Caminaron un poco más cruzando algunos pasillos y pronto el pelinegro vio una parte del bello jardín por los grandes ventanales. El castaño se adelantó para abrir las puertas de vidrio y empujar estás como si fuera una película estilo princesa. El cabello del menor se meneo un poco con la brisa que entro por las puertas, ahora abiertas. El pelinegro sonrió por qué le parecía estar en un sueño, sentía que ese tipo de jardines solo se veían en películas de fantasía. El jardín era hermoso le daban unas ganas enormes de traer sus brochas, pinceles, sus acuarelas y un cuadro, para poder pintar y capturar lo bello de ese jardín.
—Veo que te has quedado maravillado, mi ángel— El castaño le hablo con una sonrisa arrogante, como si se estuviera autofelicitandose por la exelente idea que tuvo, y pronunciando aquel apodo que en esa media hora que llevan juntos, no a dejado de repetir.
El pelinegro no contesto el comentario del castaño, por qué estaba demasiado embelesado con tantas flores, había margaritas, girasoles, amapolas y de todo tipo, y aunque lo llamen cliché ahí estaba el admirando la peculiar belleza de unas rosas rojas muy bien cuidadas.
Se acercó y tocó los pétalos de una de ellas, eran hermosas, tanto su color como su delicada textura y su maravilloso aroma, eran una exquisites.
El castaño vio que su acompañante se había quedado admirando la belleza de las rosas por lo que una idea paso por su mente.
El menor sintió la presencia del castaño muy cerca suyo, llagando a cubrirlo por completo con su sombra, gracias a su enorme anatomía. Luego se percató de unos delicados y suaves pétalos que recorrian delicadamente su cuello y mandíbula causando que se estremeciera, y pronto se dió cuenta que era una bella rosa en la mano de su fornido acompañante, este paso la rosa por el poco cuello descubierto del menor, delineando su mandíbula, el castaño paso la rosa por las suaves mejillas de algodón del pelinegro terminando en su mento, el cual Payne levanto con suma delicadeza con la misma rosa, haciendo que sus rostros estuvieran a tan solo unos centímetros y era tanto la cercanía que sus respiraciones se mezclaran.
— Una bella rosa, para un bello ángel— Las palabras del mayor salieron en un susurro suave que hizo estremecer la piel del menor, haciendo que su respiración se vuelva cada vez más pesada, como si no hubiera suficiente oxígeno a su alrededor con el cual poder respirar.
El castaño paso la rosa una última vez por la exquisita piel del menor antes de tomar una de sus manos y entregarle la bella rosa. El pelinegro no reacciono inmediatamente pues este se encontraba en un estado muy febril por culpa de la cercanía y el toque del contrario, y por si fuera poco también tenía sobre el esos ojos seductores llenos de fuerza y poder, que lo hacían arder en pasión y lujuria.
— Gracias— Se esforzó todo lo que pudo para no tartamudear pero no pudo evitar que sus palabras salieran ahogadas y jadeantes, y esto causo el descontrol en el castaño, que sí ya se sentía como un adolescente hormonal ahora se sentía como un lobo en celo.
El ambiente en el lugar se sentía pesado, se sentía como una noche de verano a pesar de estar ya en otoño. Sus ojos seguían conectados y pudieron pasar horas pero para ellos solo fueron unos segundos, y de repente ambos tuvieron la misma idea y el mismo sentimiento, se fueron acercando poco a poco el castaño se inclinó un poco y acercó el rostro al del menor el cual también se acercaba lentamente, ambos cerraron sus ojos y como era de esperarse sus labios se unieron en un beso, que al principio solo fue el toque de sus labios pero se sintió también para ambos que no pudieron evitar profundizar aquello, aunque seguian siendo solo unos labios moviéndose sobre otros, pero ambos lo disfrutaron como si bebieran del nectar más puro y delicioso en toda su vida.
Se separaron minutos después por culpa de la falta de oxígeno, y fue el momento en el que se miraron a los ojos el peli negro llevo su mano a sus labios, sorprendido no es como si fuera su primer beso pero se sintió como si lo fuera.
El castaño paso su mano por la mejilla del menor acariciando está con tanto cuidado que parecía tener miedo de romperla, el castaño le dedicó una suave sonrisa y abrió su boca para decirle uno esos comentarios tan coquetos que solo decía cuando estaba con el menor.
— Ahí estás te estaba.. —Y como si ellos hubieran estado en una dimensión diferente a la del mundo a su alrededor y hubieran Sido extraídos y sacados a la fuerza, se separaron un poco y miraron de diferente forma al intruso rizado que los había interrumpido.
El menor lo miraba con suma vergüenza y un sonrojo incontrolable, mientras que el castaño miraba a su amigo con cara de un sicópata a punto de cometer un asesinato.
Aún así el rizado ignoro la situación por el momento y también la mirada de su amigo, y se enfoco a lo que vino —Te estaba buscando Liam. Muchas personas están preguntando por ti, ya sabes quieren unas fotos contigo y ver si podrían convertirse en tus socios.
— Yo creo que.. de seguro mi familia me debe estar buscando — el menor hablo captando la mirada de los dos castaños pero antes de comenzar a caminar sintió la mano del castaño tomarlo del brazo.
— Espera —El mayor lo miro y luego miro a su amigo indicándole que le diera espacio y el ojiverde entendió y se retiró sin decir nada— Aún no me diste tu número o tan siquiera algo con lo que contactarme contigo.
El pelinegro por más que allá querido no pudo aguantar su fuerte sonrojo ni la gran sonrisa que salió de sus labios— te puedo dar mi número.
La sonrisa del castaño fue enorme y sus ojos brillaron mientras sacaba su celular de su bolsillo trasero, lo desbloqueaba y se lo pasaba al menor para que esté introdujera su número. Cuando el menor termino de anotar su número se lo paso al mayor, pero lo que el menor no vio fue cuando el castaño agendo su número con el nombre de Mi Angel y un gran corazón al lado para luego guardar su teléfono de nuevo en su bolsillo trasero.
Se miraron a los ojos ambos querían acercarse, tocarse, sentirse, besarse, pero ambos tenían miedo de la reacción del otro ahora que el ambiente era diferente. Pero arriesgando todo el menor se acercó puso sus menos en los hombros del mayor, se puso de puntillas y junto sus labios con los del castaño, fue solo un pequeño roce, pero aún así fue especial para ambos.
Se separaron y el menor sin decir más nada se giró y salió de ese lugar sin mirar el rostro del castaño por la vergüenza que tenía, podía sentir la mirada del castaño en su nuca, pero sigui su camino sin mirar atrás.
Cuando el menor ya había salido del lugar fue cuando por fin tuvo que arreglar su cabello y su traje un poco, antes de volver a su vida tan monótona y rutinaria de siempre, aún que muy en el fondo esperaba poder librarse de sus socios o de la gente que le quiera hablar y buscar al menor.
Solo quiero decir que lamento mucho a verme ido y que LIAM VOLVIÓ CARAJO QUE FELICIDAD
BUENO DISFRUTEN DE LIAM Y
VIVA ZIAM
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Amor Por Contrato [Ziam palik] [M-Preg]
Lãng mạnQué pasará cuando la empresa de la familia Malik este a punto de ir a la quiebra total, y sólo halla una solución. ¿Aceptará Zayn casarse con el mayor de los Payne para así poder salvar a su familia de la quiebra y de la humillación total? O donde L...