Me he lanzado hacia el jardín, donde debajo se encuentran los rosales que esperan florecer una vez que termine el invierno.
Y de todo esto, no sé que ha sido lo más doloroso; el leer tus palabras sin recibir un último te amo o lo que creo ahora es el piso debajo de mis quebrantados huesos. No puedo permanecer con mis ojos abiertos mucho tiempo, después de todo, mi cuerpo a azotado fuertemente.
"Ethan... te amo."~¡Raziel!, ¡Raziel!, escúchame Raziel, hey, hagan venir a Esteban, a Joseph, ¡a todos los médicos que hagan falta, no importa!~ Alumbrado por tenues luces de quinqués, se encuentra un hombre de alta estatura, encorvado delante del cuerpo del joven de blanca piel y ojos amarillos, que yacen cubiertos por los finos parpados cubiertos de sangre, que se hace notar por los destellos de más lámparas que van llegando al socorro.
~Raziel, hermano, ¿qué ha pasado?, ¿fue un accidente o es tu intención morir?, Raziel, por favor, no nos dejes, no me dejes, hermano.~
Entre prisas unos sirvientes llegaron con una camilla de tela improvisada, mientras que aquel caballero de tez blanca y un rostro endurecido por la tristeza y la preocupación de ver a su hermano tendido, mandaba a preparar telas y agua caliente para poder limpiar el cuerpo, para cuando llegarán los médicos pudieran proceder a realizar las curaciones correspondientes.La noche transcurre en un umbral de silencio. En uno de los cuartos se encuentra una madre pidiendo a los cielos la ayuda de la diosa Valyain, para que su hijo más pequeño no pase a mejor vida; mientras que en la sala se encuentran los sirvientes que entran y salen con los pedidos de los médicos, siendo supervisados por Magno y Maurice, los dos hermanos mayores, que dando vueltas en la recepción, esperaban recibir noticias favorables, sin descartar la posibilidad de que algo pudiera salir mal.
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Fragancia de un amor a ciegas
De TodoUn alpha separado de su omega por una terrible guerra, decide que su amado ha esperado lo suficiente y que es hora de dejarlo libre. La tristeza de Raziel al recibir una carta, hace que nuble su cordura y decida terminar con sus días... solo que el...