breathe ─ kooktae

S E G U N D O

"Te juro Tae, lo echaron porque se supo que había robado dinero del jefe, o al menos eso me contaron". Su mejor amigo le hablaba por el otro lado de la línea mientras él estaba en la cocina preparando el almuerzo para el día siguiente. Su madre estaba en la habitación después de la discusión que habían tenido, el castaño solo trataba de no pensar en eso y por eso había decidido llamar a su mejor amigo aunque este estuviera trabajando.Soltó una pequeña risita y cambió de lado su teléfono a la oreja derecha mientras se sentaba en una de las sillas al rededor del mesón de la cocina.

—A ti te cuentan muchas cosas, ya no sé cual creerte.—Soltó divertido.—De igual manera, sabía que lo despedirían, ni siquiera hacía su trabajo bien, por algo entraron a robar en pleno día.—Subió y bajó sus hombros.—¿Sabes si ya tienen a otra persona para el cargo de guardia?

"Pfff, me ofendes TaeTae, el chisme se sabe y se cuenta completo, sino no se cuenta". Taehyung rio nuevamente hacia las ocurrencias de su mejor amigo. "Un chico joven en realidad, guapo, como 1.80, tatuado, y guapo, ¿O ya lo dije?"

—¿Tiene algo de relevante el que sea guapo?—Rodó los ojos y soltó una risa.—O que esté tatuado.

"No en realidad, solo que ya sabes, soy tan gay". Jimin rió bajito y aclaró su voz. "No le digas a tu madre". Taehyung negó soltando una risa y suspiró. "Te dejo Taehyunnie, tengo que actualizar la lista de huéspedes, nos vemos luego, me cuentas como va JaeMin en el hospital."

El castaño se despidió y cortó la llamada dejando su teléfono en el mesón.
Le gustaría tanto ser liberal como su mejor amigo, pero en realidad nunca había intentado siquiera expresarse como él quería, con la mentalidad de su madre, la enfermedad de su hermano, el fallecimiento de su padre y su necesidad de generar ingresos, era casi imposible que eso pasara; el castaño al final del día solo estaba por y para su familia y su hogar, no para él mismo.

༄

Lunes nuevamente.
De todas formas estaba feliz, su mejor amigo al fin estaba en turno de día nuevamente y eso le ponía contento, tenía algo de compañía.

—¡Tae!—Hablando del rey de Roma, le llamó mientras caminaba rápidamente hacia él.—Llegó el nuevo guardia, vamos a conocerlo.—Sonrió enormemente.—

—Quieres ligártelo.

—La verdad es que no, no es mi tipo ahora que me fijo bien en él.—Se encogió de hombros.—Pero se ve simpático, invitémosle a almorzar.

—Cálmate, parece que estás desesperado por hacer amigos.—Río.—¿No tienes suficiente ya con tenerme a mí de amigo?

—Eres oro y mucho más, Taehyunnie. Pero no te haría mal socializar un poco.

—Solo le hablaré porque el jefe me indicó guiarlo en su primer día, enseñarle todas las posibles entradas al hotel y todo eso.—Suspiró.—Que flojera, ¿No quieres hacerlo tú?

—¿Qué te acabo de decir? ¡Socializa, niño! si me muero ¿Te quedarás solo?

—Si.—JiMin puchereó.—Y no quiero estarlo.

—Por lo mismo, ve a hablarle.—Park desvió la mirada hacía la entrada del hotel, donde estaba ingresando ya con su uniforme adecuado el famosísimo nuevo guardia.—

Taehyung ladeó la cabeza fijándose en el hombre a unos metros de distancia; alto, pelinegro, pálido y con su brazo derecho repleto de tatuajes, y tenía unos ojitos de Bambi muy atractivos. Tomó uno de los planos donde se podía ver la estructura del hotel y se encaminó hacia el nuevo trabajador.

—Hola.—Se inclinó levemente y el contrario copió su acción.—Mi nombre es Kim Taehyung.—Sonrió.—Soy el recepcionista, puedo guiarte en lo que necesites, estoy...—Giró levemente su cuerpo para luego apuntar con su índice su puesto de trabajo a unos 3 metros de la entrada.—Ahí, por si necesitas algo.