La Esposa Del Sultán | Siglo Magnífico [Editando]

𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 15

"Los amores"

1524

_______꧁_____꧂_______

Reyhan ya estaba sintiendo como su vientre daban fuertes punzadas, tenía contracciones.

— Fátma — llame desesperada

— Mi Sultana — Fátma se acerca Reyhan

— Trae a la partera — dije agitada

Fátma fue en busca de la partera, mientras que Reyhan sentía un fuerte dolor en su vientre

Fátma volvió junto a la partera, quién la reviso, después, empezó el trabajo de parto.

— Sultana, usted puede, su bebé debe salir — motivo la partera

Horas después, Reyhan dió a luz a un bebé, quién no paraba de llorar.

— Felicidades Sultana, es un principe sano — felicito la partera

— Que bien... — mi felicidad fue interrumpida por otro dolor

La partera se volvió a poscisionar para recibir al otro bebé.

Luego de algunos minutos, el segundo bebé salió, al instante empezo a llorar.

— Sultana, son un principe y una hermosa Sultana — felicito la partera

Fue lo último que escucho Reyhan antes de caer inconsciente del cansancio, había estado durante horas en trabajo de parto, pero había valido la pena.

Cuando Reyhan despertó, se encontró con Neylan y Fátma cargando a sus mellizos.

— Felicidades mi Sultana, ahora tiene dos niños más — felicito Neylan con una gran sonrisa siendo dibujada en su rostro

— Demen a mis hijos, quiero verlos — pedí con los brazos abiertos

— Le informaré esto a su majestad — Fátma salió con rapidez de mis aposentos

En otros aposentos, se encontraba el Sultan, escribiendo cientos de poesías para su querida Reyhan.

Su tranquilidad fue interrumpida con un Agha entrando con prisa en los aposentos.

— Su majestad, Fátma Hatun desea verlo — informo el Agha

— Que entre — accedió el Sultan sin quitar la mirada del papel donde estaba la poesía escrita

Fátma entra a los aposentos de Süleyman.

— ¿A qué vienes? — pregunto el Sultan

— Su majestad, la Sultana Reyhan acaba de dar a luz — informo Fátma

No podía explicar lo feliz que estaba Süleyman al escuchar aquellas palabras de Fátma.

Süleyman salió de sus aposentos y camino hacia los aposentos de Reyhan, que no quedaban muy lejos de los suyos.

— Mi Sultan — llame mientras cargaba a mi pequeña hija