me ocupo de mis hermanos. Quédate con ella.— le dice Marlene.

—Len.

—Por favor.— dice Marlene llorando.

—¡Megan!— la voz en el pinganillo de Liam me asusta.

—¿Qué...?

Se oye un disparo.

Marlene y yo nos levantamos enseguida. Dejamos a Matteo y a Stella atrás.

Sinceramente no me asusto cuando oigo a Priya y a Cloe bajar con las cuerdas y ponerse a correr con nosotras con las armas en alto, yo solo quiero llegar al sitio donde se ha oído el disparo.

—Ya hemos matado a un grupo desde arriba, ninguno parecía el jefe, llevaban máscaras negras.— Priya informa.

Cuando llegamos a la zona del disparo vemos a una persona enfrente de Liam. A su lado está Sarah y Zack.
Están de rodillas.

—¡Eh tú!—Len llama la atención del de la mascara. —Soy Fuoco nel M. Aquí me tienes.

—¿Y el disparo que sonó?— le preguntó a Liam.

—Lo hizo el para que vinierais.

—Mirad esos collares.— susurra Cloe pero todos los oímos en el pinganillo.

Miro los cuellos de mis hermanos. Tienen un collar compartido. Si uno tira hacia su lado al otro le atravesará el cuello un cuchillo que tiene cada collar.

—Tenéis que elegir.— dice la voz robótica del tipo de enfrente.

—Hijo de puta.— susurra Marlene.

—Len, no podemos localizaros. Hay unas ondas que redistribuyen los geolocalizadores, deben de ser ellos. No... no podemos ayudaros.— Matteo habla por el pinganillo.