I:"ᴇʟ ʀᴇʏ"

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1972

Jueves por la noche. Louis se encontraba en su auto, ebrio -últimamente siempre estaba en ese estado-. 

Para nadie era una sorpresa ver a Louis tomando mientras conducía. Nadie sabia por que lo hacia, solamente él se iba y desaparecía días o semanas. Él afirmaba siempre que estaba bien, pero era claro que por dentro algo le sucedía.

Karoll, quien vive con él, al principio creyó que tan solo al chico le gustaba beber pero todo cambio cuando hace un año Louis desapareció por dos semanas y al volver el estaba en la puerta de casa llorando desgarradoramente. Ese día supo que él chico no estaba bien.

El castaño manejaba a fuertes velocidades; podría estar libre de accidentes pero no de policías. 

No tardo en aparecer una patrulla de policías detrás de él, a lo que Louis comenzó a maldecir a los hombres por dentro. 

Desde que ocurrió lo de Harry... ya no ve a los policías igual que antes. 

──Hijos de puta. ── Susurro deteniendo el auto.

Ambos autos se detuvieron, a lo que uno de los policías bajo y camino hacia el castaño. El moreno dio unos golpecitos sobre el vidrio y Louis con un suspiro bajo la ventanilla. 

──¿Qué lo trae por aquí, oficial?──pregunto Louis fingiendo amabilidad. 

Este le echo un vistazo en el interior del auto. ──¿Por que estaba conduciendo con exceso de velocidad a estas horas de la noche?

──Para llegar pronto a mi hogar, así poder ver a mi esposa e hijos ──mintió con una sonrisa.

El hombre frunció un poco su ceño. ──Le haremos una prueba de alcoholemia. 

<<mierda>> pensó Louis por dentro.

──Voy a necesitar que abras tu boca y sueltes aire hasta que esto suene. 

El castaño coloco el pequeño aparato en su boca y comenzó a soplar muy fuerte, tanto que se rostro se puso un poco rojo. 

La prueba de alcoholemia estaba lista, y el policía sabia los resultados. 

──Necesito que baje del auto, por favor. 

El corazón de Louis empezó a palpitar rápidamente. ──¿exactamente por que debo bajar del auto?

Suspiro. ──baje del auto si no quiere que llame a refuerzos. 

Louis no creía en Dios pero momentos como estos le rezaba para que no lo detuvieran. 

El chico se quito el cinturón de seguridad y lentamente coloco los pies sobre el suelo. 

──Con permiso, mirare por dentro ── aclaro el moreno. 

Louis empezó a morder sus uñas mientras que el otro hombre checaba su auto. Todo iba normal hasta que el policía lo miro extrañamente, ahí el castaño supo que la había cagado.

En menos de dos segundos el hombre tomo a Louis y lo acorralo fuertemente contra la parte delantera del auto, allí rápidamente le coloco unas esposas.

──¡Queda detenido por conducir alcoholizado y llevar drogas!

──¡No son drogas pedazo de imbécil! ¡es tan solo yerba! ¡ni siquiera lo he consumido!──exclamo furioso. 

Y así fue como Louis termino en la cárcel por segunda vez en su vida.

                        (...)

El castaño se encontraba frente al juez con diez policías a su alrededor. Este aun tenia esas incomodas esposas en sus manos y ya deseaba irse. 

──Tomlinson, usted tiene un gran historial ──dijo sarcástico. ── No me sorprendería que un hombre como usted consumiera droga. 

the dancing devil: Encuentrame #2 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora