VII

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Kyle estaba en casa, sentado en su escritorio copiando los apuntes.
Al terminar, la curiosidad le ganó y revisó el resto del cuaderno de Craig.
Efectivamente, había como máximo diez apuntes de todo el año en su cuaderno de matemáticas.
Pero, no pudo evitar notar cierta hoja, donde había cierto dibujo que captó su total atención.
Un corazón, con la letra K dentro de el.

"¿A Craig le gusta alguien? ¿Alguien cual nombre empieza con...? ¿¡Será...!? ¿¡A Craig le gusta Kenny!?"

Inquieto, cerró el cuaderno de inmediato. El nudo en la garganta volvió.
Todo el tiempo, fue Kenny. En ningún momento Craig pensó en Kyle.

"No puede ser... ¡El maldito maricón me enamoró y resulta que le gusta Kenny! Dios... Quiero morir, ¿Se habrá acercado a mí con la intención de acercarse a Kenny? Me siento tan... ¿Triste? ¡Estoy celoso! Ugh."

Se sentía molesto y celoso por algo del que no estaba seguro.
Sabía que eso no estaba realmente correcto, pero no se le ocurría nadie más quien podía ser. No sabía de ningún otro nombre que empiece con la letra K.

"¡Todo el mundo creyendo que Craig y yo somos algo, y cuando por fin empiezo a pensar en un 'nosotros' como pareja descubro que a Craig le gusta Kenny!" Sentía como su corazón lloraba. "¡O incluso podría ser Kevin! ¿Que hago ahora con estos sentimientos hacia él? Pude desechar los que tenía por Stan gracias a Craig, ¿¡Donde está el tercer clavo para sacar al segundo clavo que quitó al primero!?"

Nuevamente, su mamá gritó desde las escaleras.

-¡Kyle tienes visita!

"Hablando del demonio..."

-Hola Craig.

El chico se encaminó sin decir palabra y lo abrazó.

-¿Cr-craig?

-Te extrañé.

A Kyle le subió la temperatura del rostro.

-¿C-cómo es eso?

-Extrañé tu molesta y pequeña compañía. Estuve solo casi todo el día, a ratos hablé con Kenny. Dios, es molesto, necesito recargar energías contigo.

-A-ah. Claro, ¿Pero no estás incómodo? Digo, con el escritorio-

Sin decir nada, Craig lo tomó en brazos y se sentó en la silla él, con Kyle sobre él, con vista hacia el escritorio.

-Tu sigue con lo tuyo.

-Bien...

Aunque fue cómodo y relajante para Craig, Kyle se sentía muy nervioso, y a pesar de no mostrarlo, Craig también lo estaba.

-¿Siquiera peso algo para tí?

-No. Es como tomar un par de uvas.

Los latidos de Kyle aumentaban cada vez más, parecía estar en sincronización con los de Craig.
Parecían latir como uno solo.

Kyle no lograba concentrarse en su tarea, no con el pelinegro abrazándolo firmemente.
Además de hacer su mayor esfuerzo para contener su tos, ya que no quería molestar a Craig, quien parecía estar apunto de quedarse dormido.

Nuevamente, una bola de nieve golpeó la ventana.
Kyle intentó levantarse para abrir, pero Craig no se lo permitió.

-Uh... ¿Craig?

-Sólo es Kenny. Si tanto quiere verte, pasará por la puerta.

Otra bola de nieve golpeó la ventana.

-Pero-

-Déjalo. Tampoco quiero verlo.

Luego, una pequeña piedra golpeó la ventana.

Juntos A SolasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora